miércoles, 5 de octubre de 2016

Guillermo Tupper. Diario de Campaña. 1823-1828

I. Campaña de Nuestra Expedición Auxiliadora del Perú en 1823

I. Campaña de nuestra expedición auxiliadora del Perú en 1823.
Las tropas dejaron Santiago el 4 de octubre de 1823, al mando del coronel don José María Benavente, tan famoso por su participación en las campañas del general [José Miguel] Carrera. La división estaba mejor equipada de lo que es usual en Chile. Consistía en dos cuerpos de infantería y uno de caballería, a saber: el batallón Nº 7, mandado por el coronel [José] Rondizzoni, italiano que sirvió largo tiempo en los ejércitos franceses y hombre de buena reputación en este país; el batallón Nº 8 (del que soy capitán de granaderos), mandado por el coronel [Jorge] Beauchef, oficial francés que se ha distinguido mucho en la guerra patriota; un regimiento de Húsares, encabezado por el coronel [Benjamín] Viel, compuesto de unos cuatrocientos hombres. La reputación de Viel, nacido en Francia, no está aún bien establecida; hay algunos pros y contras en la estimación de su carácter militar. Esta campaña probablemente le pondrá en luz clara. Las dos terceras partes de los soldados de estos cuerpos son reclutas, con apenas dos o tres meses de servicio. Aborrecen el clima del Perú y, por consiguiente, se muestran muy descontentos de alejarse de Chile.
Llegamos a Valparaíso el 9 de octubre, con pérdida estimada de cuarenta desertores en cada regimiento, a despecho de la gran vigilancia de parte de los oficiales y del miedo a un cuerpo de milicia que marchaba a nuestros flancos.
Los contingentes fueron embarcados el 10 en la mañana, mostrándose más animosos de lo que habría cabido esperar. A bordo se sumó a cada batallón de infantería un total de cien reclutas novicios.
Se dispuso que una compañía de Dragones saliese desde Concepción para juntarse al coronel Viel, pero en el camino desertó hasta reducirse a cuatro hombres.
Salimos de la bahía de Valparaíso el 15 de octubre de 1823 y tuvimos hermosas brisas del sur hasta el 20, en que la goleta Moctezuma hizo señales para que el coronel Beauchef se trasbordara a comer con Benavente. Me convidó a que lo acompañara. Estábamos entonces a 24°48’ latitud S. y a 71º 5’ longitud O.
Pasamos una tarde agradabilísima en pleno Océano Pacífico, junto con Viel y Rondizzoni. Formábamos un curioso grupo de ingleses, franceses, italianos y criollos, naturales de América, navegando con alegría y sintiendo unánimemente el deseo de terminar con los conquistadores del Nuevo Mundo.
El coronel Benavente nos informó que tenía intención de hacer escala en Cobija, a fin de obtener noticias antes de continuar para Arica.
Al día siguiente la Moctezuma se separó de nosotros, dirigiéndonos hacia Anca.
Arribamos a Arica el 26 de octubre. Teníamos hecho el ánimo para encontrar la causa patriota en el Perú en un estado floreciente. Fácilmente se puede concebir nuestra sorpresa cuando se nos informó que el general Santa Cruz había sido completamente derrotado por el general español Jerónimo Valdés, sin disparar un solo tiro. Los restos de su ejército se habían retirado a Ilo, [Francisco Antonio] Pinto y otros oficiales, con otra división de patriotas, estaban retirándose hacia Lima. Se decía que los españoles ocupaban la ciudad de Arequipa con cinco mil hombres. En una palabra, la causa patriota, al revés de lo que nosotros esperábamos, atravesaba por un estado desanimador.
Como el 29 de octubre la goleta Moctezuma se dirigió a Lima para traer órdenes de Pinto. Este Pinto es un general chileno al mando de las tropas de su país y que vino al Perú en la primera expedición. El coronel Benavente tiene órdenes de colocar nuestra división bajo su mando, obrando él mismo como mayor general.
El 31 de octubre, la Prueba, donde viaja el almirante [Jorge Martín] Guise, levó anclas hacia un destino desconocido.
Al llegar aquí encontramos al peruano [Mariano] Portocarrero, Gobernador General de Arica, en condición de arrestado a bordo del bergantínCongreso, que forma parte de la escuadra de Guise. Hay versiones de que el general Santa Cruz ha capturado correspondencia de Portocarrero al enemigo.
Arica es una miserable dudad de como mil quinientos habitantes. La comarca es montañosa, árida y estéril. Los habitantes son todos zambos o negros. Se dice que la fiebre o calentura es común aquí.
El 3 de noviembre llegó la fragata Lautaro con los animales para la caballería y unos pocos reclutas. El 4 arribó la Minerva desde Coquimbo, con el coronel Aldunate del batallón Nº 2 y doscientos reclutas. El 5 llegó desde Valparaíso la India, trayendo más reclutas, que fueron distribuidos entre nosotros y convertidos en dos batallones de seiscientos hombres cada uno.
Se reforzaba la noticia de que las tropas del general Santa Cruz se habían sublevado en Ilo y se estarían dirigiendo hacia Lima.
El 9 de noviembre llegó de Lima un buque con la noticia de que [Simón] Bolívar estaba aún en esa ciudad, lo que provocó entre nosotros bastante sorpresa porque creíamos que se hallaba persiguiendo al general español [José] Canterac. Empezamos a sentir nos abandonados.
El 10 llegaron noticias desde Tacna de que el general Jerónimo Valdés [se] estaba acercando a esa ciudad una fuerza de número desconocido. Nuestra división había caído en algún desorden; los oficiales de caballería estaban embarcando aún sus animales. Esto en realidad es bastante pequeño y trivial.
Nuestro embarque continuó el 11 y 12.
La fragata Prueba había vuelto algunos días antes.
Era opinión general de que debíamos dirigirnos a algún puerto vecino a Lima para intentar salvar las diferencias que había entre el marqués de Torre Tagle y Riva Agüero. Durante el mando de este último la expedición encabezada por Santa Cruz había dejado Lima y poco después de su partida fue depuesto José de la Riva Agüero, siendo electo Torre Tagle en su lugar como Presidente de Lima.
Como la fuerza que dirigía el general Santa Cruz debía habérsenos juntado viniendo desde Ilo, y todavía no había aparecido, la prolongación de nuestra permanencia en Arica se hizo innecesaria. El coronel Benavente ansiaba evitar un combate que no nos sería favorable.
El 12 de noviembre estaban a bordo de los buques todas las tropas chilenas. Fui enviado con mi compañía de granaderos a bordo del Santa Rosa, navío de guerra peruano alquilado. Aquí encontré al infortunado general Portocarrero, quien, pese a la acusación levantada contra él, estaba de un ánimo excelente. La casi adoración con que se mira a este hombre en Arica se vuelve interesante. Un Gobernador que obtiene una porción tan grande de cariño y estimación no puede ser un hombre detestable. Según parece, este sujeto ha sacrificado gran parte de su considerable fortuna patrimonial en la causa del Perú, por eso encuentro raro que por un momento siquiera hubiese olvidado sus excelentes principios por cualquiera oferta vil de los españoles. Siendo, por otra parte, desesperada la causa de éstos.
En la mañana del 13 vino un bote de la Protectora (conocida también como la fragata Prueba) a sacar del bergantín Congreso al general Portocarrero, pues el almirante Guise estimaba que no debía ponerse en contacto con los oficiales de Chile. Este es un acto de despotismo semejante a todos los que últimamente acostumbra permitirse este comandante, quien se está haciendo muy impopular.
Circulan muchas noticias respecto a los españoles; se dice a veces que se están acercando a Arica, otras que se están retirando a la Sierra.
Zarpamos de Arica el 17 de noviembre de 1823, dirigiendo nuestro rumbo hacia el norte, sin saber exactamente a dónde íbamos. Anclamos de noche y en la mañana siguiente, temprano, nos alcanzó un navío anunciándonos la derrota de Canterac a manos de los generales Sucre y Miller. Ciertamente nos sorprendimos mucho con esta noticia, que cambiaba enteramente el aspecto de la contienda. Nuestra ansiedad por llenar al puerto que nos es destinado resulta insoportable.
El convoy en que viajo consiste en dieciocho buques. El general Santa Cruz nos acompaña con cerca de trescientos hombres. El almirante Guise, en la fragata Protectora, obra como nuestro comodoro.
El 20 de noviembre de 1823, nos encontramos con un bergantín que saludó al almirante con dieciséis cañonazos, respondiendo éste con diecinueve. Nos habíamos quedado atrás del convoy esperando a varios oficiales peruanos que venían en una embarcación dejada especialmente en Arica para recogerlos. Nos alcanzaron de noche. Todos eran oficiales de tierra que se habían separado de Lanza, jefe que está en La Paz. Después de la retirada de Santa Cruz frente a los españoles, estos oficiales fueron enviados para juntarse a Lanza, a quien engañaron mucho, lo que me pareció mal.
Lanza, que ha vivido en La Paz como nueve años, no puede ser un oficial tan incompetente como ellos lo pintan, y es mucho más probable que estos fugitivos le culpen para atemperar la cobardía de haberle abandonado.
Alcanzamos al convoy en la mañana del 21. El capitán Bonchard fue a bordo de la fragata almirante con los oficiales peruanos que habíamos sacado de la corbeta que venía de Arica. Al volver nos informaron que el general Pinto y [Rudesindo] Alvarado habían llegado a Pisco.
Cruzamos durante cinco días el Morro de Zama, hasta que fuimos interpelados por la fragata Protectora, indicándosenos que tomáramos rumbo para Arica, adonde llegamos el 26 de noviembre.
Pronto se nos reunió el resto del convoy. Algunos buques se habían dirigido a Ilo para buscar noticias y abastecerse de agua, y no habiéndolas encontrado se vinieron para Arica.
Con gran sorpresa supimos que el general Pinto había dado órdenes para que todos los buques chilenos que se proveyesen de agua en Arica o Ilo se dirigieran a Coquimbo. No tenemos informes fidedignos acerca de los motivos de esta extraordinaria vuelta de la expedición.
Se dice por muchos, en este sentido, que habiendo suplicado Bolívar a Pinto que lo ayudara en sus esfuerzos contra Riva Agüero, y habiendo rehusado el segundo, le habría dicho Bolívar que los chilenos podían volverse a su país. Hay algunos que atribuyen a Pinto designios de naturaleza muy seria, pero es de esperar que su ambición no le hará olvidar enteramente su deber.
La pérdida material causada por la decisión de retornar es inmensa; han sido muertos cerca de doscientos caballos; se han fletado nuevas embarcaciones de transporte. Las tropas enemigas con esto mejoran su reputación y, en verdad, la causa patriota en Perú ha degenerado en insignificante.
Durante nuestra estación en la bahía de Arica fui casualmente a bordo del bergantín Balcarce, donde ví al general Pinto y a Alvarado. Pinto es bajo de estatura, de continente expresivo y modales políticos y agradables. El general Alvarado es un hombre alto y delgado, de rostro fino; no le he hablado pero encuentro algo interesante en su exterior.
Los españoles no nos han molestado. Sabemos que una pequeña tropa de ellos está en la ciudad de Tacna, bonita población, no muy grande, a unas catorce leguas de Arica y de unos cinco mil habitantes.
Nos dejaron las tropas peruanas el 4 de diciembre. Zarparon el Congreso, que manda el capitán Young, a cuyo bordo estuvo Portocarrero; elBalcarce, conduciendo al general Alvarado, etc. Entiendo que su destino es el Callao. El coronel Sánchez viajó también hacia aquel puerto, con órdenes de llevar a Coquimbo las pocas tropas chilenas que aún quedan en el Perú.
Dejamos Arica el 6 de diciembre, convoyados por la fragata Lautaro, que había echado al mar ciento ochenta caballos y montado en su lugar a veintiocho cañones.
Cuatro días después de nuestra partida de Arica nos separamos del convoy, permaneciendo durante todo el viaje muy escasos de provisiones y agua. Debido a ello perdí a dos de mis granaderos. Arribamos a Coquimbo el 17 de enero de 1824.
Aquí encontramos a la Providencia, capitán Gurd, con el batallón Nº 7, y a la Lautaro que había llegado con sus caballos en buena condición, trayendo también nuestra compañía de cazadores. La Sesostris había zarpado a Valparaíso con el coronel José María Benavente. Estamos muy inquietos por La Paz, la que al salir tenía muy poca agua y provisiones, y que ha permanecido ya treinta y cuatro días en alta mar.
Llegó La Paz el 15 de enero, habiendo sufrido en el trayecto menos desastres que los esperados. Sus tropas habían sido puestas temprano a ración de agua y provisiones, de tal modo que éstas duraran hasta la llegada. Traía, sin embargo, muchos enfermos.

II. Primera expedición a Chiloé. 1824.
Debo apuntar que el 8 de enero de 1824 llegó de Valparaíso a Coquimbo la Independencia, capitán Délano. Traía como pasajero al comodoro Forster, que había retornado al servicio de Chile ostentando el grado de Comandante en Jefe de la Escuadra. Vino a izar su insignia de tal en la fragata Lautaro, y dijo que traía órdenes de llevar las tropas a Talcahuano, desde donde suponía que habría de zarpar otra expedición para conquistar Chiloé. Se comentó que a lo mejor la mandaba el Director Freire.
Otro pasajero que venía en la corbeta Independencia era el teniente coronel Ramón Picarte, que había sido nombrado Gobernador de Valdivia y se encaminaba a su destino.
A su arribo a Coquimbo el general Pinto fue designado Intendente de la ciudad y provincia, colocándose a su disposición enteramente todas las rentas percibidas y acumuladas durante algún tiempo, que no eran nada despreciables. Los cuerpos del ejército y las tripulaciones de los buques recibieron dos meses de paga.
Coquimbo es una pequeña y floreciente ciudad de ocho mil habitantes, poco más o menos. El paisaje de la comarca circunvecina no es agradable, pero hay, sin embargo, algunos valles fértiles en las cercanías. Dicen que las rentas de esta provincia sobrepasan los 15.000 dólares anuales, y que salen principalmente de la exportación del cobre. El tráfico de este artículo está casi enteramente absorbido por los buques ingleses.
La bahía es hermosa y bien amparada, pero el puerto, que dista como tres leguas de la ciudad, no tiene agua. Los barcos usan la que sacan de un lugar a mitad del camino desde el puerto a la ciudad; de vez en cuando resulta agua salobre.
Coquimbo tiene una sociedad más bien atrasada; creo que las mujeres no son por lo general tan bien educadas como las de Concepción. Por cierto, no tienen punto de comparación con las de Santiago. Hay, no obstante, algunas familias tan agradables como hospitalarias, entre éstas la de mi compatriota el señor George Edwards ocupa el primer lugar. Es éste un caballero establecido en Coquimbo durante unos veinticuatro años; su esposa es una amable mujer y su familia perfectamente bien educada. Mantiene una casa bastante amplia y se cuenta que ha juntado considerable fortuna en el trabajo del cobre. Mientras permanecimos en esta ciudad tuvimos un baile; las asistentes eran más lindas que elegantes; me pareció que las mujeres poseían mucha simpleza y poca finura.
En el intertanto se hacían preparativos para nuestro alejamiento. Se nos informó entonces que mi batallón, el Nº 8, debería embarcarse junto con el Nº 7 hacia Talcahuano, y salir de allí a la conquista de Chiloé mandados por el Director Freire. Efectuada ésta deberíamos volvernos inmediatamente a Coquimbo, según se decía, donde el general Pinto estaría encargado de reorganizar un ejército de seis mil hombres para emprender nuevamente la emancipación del Perú.
Nos embarcamos hacia Talcahuano el 27 de enero de 1824. Mi batallón, el Nº 8, a bordo de la corbeta Independencia y el Nº 7 en la fragataLautaro.
El 11 de febrero llegamos a la isla Quiriquina. Encontramos en ella muy pocos preparativos, aunque estaba convencido de que el pueblo de Concepción era muy activo. Por regla general los oficiales parecían tener pocas esperanzas lisonjeras sobre la campaña contra Chiloé. El Director Freire era secundado apenas como debía serlo.
La fragata Lautaro llegó como el 15, necesitando de todo, según dice el comodoro Forster. La Guardia de Honor y el batallón Nº 1 arribaron de Talcahuano a Quinquina el 16, no alcanzando a constituir la primera un cuerpo de doscientos hombres y el segundo bordea los cuatrocientos cincuenta.
El 18 de febrero pasó por Quinquina la corbeta Voltaire, capitán Simpson, dirigiéndose a Valdivia. Conducía a bordo al coronel Picarte con su familia y al mayor Young, quien venía a unirse al segundo batallón de la Guardia de Honor.
El 27 llegaron de Valparaíso la corbeta Chacabuco y un transporte, trayendo ambos buques las provisiones que tanto habíamos necesitado y de cuya llegada habíamos empezado a desesperar.
Nuestra fuerza había sido distribuida en tres divisiones, a saber:
a) Todas las compañías ligeras, al mando del coronel Beauchef. Segundo jefe el mayor Godoy y en tercer lugar el mayor Young. Esta división formaba la guardia avanzada.
b) Las compañías centrales, al mando del Coronel Pereira. Segundo jefe el coronel Thompson.
c) La reserva con todas las compañías de granaderos, al mando del coronel Rondizzoni. Segundo jefe el capitán Tupper.
Mi nombramiento por encima de tantos mayores y coroneles causó asombro.
El 29 de febrero de 1824 vinieron los buques de la escuadra a recogernos a la Quiriquina. En la tarde había llegado una orden general de que las divisiones se pusieran en movimiento, y se nombró a mi batallón Nº 8 para que tomara el avance. Las tropas se embarcaron el 1º de marzo, saliendo de aquí pasado el mediodía. Cuatro compañías del Nº 8 a bordo de la Independencia; el batallón Nº 7 a bordo de la fragata Lautaro, en que iba también el Director Freire. El batallón Nº 1 de la Guardia fue conducido en diferentes transportes.
El 4 de marzo fuimos a reconocer la isla Santa María, porque se corrió la noticia de que había en ella un corsario. Pero sólo encontramos un marinero americano, y en consecuencia seguimos inmediatamente para alcanzar el convoy en Valdivia.
Arribamos a Valdivia el 10 de marzo, después de un viaje muy fastidioso. Encontramos anclados en la bahía al bergantín Galvarino y a laVoltaire. Al llegar me dirigí luego a la ciudad, donde vi a todos mis antiguos amigos.
Dejamos a Valdivia el 16 de marzo, componiendo el convoy los siguientes buques de guerra: la Lautaro, la Independencia, la Chacabuco, laVoltaire y el Galvarino, y los siguientes transportes: el Valparaíso, el Pacífico, el Ceres y el Tucapel.
Nuestra fuerza consistía de los seiscientos hombres que hacen el primero y segundo batallón de la Guardia, de los cuatrocientos hombres del Nº 1, los trescientos del Nº 7 y los cuatrocientos treinta del Nº 8, según la mayor exactitud posible. De todo este contingente los más eran reclutas. Estaba depositada la máxima confianza en el batallón Nº 8.
Fondeamos en Chiloé el 24 de marzo de 1824. Los buques habían sido separados por una tormenta y se reunieron esa mañana.
El 25 fue desembarcado el Nº 8 con la compañía ligera de la Guardia. Habiendo marchado vigorosamente para tomar el fuerte Chacao, llegamos como a las ocho de la mañana ante la fila de sus cañones. Se nos dispararon siete tiros de a 24; los dos primeros pasaron junto al coronel Beauchef y a mí, los otros cinco fueron considerablemente lejos.
Un capitán Quinteros del Nº 7 fue enviado adelante a parlamentar con el comandante del fuerte, y según entendí ambos eran hermanos. Hicimos alto mientras volvía. Retornó pronto y nos informó que su hermano había abandonado su puesto. Avanzamos en seguida y tomamos el fuerte sin ningún obstáculo, testificando simultáneamente la partida de siete piraguas que contenían las fuerzas del Quinteros realista. Este fuerte se hallaba sin ninguna defensa por el lado de tierra. Montaba dos cañones de a 24, que por su posición elevada dominaban todo lo que se extendía ante su frente. Los buques, con sus cañones, no habrían podido resistirlos.
En la misma mañana del 25 de marzo fondeó la escuadra junto a la batería de Chacao. Esa noche todavía fue tomada otra por el capitán Cobbett, a la cabeza de cuarenta o cincuenta soldados de la Guardia.
Durante nuestra permanencia aquí fue enviado el mayor Godoy como parlamentario, con bandera de paz, hacia la ciudad de San Carlos. Volvió el 27. Los había intimado a rendirse pero sin éxito.
El país es hermosísimo y muy parecido a Inglaterra. Parece que el Gobernador Quintanilla se había afanado mucho por el adelanto de estas islas. Están cubiertas de ovejas, hay mucho cultivo, y las papas crecen casi espontáneamente.
El 29 de marzo fue embarcada en la Chacabuco, y el Ceres una división bajo el mando del coronel Beauchef. Se componía de los batallones números 7 y 8, junto a la compañía de granaderos del Nº 1. Su destino era dirigirse a San Carlos por el camino de Dalcahue, para evitar de ese modo el estero de Pudeto que estaba muy crecido.
Desembarcamos en Dalcahue el 31 de marzo y el 1º de abril empezamos nuestra marcha. Como a las doce hicimos alto en las ciénagas de Mocopulli, que es un inmenso pantano. Reiniciamos nuestro camino a la una y media. La vanguardia estaba aún cerca de mi división de granaderos. Apenas habíamos avanzado veinte pasos cuando un oficial de la vanguardia avisó que divisaba al enemigo tomando puntería  arrodillado. Le terminaba de decir el coronel que cargase cuando fuimos asaltados desde todas partes por un pesado fuego de mosquetería. Inmediatamente fuimos puestos en la mayor confusión. El Nº hizo alto y se formó en columna cerrada. Todos los oficiales del Nº 8 llevaron sus compañías al combate del modo más bello; la línea del enemigo estaba apenas a diez pasos de distancia de nosotros. El coronel mandó a los granaderos que cargasen; nos echamos sobre el enemigo apoyados por el solo fuego de cinco o seis soldados, y, naturalmente, nos vimos obligados a retirarnos al punto.
El coronel Beauchef me mandó sostener el fuego mientras iba a dar órdenes al Nº 7. Sin embargo, ese batallón no juzgó propio el avanzar y estuvimos así expuestos durante hora y media al mortífero efecto de un fuego bien dirigido, perdiendo en ese lapso como doscientos hombres entre muertos y heridos.
Me aventuré a una nueva carga, pero fui apoyado sólo por tres hombres; al llegar a la línea del enemigo uno disparó su arma en mi costado izquierdo, estando yo en ese instante ocupado en llamar a mis soldados con mi espada. La bala, sin embargo, no hizo más que raspar el hueso de mi hombro izquierdo, pero el adversario prosiguió su embestida con un ataque de bayoneta y me hirió ligeramente en la pierna derecha. Un valiente soldado que estaba conmigo recibió una herida de bayoneta en la cara. Otro fue muerto. Con todo, los arbustos favorecieron nuestro escape.
Al volver donde mis hombres noté que su número disminuía muchísimo y, observando a alguna distancia al coronel que procuraba formar a los de nuestro batallón que se habían retirado del fuego, ordené volver atrás en el mejor orden posible, estando entonces casi enteramente rodeado por el enemigo. El Nº 7, que se había mantenido hasta ese momento a retaguardia en buen orden, se retiró sin ninguna razón aparente y nos dejó entregados a nosotros mismos; todo mientras me juntaba a los restos de mi batallón Nº 8. El coronel Beauchef, encontrando las cosas casi desesperadas, tomó la atrevida resolución de atacar al enemigo en columna cerrada. Su conducta nos animó a todos, y, aunque estábamos en completo desorden, nos formamos y quitamos su posición al enemigo con la punta de las bayonetas, casi sin resistencia, pues probablemente se apoderaría de él un terror pánico al ver la intrepidez de este puñado de hombres.
Debo observar que mientras nos estábamos formando, la caballería del enemigo intentó cargarnos, pero fue rechazada del modo más bizarro por el capitán Rodríguez y la segunda división, que se estaba retirando y se encontraba por lo tanto entre el enemigo y nosotros.
Perseguimos al enemigo como media milla y nos formamos sobre una pequeña colina en que el enemigo había dejado un cañón de a 4.
Antes del ataque referido, el enemigo se había formado en la posición más ventajosa, pues colocó varias compañías de infantería en figura circular sobre una especie de mordedura oculta por los arbustos. Marchamos perfectamente ignorantes de su vecindad, hasta que nos advirtió de ella la feroz descarga de mosquetería. Como antes mencioné, fuimos inmediatamente puestos en el mayor desorden y confusión y no fue posible formar de ningún modo a los soldados hasta que nOS retiramos.
La conducta de todo el batallón Nº 7 nos sorprendió mucho. Entiendo que los dos capitanes, Correa y Prado, deben ser juzgados por una corte marcial por no haber avanzado cuando se les mandó flanquear al enemigo. El coronel Rondizzoni ha mantenido hasta ahora una reputación distinguida, es un viejo oficial del ejército francés. Parece que las disposiciones que tomó habrían sido buenas si hubiesen sido ejecutadas. Después de ver a nuestro batallón en tal desorden, formó el suyo en columna cerrada, pues probablemente no querría ponerlo en el mismo peligro. Hasta aquí apruebo su conducta.
A pesar de que habíamos batido al enemigo, nuestras tropas estaban aterrorizadas por la inmensa pérdida que sufrimos entre muertos y heridos, y que ascendía a como trescientos veinte hombres. Por lo tanto nos volvimos a la boca del desfiladero para asegurar nuestra retirada durante el día siguiente. La efectuamos en buen orden y nos reembarcamos el 2 de abril como a las tres de la tarde, uniéndonos a los demás buques cerca del castillo de Chacao.
Pocos días después supimos allí la pérdida de la corbeta Voltaire, cuya tripulación se salvó. La Tucapel, que se había soltado también de sus anclas, atravesándose a la proa de la Lautaro, obligó a ésta a cortar sus cables y salir mar afuera. Donde estaban los buques la corriente tiene una velocidad de siete nudos por hora. El Director temía perder toda su escuadra. Y habiendo llegado noticias de Valdivia de que una flota española había cruzado el Cabo de Hornos, todos se llenaron de manifiesta consternación y se resolvió en un consejo de guerra, por los oficiales superiores, que volviésemos inmediatamente a Chile. Parte del batallón Nº 7 fue enviada por tierra a Valdivia.
Las fuerzas dejaron Chiloé corno el 15 de abril y experimentaron mal tiempo en su viaje a Talcahuano.
Aquí nos refrescamos hasta cierto punto. Se mandó invernar en Concepción al Nº 1. El primer batallón de la Guardia, más los números 7 y 8 fueron enviados a Valparaíso, adonde llegó nuestro cuerpo el 5 de mayo de 1824.
Hicimos guarnición en Santiago hasta el 29 de octubre de 1824, día en que marcharnos a la Villa Vieja de Aconcagua, donde sólo estuvimos cuatro días, pues se nos mandó a Quillota, como punto desde donde podíamos acudir a Valparaíso a la menor noticia. Se había tomado esta precaución en razón de aprensiones relacionadas con los buques de guerra españoles Asia y Aquiles, temiéndose que hicieran algún ataque sobre lis embarcaciones y el puerto de Valparaíso.
Habiéndose recibido noticias que avivaban más estos temores, se nos envió a Valparaíso, donde llegamos el 27 de noviembre de 1824. Permanecimos allí durante un mes; sin embargo, no se realizó ataque alguno. Encontré a Valparaíso un desagradabilísimo cuartel; sin ninguna clase de sociedad y las provisiones extremadamente escasas. Dejamos el puerto el 1º de enero de 1825 y llegarnos a Quillota el del mismo mes.
Quillota es una pequeña ciudad de como seis mil habitantes.
Mal edificada en su mayor parte. Las mujeres son agradables y de buen físico. Valparaíso se provee enteramente de frutas y vegetales en este lugar. Dejamos Quillota el 2 de febrero y llegamos a Santiago el 6, con una tropa de trescientos setenta hombres, sin haber hecho reclutas en ninguna parte.
El 23 de junio de 1825 el bergantín de guerra español Aquiles fue apresado y llevado a Valparaíso por un chileno llamado Pedro Angulo. 

III. Segunda expedición a Chiloé. 1825.
Después de la célebre batalla de Ayacucho, que efectuó la emancipación del Perú y de toda América meridional, sólo quedaba el Archipiélago de Chiloé en que flotase aún la bandera del despotismo. La inmediata vecindad de Chile a esas islas le señalaba su papel natural como libertador. Independientemente de las ventajas materiales que se esperaban del acrecimiento del Estado por la adquisición de esta clave del Pacífico, cada chileno sentía en lo íntimo cuán honroso sería para su país el expulsar a los españoles del último retiro de la monarquía.
El Director Freire ansiaba borrar su reciente desgracia y, en verdad, toda la nación estaba unánime en cuanto a la necesidad de emprender esta expedición.
Se habló de preparativos en junio, intentándose salir en noviembre de 1825. Sin embargo, no se observó actividad alguna en ningún departamento hasta el mes de octubre, haciéndose con ello más notable aún la inactividad característica del Director. No recibimos reclutas sino como tres semanas antes de nuestra partida de Santiago, y éstos eran hombres que requerían por lo menos tres meses de disciplina para llegar a semejar soldados.
Dejamos a Santiago el 13 de noviembre de 1825. La división consistía del batallón Nº 4, con seiscientos hombres; del batallón Nº 7, con trescientos setenta y cinco; de la Artillería, con sesenta; y ciento cuarenta y dos guías de Caballería.
Al segundo día de marcha el Nº perdió a dos hombres por haber bebido agua en un estado de violenta transpiración; realmente jamás he visto una muerte más repentina. Entre las once y las doce del día habíamos traspasado la inmensa montaña, llamada Cuesta de Zapata, con un sol quemante. Como a una legua de Lo Bustamante pasamos un riachuelo, donde algunos soldados del Nº 7 se inclinaron para beber, descansando y refrescándose un poco antes de hacerlo, pues conocían por experiencia cuán peligroso era proceder de otro modo. Yo mismo me coloqué junto al agua y obligué a todos los soldados de nuestro batallón Nº 8 a cruzar sin tomar una sola gota. Al cabo de un cuarto de hora se me dijo que habían sido encontrados dos hombres del Nº 7 muy enfermos, y todo por haber bebido agua. Me dirigí adonde ellos y llegué en el momento justo en que ambos expiraban.
Como a las cuatro de la tarde fue fusilado un desertor del batallón Nº 4, quien cayó preso veinte minutos después de su huida y condenado por una corte marcial formada al instante.
Llegamos a Valparaíso el 18 de noviembre, habiendo perdido toda la división el insignificante número de dieciocho desertores, lo que no es nada en consideración al volumen de las fuerzas de Chile. Se embarcó la totalidad de éstas inmediatamente.
Obtuve mi rango efectivo de mayor del Nº 8 el 28 de octubre de 1824, y sigo manteniendo este grado y puesto.
28 de noviembre de 1825.
Dejamos a Valparaíso ayer 27 de noviembre. La escuadra consistía de la fragata insignia O’Higgins (la María Isabel), en que viajaba el almirante [Manuel] Blanco [Encalada], conduciendo además al cuerpo de guías; la corbeta Independencia, estando a su bordo una compañía del Nº 7, su capitán es Henry Cobbett, pariente del célebre [William] Cobbett; el hermoso bergantín de guerra español Aquiles, traído últimamente al servicio de la patria, capitán Wooster; el bergantín de guerra Galvarino, capitán Winter; la fragata Lautaro, que sirve ahora de transporte, conduciendo al Nº 7, y la Resolución, transporte, conduce al Nº 8.
Oficialmente, las tropas que salieron de Valparaíso son:

Cuerpo
Contingente
Comandante
Mayor
Artillería
59
Mayor Amunátegui 
Batallón Nº 4
583
Teniente Coronel GanaAsagra
Batallón Nº 7
371
Coronel RondizzoniMaruri
Batallón Nº 8
378
Coronel BeauchefTupper
Guías
142
Teniente Coronel Borcoski 
Total
1.533

Los transportes Ceres e Infatigable habían salido previamente de Valparaíso hacia Concepción y Valdivia, para recoger en esos puntos a los batallones Nº 1 y Nº 6. El 14 de noviembre la corbeta de guerra Chacabuco se había dirigido también a Chiloé para introducir proclamas patrióticas y desembarcar algunos isleños. Estos, que han sido desterrados por Quintanilla a causa de sus principios patrióticos, habían ofrecido voluntariamente sus servicios para sembrar la semilla de la independencia entre sus connaturales. Tal es una medida que considero extremadamente antipolítica, pues había de dar a Quintanilla conocimiento oficial de nuestra proximidad.
Es evidente asimismo que el Director se lisonjea de que el Gobernador de Chiloé aprovechará esta oportunidad para entrar a una capitulación, capeando así el temporal que se le viene encima. ¡Cuán mal juzgan de los sentimientos que accionan el pecho de un hombre valiente y emprendedor! Si Quintanilla conserva aún el arrojo que le ha formado su reputación se estimará feliz de haber encontrado otra oportunidad de distinguirse, y no temerá las contingencias de una invasión. Lamento ver cómo el Director procura difundir esta idea y la general aceptación de que no habrá resistencia. La confianza es a menudo benéfica en las tropas, pero es casi siempre perniciosa en el Comandante en Jefe.
17 de diciembre de 1825.
Llegamos a Valdivia el 16 de diciembre, y encontramos a toda la escuadra, excepto a la Independencia y la Chacabuco. La primera bahía sido enviada hacia Chiloé, para sacar a la Chacahuco, que estaba cruzando la boca del puerto. Hoy llegaron estos dos buques. Parece que laChacabuco ha perdido un bote con un chilote y habrían sido tomados prisioneros un oficial chileno y quince soldados.
El Gobernador no quería recibir ningún ofrecimiento de paz. Mis anticipaciones en torno a su resistencia, por lo tanto, muestran que no estaban tan mal fundadas. Y en caso que encontremos resistencia, por lo que veo en la división, tengo muy poca confianza en el resultado de la campaña. El Director, el almirante y el mayor general han estado los últimos cuatro días en Valdivia (a nueve millas de la flota) y permanecimos entregados enteramente a nuestra propia inventiva.
Jamás he visto tal desorden. No tenemos hospital ni camas para los heridos. El batallón Nº 1, que se compone en su mayor parte de reclutas, ha estado cinco días en la orilla y hasta el momento no ha recibido los fusiles. En una palabra, todo proclama la total incapacidad del Director; realmente es un triste Comandante en Jefe.
23 de diciembre de 1825.El 18 de diciembre fue desembarcado el batallón Nº 8 en la isla de Mancera para refrescar a los soldados. El Nº 7 ya había llegado aquí. El batallón Nº 4 fue colocado en Niebla y el Nº 1 en el Corral.
Según parece, es general ahora la creencia de que Quintanilla hará una fuerte resistencia, aunque por mi parte estoy convencido de que si obramos con decisión no podrá resistirnos victorioso. Tenemos al menos mil excelentes soldados veteranos; los reclutas son hombres de muy buena pasta y se ha hallan disciplinados tolerablemente. Creo que nos hará más bien falta una cabeza para indicar que manos para ejecutar. En verdad, considero al general Freire enteramente impropio para un mando de esta clase. Mientras más observo sus operaciones más se me acrecienta tal opinión.
Evidentemente se ha dejado engañar por los conceptos de hombres interesados, de modo tal que no se ha dado el trabajo de poner a su división en un pie que le asegure la victoria. Se me ha dicho que sólo nos acompañarán dos miserables lanchas cañoneras, y sabemos que el enemigo tiene seis. Además los hombres están demasiado apilados en todos los buques; las viruelas han hecho ya considerables estragos en el batallón Nº 4.
El almirante Blanco, que manda la escuadra, probablemente tiene miras que, si se cumpliesen, no contribuirían al aumento de la gloria del Director. Aunque por lo poco que de él he visto lo considero demasiado honorable para permitir que sus pretensiones choquen con los deseos de la patria. En sus maneras es realmente un perfecto caballero.
10 de enero de 1826.Toda la escuadra salió de la bahía de Valdivia entre los días 30 y 31 de diciembre y el 1º de enero. El 8 de enero llegamos a Punta Guapilaqué.
Nuestra fuerza había sido aumentada como por mil hombres de los batallones Nº 1 y Nº 6, teniendo el primero como cuatrocientos cincuenta y el segundo, que fue embarcado en Valdivia, unos quinientos cincuenta hombres. La división está animada de un espíritu excelente y no dudo que si el Director confía principalmente en sus bayonetas encontrará una buena respuesta.
12 de enero de 1826. Fortaleza de Balcacura.La escuadra ancló el 9 de enero en la ensenada del Inglés y el 10 fue desembarcado el ejército en la playa de Yuste. Esa misma tarde el coronel Aldunate marchó con doscientos diez soldados a cargar sobre el fuerte de Balcacura, dejando a su izquierda el fuerte de Agüi.
Nos dirigimos hacia Agüi. Los cuatro navíos ligeros de la escuadra, la Independencia, el Aquiles, el Galvarino y la Chacabuco, cruzaron enfrente del castillo de Agüi del modo más hermoso. Por ciertas aberturas del bosque tuve el placer de ver pasar bajo el intenso fuego de Agüi a estos barcos, que lo hicieron con la mayor decisión y sin sufrir el menor daño.
De repente me encontré bajo el fuego de las cañoneras realistas, que estaban alejándose de Agüi para dirigirse a San Carlos. Después del cruce de los buques se acercaron a la costa y nos dispararon diez o doce tiros de bala y metralla, aunque no hirieron a un solo hombre. La venida de nuestros botes las obligó a navegar ligero atravesar la bahía.
Inmediatamente después de pasar por Agüi tomamos el camino que conducía a la costa de Balcacura.
Llegué al castillo de Balcacura como a las diez, con los granaderos y compañías ligeras del Nº 8, que formaban la vanguardia del ejército. El fuerte había sido ocupado ya por Aldunate, quien lo tomó sin resistencia.
Nota: el 11 fue destruida una cañonera al intentar dirigirse a San Carlos y fue muerto el teniente Oxley, del Galvarino.
15 de enero de 1826.En la tarde del 12 de enero fue embarcado el ejército en los cuatro buques de guerra, para ser conducido al lado opuesto. El 13 por la mañana fue desembarcado cerca del río Paulden sin experimentar ningún contratiempo.
La vanguardia, compuesta de cuatro compañías de cazadores y cuatro de granaderos, fue puesta al mando del coronel Aldunate. De esta avanzada se formaron subdivisiones de dos compañías cada una, encabezadas por un mayor. Personalmente yo mandaba las compañías de granaderos de los batallones Nº 6 y Nº 8; el mayor Asagra las compañías de granaderos de los batallones Nº 4 y Nº 1; el mayor Maruri las compañías ligeras de los batallones Nº 6 y Nº 7, y el mayor Young las compañías ligeras de los batallones Nº 1 y Nº 4.
Una fuerte división central fue formada por los batallones Nº 1, Nº 4, Nº 7 y Nº 8.
La retaguardia la llenaba el Nº 6 y el escuadrón de guías.
Considero estas disposiciones extraordinariamente buenas y creo que no podernos dejar de combatir en procura de una gran victoria.
En la noche del 13 ocupamos ciertas alturas como a una legua de San Carlos, en la chacra de Cuadros. Como a las tres de la mañana del día 14 los botes y lanchas cañoneras, capitaneadas por Bell, hicieron un magnífico ataque sobre los cañoneros enemigos, bastante protegidos por el fuego de dos baterías y por varias compañías de infantería que había en la orilla. Después de un rato de dispararse ambos bandos con eficiencia los nuestros capturaron tres botes y una lancha con dos cañones de a 12 cada uno y los llevaron a los buques. Jamás he presenciado una vista más extraordinaria. Sucedió así: la noche era hermosísima y en un momento determinado todo quedó silencioso, parecía que toda la naturaleza esperaba en callada suspensión el próximo combate. Un instante después todo era tumulto, confusión. Resonaban por las colinas vecinas las rociadas de balas que venían de la orilla, el tremendo rugido de los cañones de a 24, los gritos y aullidos de los abordados y abordadores, y, sobre todo, los tiros del ejército enemigo desde sus elevadas posiciones; el ¡Viva la patria! De un lado era respondido por el ¡Viva el Rey! del otro. Es imposible presenciar un ánimo más completo que el de nuestro pequeño contingente; no dudo por más tiempo de la próxima victoria.
Como una hora después que todo estuvo de nuevo en silencio, fue puesto en movimiento el ejército, que ocupó como a las ocho de la mañana una fuerte posición en la loma de Yauca, con nuestro flanco izquierdo en la playa. En seguida nuestra infantería obligó a las avanzadas enemigas a pasar el estero de Poquillihue.
El enemigo ocupaba las alturas de Bellavista, sobre San Carlos, como a media legua de nuestro cuartel general, resguardando su flanco derecho por la batería de Poquillihue. Esta posición era extremadamente fuerte y estaba bien amparada por varias piezas de cañón, aparte de los fosos, empalizadas y otras defensas. Según entendí, su ejército lo constituían unos dos mil quinientos fusileros, unos cuatrocientos hombres de caballería de todas las armas y como mil doscientos o mil cuatrocientos esgrimiendo picas.
A las tres de la tarde las cuatro lanchas apresadas se distanciaron velozmente de los buques y empezaron a bombardear a la batería de Poquillihue y a todas las piezas de campaña del enemigo que podían alcanzar. También nuestra artillería de campaña obró vigorosamente con sus cuatro piezas sobre las líneas del contrario. El fuego fue densamente sostenido por ambos lados.
Alrededor de las tres y media observamos a nuestras fuerzas que se retiraban en gran desorden, escapando a una emboscada que el enemigo había preparado junto a la playa. Por ello los patriotas se hallaban muy expuestos al fuego de las lanchas cañoneras.
El general Borgoño juzgó propicio el momento para el ataque y dio inmediatamente las órdenes en ese sentido. Las ocho compañías del flanco izquierdo, que formaban la vanguardia al mando del coronel Aldunate, avanzaron de la manera más gallarda. El mismo Borgoño marchó a través de la playa con dos compañías de granaderos y cuatro ligeras buscando rodear el flanco derecho del enemigo. Me indicó que forzara el estero de enfrente; fui bastante afortunado para tomar esta posición con la punta de las bayonetas, teniendo pocas pérdidas. Me uní luego al coronel Aldunate en la colina que domina a San Carlos.
El enemigo se retiró a una segunda posición fortificada, de la cual fue desalojado por las compañías ligeras, que le atacaron por su flanco izquierdo.
Como a una legua de San Carlos, mientras marchaban las compañías de granaderos rápidamente a ocupar el camino hacia Castro para cortar la retirada a Quintanilla, la caballería enemiga cargó sobre nuestra columna, pero fue completamente derrotada y dispersada por las compañías de granaderos del Nº 8.
Los realistas se corrieron entonces a la última y más fuerte posición en el bosque de los altos de Bellavista, ocupando el camino de Castro. Allí fue sostenido por nuestra infantería ligera un mortífero fuego, sin que consiguiera mucha ventaja. Entonces, el coronel Aldunate me ordenó desalojar al enemigo con mi división de granaderos, lo que tuve la fortuna de ejecutar en seguida con la escasa pérdida de una media docena de hombres. Continué persiguiendo a los que huyeron a través del sendero a Castro como más de una legua, y tomé cincuenta prisioneros, entre otros al coronel Hurtado. Luego recibí órdenes de hacer alto.
Toda la acción duró alrededor de cuatro y media horas. El enemigo no se portó bien, pues en verdad fue completamente derrotado por dos compañías de granaderos y cinco de cazadores (o ligeras), que fueron las únicas tropas de nuestro lado que entraron en batalla. La pérdida total de Chile no debe exceder de ciento cincuenta hombres del ejército veinticinco de la marina. No fu muerto ningún oficial de distinción, salvo el teniente Oxley, siendo heridos unos cuatro o cinco.
El coronel Aldunate se ha distinguido muchísimo y el general Borgoño ha dado grandes pruebas de habilidad.
El 16 de enero envió Quintanilla un parlamentario. Se le prometieron cuatro días de suspensión del fuego. En ese plazo entró el ejército a San Carlos y encontramos allí muy pocos habitantes, pero fueron retornando gradualmente. En el ínterin Quintanilla firmó la capitulación definitiva, en que se nos concedía todo el Archipiélago.
Quince días después volvieron las tropas a Chile, dejando en guarnición a los batallones Nº 4 y Nº 1; este último volvió también a Santiago en marzo. Sólo quedó en Chiloé el Nº 4.
El coronel Aldunate ha sido nombrado Gobernador de la isla con un salario de cuatro mil pesos anuales.
Poco después de mi regreso a la capital recibí los despachos en que se me concedía el grado de teniente coronel (22 de abril de 1826), en consideración a mis servicios en la acción de Bellavista para ocupar las colinas de Pudeto, en donde el enemigo protegía su ala derecha con trescientos de caballería y que tuvieron que ceder a mi ataque.

IV. Levantamiento O’Higginista de Chiloé en 1826.
El 27 de mayo de 1826 llegó a Valparaíso, viniendo de Chiloé, el mayor Jerónimo Valenzuela del batallón Nº 4, con la noticia de haberse verificado en la isla una revolución a favor del ex Director O’Higgins. Entiendo que don Pedro Aldunate, hermano del Gobernador de Chiloé, el coronel don Santiago, llegó a San Carlos el 25 de abril, comisionado para realizar un levantamiento de tropas. Este objeto se llevó a cabo el 3 de mayo a las dos de la mañana. El comandante de Artillería, teniente coronel Manuel Fuentes, encabezó el motín y el capitán Olivares fue nombrado comandante del batallón Nº 4.
El coronel Aldunate fue hecho prisionero el mismo 3 de mayo, y, obligado a embarcarse en la Livonia, llegó a Valparaíso en los primeros días de junio.
Era evidente la necesidad de destruir la semilla de la disolución y de poner punto final a esta revolución con mano fuerte. El Gobierno indicó el 6 de junio al graduado teniente coronel Tupper que se embarcara hacia Chiloé, a objeto de cumplir ese designio. Este dejó Santiago el 9 de junio y llegó a Valparaíso el 14, al mando de sus tropas, compuestas por las compañías de granaderos de los batallones Nº 1, Nº 7 y Nº 8, de ochenta y cinco hombres cada una, y de una compañía regular Nº 1, a, con sesenta hombres más. Debían viajar a bordo del bergantín de guerra Aquiles y del transporte Resolución. El coronel Aldunate fue nombrado Comandante en Jefe de la expedición y el coronel Picarte, Gobernador de Valdivia, segundo en el mando.
En el trayecto a Valparaíso tuvimos como quince desertores, pero las tropas estaban dotadas en general con excelente ánimo, el mejor de todos para efectuar las intenciones del Gobierno.
Por cierto, se tienen muchas esperanzas en la oposición del pueblo de Chiloé a los sublevados del Nº 4, pues sin la convicción de controlar un gran partido en el Archipiélago sería una locura intentar la pacificación de este levantamiento con tan pocas fuerzas.
Dejamos a Valparaíso el domingo 25 de junio de 1826. A bordo del bergantín Aquiles, comandante Wooster, se embarcaron el coronel Aldunate y coronel Picarte, con las compañías de granaderos del Nº 7, unos ochenta hombres, y seis u ocho artilleros. A bordo de la Resolución se embarcó el graduado teniente coronel Tupper, con tres compañías:
Granaderos del batallón Nº 1, 71 hombres.
Granaderos del batallón Nº 8, 97 hombres.
2ª compañía del batallón Nº 1, 55 hombres.
Artillería, 9 hombres.
Total: 232 hombres.
En la mañana del 27 se había perdido de vista el Aquiles y nuestra Resolución prosiguió su viaje con rumbo al sur.
El 28 de junio en alta mar, el señor Huddlison, especie de oficial de señales que había sido puesto a bordo de la Resolución por el comodoro Wooster, dio a conocer las instrucciones que le habían impartido. Según ellas, en caso de separación de ambos buques, debíamos dirigirnos con rapidez hacia el Morro González, punta prominente a la entrada sur de la bahía de Valdivia, cruzar allí durante cinco días en busca del Aquiles y si nada sabíamos de él dirigirnos a Chiloé. Mis propias instrucciones me señalaban lo mismo y que, si no encontraba al Aquiles, procediese a tomar el fuerte de Chacao en Chiloé e intentara levantar esa provincia en favor nuestro. El tenor de las instrucciones de Huddlison no me ha sorprendido poco. Es evidente que se ha ordenado a la Resolución que cruce por Valdivia para dar una oportunidad al coronel Picarte de ver a su mujer. Me llama la atención la debilidad de Aldunate al permitirse esta disposición. Si resultase cualquier contratiempo debido a ello, se dirá ciertamente que el coronel Aldunate tiene pocos deseos de llegar a Chiloé en este invierno, y las sospechas que contra él tienen muchos en Santiago aumentarían su falta.
Sábado, 8 de julio de 1826.El jueves por la noche llegamos al punto de espera frente a Valdivia, estando fuertemente impelidos hacia el norte y soportando una lluvia intensa. No podíamos acercarnos a la costa. Ninguna observación se ha hecho en estos cuatro días. En la mañana del 8 ha habido toda vía una fuerte brisa del norte acompañada de chaparrones. No se ha hecho tampoco observación alguna. Como a las tres de la tarde el viento torció al S. O. El día siempre muy oscuro y nublado. No se divisa tierra. Sin embargo, suponiéndonos a distancia de diez o doce millas de la costa, viramos y salimos mar afuera, halando y dando al buque la dirección O. N. O.
A las seis de la tarde se tomó medida del agua potable que había a bordo y se encontraron solamente 2.880 galones. Es decir, 17 días con agua para 336 personas, a saber:
Soldados: 232.
Reos Convictos: 34.
Mujeres: 21.
Oficiales: 21.
Tripulación: 28.
A medio galón por día cada uno, cantidad que es bien pequeña, considerando la índole de nuestras provisiones, que consisten en habas y charqui.
Llamé juntos al capitán y al señor Huddlison para consultar las medidas que debíamos tomar, estando todos conformes con marchar pronto a Chiloé a fin de arribar a la isla antes de que se terminara la provisión de agua. Se determinó poner esta idea en ejecución de inmediato y recoger tanta agua de lluvia como fuera posible por mecho de las velas extendidas.
El 9 hicimos observaciones y nos encontramos sobre el Cabo Quidal. Nunca pensamos que estuviésemos tan al sur; luego nos dirigimos directamente a Chiloé aprovechando una hermosa brisa del este. Llegamos a vista de la isla como a las cuatro de la tarde. Antes de oscurecer arribó también un buque desconocido, que se dirigió hacia nosotros. Con extraordinaria sorpresa descubrirnos que era el bergantín Aquiles.
El 10 de julio continuaron las brisas del este. El día estuvo magnífico. Habiendo comido a bordo del Aquiles supe que no había entrado a Valdivia. Y todo porque el coronel Aldunate hacía responsable de la escala a Wooster, quien no quiso tomarla sobre sí.
11 de julio de 1826.Viento este. Día muy hermoso.
A las diez de la noche se reunió a la Resolución el capitán [Juan] Williams, comandante del fuerte de San Carlos. Después de haber visto a los buques, se acercó para reconocerlos y se mostró muy contento al comprobar quiénes éramos. Como ha sido siempre fiel al coronel Aldunate, quedó bajo sus órdenes por expreso deseo de Williams. Su lancha es una embarcación excelente y monta en la proa un cañón de a 4.
12 de julio de 1826.Viento este. Día bonito.
A las siete de la tarde la Resolución se vio obligada a salir muy al este de la isla de San Sebastián, corriendo la marea hacia afuera tan fuertemente que nos era imposible resistirle. A las doce de la noche intentamos volver con el flujo.
Por mal manejo nuestra ancla no estuvo fuera de proa antes de las cuatro de la mañana del 13. Antes que pudiéramos alcanzar al Aquiles este buque ya permanecía anclado a sotavento de la costa opuesta. La marea menguante volvió y nos llevó tan aprisa sobre la isla de San Sebastián que apenas tuvimos tiempo para desamarrar el ancla. Salimos afuera teniendo un peligroso arrecife a sotavento y continuamos en una inminencia de perder el buque y nuestras propias vidas hasta las diez, cuando afortunadamente dejamos a un lado el arrecife gracias a que cedió nuestra anda por la rotura de sus lengüetas.
El 13 de julio, al ponerse el sol, fondeamos junto a la isla de Lacas.
Recibí órdenes del coronel Aldunate de atacar el castillo de Chacao con cien hombres. Dejé el barco a las doce de la noche con la compañía de granaderos del Nº 8 y veintiséis hombres del Nº 1, por todo cien soldados. Desembarqué junto a la batería de Remolinos a las dos de la mañana del 14 de julio y sorprendí en el fuerte a siete artilleros, uno de los cuales me informó que veinticinco hombres del Nº 4 habían salido a las siete de la tarde desde Chacao hacia la batería de San Galán. Esta ocupa una fuerte posición en el camino de Lacao a Chacao, estando Remolinos a su retaguardia.
Inmediatamente me puse en marcha con intención de sorprenderlos. La distancia es de apenas dos leguas, pero el sendero es el más terrible que jamás he pasado. Después de grandes esfuerzos llegamos a la batería como a las cinco de la mañana. Éramos sólo veinte hombres, habiéndose dispersado y perdido entre los bosques el resto. Cuando llegamos cerca de las fogatas me adelanté sólo con el guía, y, no percibiendo a ningún centinela por el lado de tierra, conduje luego a mis soldados y los tomé completamente por sorpresa. Los pobres diablos pidieron perdón muy pronto. Cinco o seis fueron heridos; tomamos prisioneros a un oficial y diecisiete subalternos del Nº 4, aparte de unos veinticinco chilotes que los acompañaban como milicianos. De su equipo tomamos veinte fusiles, ocho o diez sables y un tambor.
Acto seguido me volví a Remolinos, desmontando tres piezas de a 24 y marché a continuación a posesionarme de Chacao. Habiendo reunido ya casi todos mis hombres, la guarnición de ese castillo, compuesta por ocho revoltosos negros del Nº 4, huyó apresuradamente ante nuestra proximidad. Allí encontré dos piezas de a 20.
En la tarde del 14 anclaron bajo los cañones de Chacao el bergantín Aquiles y la Resolución, desembarcando luego el coronel Aldunate. Los chilotes afluían de todas partes y parecían de corazón ser de nuestra causa.
15 de julio de 1826.Gran cantidad de chilotes se presentaron ante Chacao y ofrecieron unirse contra los revolucionarios. Se nos adhirió el comandante de Carelmapu, que puede disponer de cuatro compañías de milicia de infantería y dos escuadrones de caballería.
Domingo, 16 de julio de 1826.Se nos unió el comandante del partido de Calbuco, Téllez, quien tiene a su disposición siete compañías de infantería. Se mandó escoger ciento cuarenta de sus mejores hombres para ser incorporados a nuestro contingente. Nuestras compañías han aumentado mucho en número. Los granaderos del batallón Nº 1 son ahora noventa y cinco, los del Nº 7 son ahora noventa y seis, y, finalmente, los del Nº 8 son ciento nueve.
Se interceptó una comunicación de Reyes, Gobernador de Osorno, a Fuentes, caudillo revolucionario de Chiloé. Parece que Osorno se ha declarado en favor de O’Higgins.
17 de julio de 1826.Como a las doce de la noche pasada nos alarmamos falsamente creyendo que se acercaban las cañoneras del enemigo. Sin embargo, poco después, oímos voces anunciando que nos traían algunos cañones.
Alrededor de las dos de la mañana llegaron dos chilotes con la noticia de que había fondeado un buque en Racao. Inmediatamente se despachó un observador para saber de qué barco se trataba. Pronto volvió con la noticia de que era un gran cúter y cuya cañonera se había separado de su costado y venía hacia nosotros. Esta llegó poco después a Chacao y nos sorprendimos agradablemente al saber por el capataz que la mandaba que en el fuerte de Agüi se había verificado un levantamiento general en favor nuestro. Que los tres oficiales allí estacionados habían sido traídos prisioneros en el cúter y que no venían las demás cañoneras por no haber suficientes remeros para ellas.
A las diez de la mañana de hoy fue traída por siete chilotes una bellísima embarcación perteneciente a la Gobernación de Chiloé, en la que se habían escapado de Fuentes. El capitán La Rivera fue enviado con sesenta hombres de la compañía de granaderos del Nº 7 y veinte artilleros a posesionarse del fuerte de Agüi. Parece que Fuentes ha hecho en este castillo su depósito de provisiones y municiones, habiendo planeado retirarse hacia Agüi si es forzado en San Carlos y mantenerse allí hasta recibir socorros del Perú o entrar, al fin, en capitulación con nosotros.
Como a las cinco de la tarde vinieron a Chacao entre cuarenta o cincuenta habitantes de San Carlos, informándonos que la ciudad estaba en la mayor confusión y que hasta las mujeres habían abandonado sus casas. Al poco rato llegaron a Chacao trece artilleros con sus respectivas carabinas y sables. Fuentes no tiene actualmente ni un solo artillero consigo.
El comodoro Wooster trajo a tierra otra comunicación venida desde Osorno y que había sido interceptada; su contenido variaba muy poco del de la primera.
18 de julio de 1826.Cerca de las dos de la mañana volvió de Castro el capitán Williams, después de haberse comunicado con el capitán Riveros. Trae noticias muy favorables respecto a la disposición de los habitantes del interior de la isla hacia nosotros.
El cúter cañonero llegó de Agüi con cuatro oficiales tomados por sorpresa en ese fuerte, al dirigirse hacia ese castillo ignorante de la contrarrevolución en favor nuestro. Sus nombres son: capitán Henríquez del Nº 4, capitán Burgues y tenientes León y Pizarro de la Artillería. Todos fueron confinados a bordo del Aquiles.
En la noche fue traída de San Carlos una comunicación de paz. Pero como venía oficialmente del Gobierno de Chiloé, fue devuelta sin abrirla. Asimismo se devolvió cerrada a su lugar de origen otra comunicación venida oficialmente del Gobierno Civil de San Carlos.
19 de julio de 1826.Por la mañana temprano llegaron del partido de Calbuco a Chacao ciento cuarenta hombres, que fueron armados con fusiles inmediatamente. Como a las once la columna de granaderos llegó a Chacao para acudir luego hacia Agüi. Los ciento cuarenta calbucanos fueron enviados también en piraguas a Pudeto.
Agüi, 20 de julio de 1826.Llegó una carta insolentísima de los oficiales del Nº 4, ofreciendo entregarse sin resistencia si se les confirmaban sus empleos. Fuentes nos envió otra proponiendo entregar la ciudad de San Carlos con tal que se le perdonase la vida. A ambas comunicaciones se dio una respuesta similar: que no se entraba en tratados y que se exigía una rendición a discreción.
En la mañana del 20 me trasladé con la columna de granaderos desde Agüi hacia San Carlos. Se vieron flotar en las inmediaciones varias banderas blancas. El capitán Silva, de la Artillería, fue enviado adelante a recibir las armas y municiones del Nº 4; todo se entregó sin resistencia. La columna de granaderos desembarcó sin oposición. El caudillo Fuentes y los oficiales del batallón Nº 4 fueron hechos prisioneros, concluyendo así felizmente la campaña.
A mi vuelta a Santiago en septiembre encontré que había sido elevado al rango de teniente coronel efectivo, en atención a mis servicios en la expedición reciente a Chiloé.

V. Campaña contra los bandoleros del sur en 1827.
Volví de Chiloé a Santiago a principios de septiembre de 1826, portando una petición del coronel Aldunate al Gobierno en solicitud de dinero y ayuda material para la provincia. Habiendo permanecido aguardando como cuatro meses y no teniendo esperanzas de obtener cosa alguna para Chiloé, determiné unirme al Ejército del Sur, que estaba operando bajo el mando del general Borgoño.
El propósito de esta fuerza es destruir una horda de bandoleros de como seiscientos o mil hombres, que infesta la provincia de Concepción durante el verano, retirándose al caer el invierno al lado oriental de la Cordillera de los Andes. Un individuo llamado Pincheira está actualmente encabezando la banda y sus excursiones se han hecho en el último tiempo tan frecuentes que ha llegado a ser absolutamente indispensable la necesidad de cogerlo y destruirlo.
Llegué a Talca el 28 de diciembre de 1826 y encontré bastante actividad en los preparativos para la campaña. El general Borgoño, que muestra en todo su acostumbrada precaución y su mucha inteligencia, se hallaba bien secundado en el trabajo por quien hace de Mayor General, el coronel Viel. Se ha hecho todo lo posible por conseguir un buen espionaje entre los enemigos, y, según parece, con alguna felicidad. Nuestra tropa se ve animosa y la caballería está mejor montada de lo que se ha acostumbrado en este país.
Las fuerzas para la campaña constan de los batallones de infantería Nº 1 y Nº 8, cuyo contingente es de trescientos hombres cada uno, poco más o menos. Además se piensa echar mano de algunas compañías del Nº 6 que se encuentran repartidas en la provincia de Concepción.
De caballería tenemos al regimiento de Cazadores, de cuatro escuadrones o cerca de quinientos hombres; al regimiento de Dragones, con igual distribución y número; y algunas milicias montadas y mucha indiada.
El plan de operaciones se determinará absolutamente a la llegada del general Borgoño a Chillán. Por ahora parece que se quieren formar tres divisiones: del Norte, del Centro y del Sur. Estas deberían perseguir a Pincheira y reunirse en Nankén [Neuquén], lugar en donde se dice que el bandolero tiene reunidas sus familias y sus ganados; está situado al oriente de Cordillera de los Andes, cerca de la latitud de Chillán.
El día 30 de diciembre el coronel Beauchef, quien debe mandar la división del Norte, salió de Talca con el batallón Nº 8, en dirección a la invernada de Los Girones. Para llegar a ese punto pasará por el Portillo. Llegado a Los Girones se ha dispuesto que se incorpore en su división el comandante Gutike con el primer escuadrón de Cazadores a Caballo y la primera compañía del batallón Nº 8, que se hallaban destacados ya en ese punto. También deberá unirse a esta división el comandante Puga con el segundo escuadrón de Cazadores, que sale luego de Curicó a este efecto. El coronel Beauchef deberá acampar en Los Girones hasta nueva orden del General en Jefe.
Talca.El día 31 de diciembre salió el batallón Nº 1 para San Carlos, distante siete leguas de Chillán. Se recibieron comunicaciones del comandante Gutike en el campamento de Girones; su caballería ha sufrido bastante con el frío; la primera compañía del batallón Nº 8 ha padecido de tal modo por la nieve que todos los individuos de ella, menos su sargento y cuatro soldados, están ciegos.
El día 3 de enero de 1827 salió el general Borgoño de Talca con dirección a Chillán, acompañado del Estado Mayor General, cuyo jefe es el coronel Viel, de sus cuatro edecanes: O’Carrol, Martínez, Gana y [Thomas] Sutcliffe, y también del comandante Tupper, a quien se debe dar destino a la llegada del general a Chillán.
La noche del 3 se alojó en la hacienda de Laguillos; la noche del 4 se alojó en Linares, cuya plaza estaba resguardada con foso y muralla de adobes, atrincherada de las empresas de Pincheira. Se distribuyó una buena cuenta al piquete del Nº 6 que se encuentra de guarnición.
El 5 de enero pasamos por la hacienda de Longaví, perteneciente a don Antonio Mendiburu. Aquí encontramos al escuadrón del comandante Bulnes, con ciento veinte plazas de Cazadores a Caballo. Las casas de esta hacienda se hallan igualmente defendidas por fosos y murallas, y los inquilinos están armados. La noche del 5 alojamos en el Parral. En este, como en todos los demás pueblos que transitamos, se conocieron los tristes efectos del vandalismo; muchas habitaciones derribadas, la gente en alarma y, en fin, todos los resultados infelices que se podían esperar de una provincia sin protección y cuyos pobladores carecen del primer elemento de la prosperidad: la seguridad de sus propiedades.
En la mañana del 6 de enero, preparándonos para seguir nuestra marcha, el general recibió parte de que una montonera de bandidos, unos treinta o treinta y cinco hombres, estaba arreando ganado hacia la cordillera. A pesar de haber en el Parral cuarenta soldados del regimiento de Dragones, no se pudo seguir a los ladrones por falta de caballos. Se ofició a San Carlos para que saliese una partida desde allí, con intención de cortarles el paso, si posible fuere. Los ladrones estaban en la inmediación del río Perquilauquén.
La noche del 6 de enero llegamos sin novedad a San Carlos. Aquí supimos que el comandante [Antonio] Carrero había salido en persecución de los bandidos con su escuadrón de Dragones, la compañía del Nº 6 que estaba de guarnición en San Carlos y de cincuenta cazadores del batallón Nº 1, que igualmente estaba en este punto.
Domingo 7 de enero.El general permaneció este día en San Carlos a objeto de aguardar el parte del comandante Carrero. Este jefe llegó aquí a las doce del día. No pudo alcanzar a los bandidos, pero, no obstante, les quitó media docena de caballos en los Canelos. Por la tarde salió el general acompañado del comandante Carrero para visitar el segundo escuadrón de Dragones, acampado en Gauna, distante dos leguas de este punto, volviendo muy satisfecho de él.
Enero 8.Llegó el general con toda su comitiva a Chillán, en donde se había establecido una pequeña maestranza para el ejército de operaciones. Arribó igualmente a Chillán el día de hoy el batallón Nº 1. La fuerza militar actualmente en esta ciudad consta de:
Batallón Nº 3 o Carampangue, 150 soldados.
Batallón Nº 1 o Chacabuco, 244 soldados.
Batallón Nº 6 o Maipú, 122 soldados.
Artillería, 22 soldados.
Dragones (caballería) en los Guindos, 318 soldados.
Dragones (caballería) en Gauna, 144 soldados.
Total: 1.000 soldados.
Enero 9.Se ofició al Comandante de Armas de Concepción para que a la mayor brevedad se vinieran a Chillán los miembros de la plana mayor del batallón Maipú, siendo sumamente impropio que los jefes se hallen tan lejos de sus cuerpos. Se ofició igualmente a Concepción para que se mandase a esta plaza barretas, azadones, palas y otros utensilios que   se necesitan para la campaña.
Enero 10.Se mandaron las instrucciones Nº 1 al coronel Beauehef y las Nº 2 al comandante Bulnes. Esta noche el Gobernador de Chillán tuvo noticia de que había merodeado por el pueblo una partida de ocho de los bandidos a caballo. Parece que se retiraron temprano sin haber hecho daño.
Enero 12.Llegó el comisario de Concepción con diez mil pesos para el ejército, producto del estanco. En este día el general en jefe, acompañado del Mayor General, etc., etc., visitó el campamento de los Guindos para presenciar junto al comisario la revista del regimiento de Dragones, que consta de dos escuadrones completos y la primera compañía del primer escuadrón. El cuerpo está regularmente montado, los soldados son muy antiguos y a este regimiento sólo le falta disciplina.
Enero 13.Se dio a conocer en la orden general al teniente coronel Tupper por comandante del primer escuadrón de Dragones. En la tarde se recibió el oficio Nº 3 del comandante Bulnes, dirigido al jefe del Estado Mayor. A consecuencia del cual salieron dos compañías del Nº 6 o Maipú con dirección a Longaví. Se ofició de nuevo al comandante Bulnes mandándole ejecutar al pie de la letra los movimientos establecidos en el oficio Nº 1 al coronel Beauchef.
En la tarde del 15 salieron tres compañías de caballería de los Guindos con dirección a San Javier. Esta, con dos compañías de infantería, deben formar la división que al mando del comandante Carrero se internará por el boquete de Antuco, Será acompañada de toda nuestra indiada.
A la una P. M. del 18 se recibió la carta Nº 4 del Gobernador de Parral. El comandante Tupper salió a establecerse en los Guindos, siendo jefe interino del regimiento de Dragones.
Enero 19.Se pasó una circular a los Intendentes de Concepción, Maule y Colchagua, pidiendo algunos auxilios para la construcción de un fuerte sobre el boquete de Antuco, de tal manera que impida la retirada de los bandidos en sus invasiones. Se les hace ver las ventajas que deben resultar a los habitantes en la seguridad de sus personas y bienes. Se piden palas, azadones, barretas y víveres para la manutención de los trabajadores.
Enero 20.Hoy llamó el General en Jefe a varice vecinos a objeto de pedirles catorce mulas aparejadas, que se habían solicitado por el valor de su flete al Gobernador el día 8. Once días ha permanecido detenida en San Javier la división de Antuco por la resistencia presentada a conceder estos auxilios.
A las cinco de la tarde de ayer llegaron a esta plaza los restantes soldados del batallón Maipú con el comandante Castro. Son setenta hombres, incluidos músicos y tambores. Estaban en Concepción.
Se recibió un oficio del comandante Bulnes avisando haber sido falsa la noticia del 18 de estar los enemigos en el castillo. Fue sólo una polvareda. En esta fecha se ofició nuevamente al comandante Bulnes para que estuviese pronto a marchar al primer aviso que recibiera del coronel Beauchef. Se dirigió al coronel Beauchef el oficio Nº 5.
Enero 21.Salió hoy desde San Javier la división de Antuco o del Sur. Había sido detenida trece días por falta de catorce mulas. El itinerario que debe seguir el comandante Carrero desde Antuco a Mal Barco es: El día 25 de enero saldrá de Antuco al Castillo; el 26, del Castillo a la Escoria; el 27, de la Escoria a la Cueva; el 28, de la Cueva a Pichaichén; el 29, de Pichaichén a Malal Cahuelo; el 30, de Malal Cahuelo a Daquehue; y el 31, de Daquehue a Mal Barco.

Fuerzas de las divisiones de operación
División del NorteAl mando del coronel Beauchef. Su entrada es por el PortilloBatallón de Infantería Pudeto (o Nº 8)280 hombres.
1º y 2º batallón de Cazadores a Caballo260 hombres.
Total: 540 hombres.
División del CentroAl mando del comandante Bulnes. Debe reunirse con la del Norte en la laguna del Saco. Situada en Longaví1er escuadrón de Cazadores a Caballo138 hombres.
2ª compañía del 1er escuadrón de Dragones48 hombres.
Dos compañías del batallón Maipú (o Nº 6)105 hombres.
Total: 291 hombres.
División del SurAl mando del comandante Carrero. Entra por Antuco.4º escuadrón de Dragones y una compañía del Nº 3160 hombres.
Dos compañías del batallón Carampangue107 hombres.
Voluntarios a caballo de Tucapel. Teniente Salas.55 hombres
Total: 322 hombres.
Total general de fuerzas en operación: 1.153 individuos.

Enero 22.El señor General en Jefe ha ordenado a su ayudante el capitán Martínez para que se apronte a salir el día 24 a recoger el producto de los estancos de Rancagua, San Fernando, Curicó y Talca, por los meses de diciembre y enero.
Hoy dio parte el Comandante Militar de San Carlos de haber aparecido cerca del río Perquilauquén una partida enemiga. Fue rechazada quitándosele como ochenta animales vacunos que había robado. Se ordenó a dicho Gobernador que entregase inmediatamente a sus dueños estos animales. La fuerza de los bandidos era de cincuenta hombres; fueron perseguidos por quince dragones, resultando dos muertos de nuestra parte.
Enero 23.Se recibió de Los Girones una nota del coronel Beauchef en que dice tener noticias de que el enemigo se dispone a atrincherarse en Nankén. Añade que los indios son favorables a nuestra causa. Se recibió desde Antuco otro oficio del comandante Carrero; anuncia que los caciques de Trapa Trapa se le juntar con doscientos mocetones.
En este día salió de los Guindos el comandante Tupper, con orden de situarse con su división en la Roblería, a seis leguas al oriente de Chillán y como a dos de la cordillera. Motivos de esta mudanza fueron el hecho de cine así hay mayor facilidad para cortar a los enemigos en caso de invasión, y, sobre todo, de buscar buenos pastos para la caballería, pues escasean ya en los Guindos. Llevaba bajo su mando el comandante Tupper a la primera compañía del Nº 1, a la segunda del tercer escuadrón de Dragones y a dos compañías del batallón Chacahuco. Asimismo tenía orden de reunirse a él una compañía del segundo escuadrón de Dragones, acampado en Gauna.
La división de Tupper llegó a la Roblería a las 9 de la mañana. Se encontraron los pastos enteramente quemados y ardiendo todavía en algunas partes. El comandante hizo devolver la división por la tarde a los Guindos y mandó contramarchar a la compañía que venía desde Guana.
Enero 25.Se publicó un bando que circuló en la provincia ofreciendo 25 pesos de gratificación por cada desertor que se aprehendiese.
Enero 26.Se recibió del comandante Bulnes el oficio Nº 6. A las once del mismo día se ahorcó en la plaza de Chillán al prisionero enviado por Bulnes. Declaró dicho prisionero que la fuerza de los bandidos que salieron de Longaví constaba de cuatrocientos cincuenta españoles y veinte indios, armados de ochenta tercerolas con dos cargas de municiones que habían tomado en el otro lado de la Cordillera. El comandante Bulnes los persiguió con cerca de quinientos hombres, incluso milicianos.
El 30 salió de Chillán el comandante Godoy con tres compañías del Nº 1. Se le reunió en los Guindos el comandante Tupper con su escuadrón de Dragones. El 31 dirigieron su marcha hacia Roble Huacho, formando la segunda división de operaciones del centro.
Febrero 4 de 1827.Llegó la división del comandante Godoy a la Vega del Roble Huacho, situada a cerca de treinta leguas al oriente de Chillán y con poca diferencia en su altura. Se encontraron buenos pastos y bastante local.
El objetivo de esta división es entablar una comunicación con las divisiones que al mando del coronel Beauchef deben haber llegado a Nankén el día 1º de febrero.
El 7 se mandó una partida avanzada hasta las Raíces, a unas cinco leguas de Roble Huacho, a fin de proteger la internación de dos baqueanos hasta Mal Barco. Estuvo compuesta esta de treinta y siete soldados del Chacabuco y diez dragones al mando del capitán Pavez.
Febrero 8.Volvieron los baqueanos que habían intentado pasar a Mal Barco, habiéndolos perseguido cinco le los bandidos poco más allá las Lagunas. Antes de la llegada de éstos se había mandado otro baqueano hacia Chillán portando el parte de la llegada de nuestra división
Febrero 10.El sargento de avanzada en el camino de las minas avisó que habían pasado por allí cuatro bandidos con dos mujeres y un chiquillo, dirigiéndose a la Caja de la Montaña. Se les pudo tomar dos caballos buenos. También en este día unos cuantos bandoleros arrebataron tres caballos al baqueano Constancio, en la loma del enemigo, quien se escapó a pie en el monte.
Febrero 11.Se avistaron en la loma del enemigo unos diez bandidos con un caballo de tiro cada uno. Se fueron después de haberse tiroteado con la avanzada y fue imposible alcanzarlos por los malos caballos.
El día 15 de febrero llegó a Roble Huacho el convoy de víveres escoltado por treinta y cinco infantes y veinticinco dragones.
El 16 salió con el convoy para Nankén [Neuquén] el comandante Godoy y Tupper, con cien infantes y sesenta dragones. El 18 se tomó un prisionero que fue fusilado en la tarde. Salimos de Roble Huacho a las 5 y media de la mañana. El camino malísimo. El repecho (la pendiente) muy fuerte. Llegamos a la Invernada a las 11 y media. Muy malos pasos para los animales de carga. En la Invernada hay excelentes pastos y mucho local. Salimos a las 3 y media de la tarde. Seguía el repecho siendo malo y pesado. Alojamos a las 7 cerca de Quebrada Honda. Las cargas no pudieron llegar al alojamiento.
Febrero 17.Salimos a las 5 y media. Llegamos a las Lagunas a las 11 y tres cuartos. Las cargas llegaron a las 4 de la tarde. Camino pésimo. Alojamiento excelente. Las Lagunas tendrán como una milla de ancho y dos de largo.
Febrero 18.Salimos de las Lagunas a las 6 de la mañana. Llegamos a Coyanucho a la una de la tarde. Caminos muy buenos.
El 19, en Coyanucho, se recibió una comunicación de Chillán, mandándose que volviésemos con el convoy por estar Beauchef por Antuco. Se habían enviado espías a buscar noticias y volvieron corridos por los enemigos, dos de ellos a pie. Se llegó nuevamente a Roble Huacho el 21. Allí encontramos comunicación de Chillán mandando que se dejase el convoy en Roble Huacho para que pasase a integrar la división de Bulnes que se esperaba llegara a las Lagunas.
La división de los comandantes Godoy y Tupper llegó a Chillán el 24 de febrero.
El 27 de febrero se recibió una comunicación del coronel Beauchef desde Coupoulqué, a dos jornadas de Antuco, incluyendo la respuesta Nº 8 de Pincheira y de los caciques de su partido a una oferta de indulto que les había hecho Beauchef. Este añade que Pincheira se halla con ciento cincuenta hombres y que los indios de la Barranca le habían quitado todo su ganado.
El día 3 de marzo salió de Chillán para Yumbel el General en Jefe, acompañado del jefe del Estado Mayor y comitiva. El 7 del mismo mes se juntó con el comandante Tupper y el mayor O’Carrol.
Llegaron comunicaciones del coronel Beauchef avisando que el cacique Mulato quería entrar en convenios de pacificación con nosotros, ofreciendo su hijo y otros caciques cabecillas en [como] rehenes para probar la buena fe que les animaba, y, además, respondían los indios de Trapa Trapa por él.
Mariluán, a quien se había convidado para que entrase en parla, mandó sólo unos cabecillas que fueron recibidos por el comandante de la frontera don Juan Luna y, aunque hay motivos para dudar de la buena fe de este poderoso cacique, se le invitó de nuevo a entrar en relaciones de amistad en el verano próximo. Senosiaín, oficial español de mucho influjo con los indios, ha escrito que tiene deseos de entregarse y se le espera incesantemente.
El día 23 de marzo salió el General en Jefe y comitiva a la visita de la frontera, dirigiéndose a la hacienda de La Palma, en la Isla de la Laja; el 24, a Nacimiento, cuyo fuerte hallamos en bastante buen estado, el pueblo sumamente infeliz; el 25, a Los Ángeles. Esta ciudad, que contaba como cinco mil habitantes, fue quemada enteramente en la guerra de la revolución y sus gentes dispersadas. No vive en ella un alma hoy día y presenta un espectáculo horroroso. Se piensa poblarla de nuevo y formar el Cuartel General en su recinto. Los terrenos son los más hermosos de la provincia de Concepción. El 26 fuimos a Antuco, un lindo pueblo en la entrada del boquete de la cordillera del mismo nombre; tiene como setecientos habitantes. El 27 el General en Jefe fue a examinar el fuerte situado a cuatro leguas del boquete. Se supo que el coronel Beauchef había marchado a atacar a los indios de Trapa Trapa, habiendo sabido que lo engañaron respecto a la entrega del cacique Mulato. El 28 fuimos a Tucapel. El 29 por la noche llegamos de vuelta a Chillán.
Sabido por el General en Jefe que Pincheira había batido a unos indios amigos y que su preparaba a marchar sobre la provincia de Talca, dispuso la defensa y el tercer escuadrón de Cazadores se dirigió desde Yumbel sobre Talca y salió desde Chillán el batallón Chacabuco para el mismo destino.
Siendo mandado en comisión a Santiago por el General en Jefe, concluí aquí mi campaña de 1827 contra Pincheira. Llegué a la capital el 6 de abril y el 1º de mayo del mismo año obtuve el despacho de Primer Edecán del Supremo Gobierno (con sueldo de teniente coronel de caballería, es decir, 150 dólares mensuales).

VI. Sublevación militar de San Fernando en julio de 1828.
Julio 7.Los llamados liberales suscitaron una sublevación de tropas en San Fernando, que estalló el día sábado 28 de junio de 1828. El batallón Maipú, acuartelado en otra villa, y que consta de trescientas catorce plazas, se amotinó, puso preso a su comandante don Patricio Castro y proclamó por Intendente de la provincia de Colchagua a un deudor del Fisco: don Pedro Urriola.
Se cree generalmente que el objeto de esta sublevación sea el llevar a don José Miguel Infante a la Presidencia de la República. La desenfrenada ambición de este hombre no permite titubear que él aprovecharía de un motín militar para colocarse en la cima del Gobierno, aunque para llegar allí tuviera que rasar por encima de los cadáveres de la mitad de sus conciudadanos.
El gobierno tuvo aviso de la sublevación del batallón Maipú o Nº 6 el 3 de julio por la tarde. El día 4 de julio el batallón Concepción o Nº 7, fuerte de doscientas plazas, salió de Santiago con dirección a Rancagua. El virtuoso y eminente general [José Manuel] Borgoño salió para el mismo destino con el carácter de General en jefe del Ejército de Operaciones. Lo acompañaron el coronel Rondizzoni, comandante del batallón Concepción, el señor don José Villarroel, comandante general de las milicias de Rancagua, el comandante Tupper y el mayor Sutcliffe, su edecán.
El general Borgoño llegó a Rancagua el día 6 de julio, habiendo encontrado en el camino y hecho contramarchar al comandante Castro, a quien los sublevados habían despedido de San Fernando; al coronel Ibáñez, comandante de las milicias de caballería de San Fernando; y al capitán Cancino, comandante de las milicias de infantería de la misma villa. Estos señores huían para la capital y nos informaron que la plaza de Rancagua quedaba totalmente indefensa. En ella existe un armamento considerable.
La división de operaciones salió de Rancagua el día 12 de julio y alojó por la noche en la hacienda de don Francisco Valdivieso. Consistía en el batallón Concepción, fuerte de doscientas plazas; trescientos milicianos de caballería de Rancagua y ochenta milicianos de infantería. En la noche el General en Jefe recibió una comunicación del coronel Quintana, del regimiento de Dragones, en la cual prometía estar con su cuerpo en la orilla del río Tinguiririca el 13 de julio y alababa mucho la disciplina y lealtad de su contingente.
El día 13 de julio alojó la división muy temprano en las casas de don Valentín Valdivieso. A la una del día se dio aviso de que el enemigo se hallaba en marcha para atacarnos. Nuestra división se puso sobre las armas y el comandante Porras avanzó con una partida de milicias de caballería hasta el portezuelo de Pelequén; tuvo algún tiroteo con un piquete de los sublevados y, en seguida, se retiraron estos a las casas de Guzmán que ocupaban.
El día 14 de julio nuestra división se puso en marcha. Pasó por el río Claro temprano en la mañana. El batallón Maipú quedaba siempre en las casas de Guzmán y dominaba el camino del portezuelo de Pelequén. El General en Jefe determinó evitar un choque con estos amotinados, en primer lugar, porque la fuerza de ellos era muy superior en infantería a la nuestra, y, también, porque ocupaban una posición fuerte, circundada de barriales. No faltaban señas que indicasen que la intención de los sublevados era dirigirse sobre la capital. Y, efectivamente, esa dirección era la única que todavía les ofrecía alguna esperanza. Sin embargo, esta noticia causó poca inquietud al general porque sabía que en Santiago no existía partido alguno que favoreciera a estos miserables.
Con este motivo nuestra división marchó por los cerros de la izquierda, dejando Pelequén a la derecha, y alojó en los Lingues. La intención del General en Jefe era restablecer las autoridades en San Fernando y marchar inmediatamente en busca de los sublevados, destacando de antemano al comandante Tupper con cincuenta fusileros del batallón Concepción montados; una compañía de Dragones y cincuenta milicianos de tercerola, con el objeto de inquietar las marchas del batallón Maipú e impedirle el paso en los caminos.
El día 15 de julio la división salió de los Lingues y marchó sobre San Fernando. El General en Jefe adelantó al comandante Tupper con sesenta soldados de infantería para posesionarse del pueblo. Este, a media legua de ese punto, recibió por un paisano la noticia de que el cuerpo de Dragones se había sublevado y que estaba pasando el río Tinguiririca. Habían mandado preso en la mañana a San Fernando al coronel Quintana. El comandante Tupper, con intención de libertar al coronel Quintana, estando todavía sin sospechar de la infame conducta y doble manejo de este jefe díscolo e indecente, llegó con sus fuerzas hasta la plaza de la villa sin oposición ninguna y formó en cuadro. Mas, incesantemente, una pequeña partida de milicianos que se había mandado a reconocer fue cargada en las calles por la vanguardia de los Dragones. Llegó ésta en persecución de los milicianos hasta la plaza, de donde fue inmediatamente desalojada por la infantería. Perdieron un hombre y tuvieron varios heridos.
En este ínterin llegó el General en Jefe con la división y mandó cargar del lado de la torre de San Francisco, que estaba ocupada por una pequeña partida de sublevados, creyendo que los Dragones se hubiesen refugiado bajo sus fuegos. Mas, visto lo contrario, se retiró la fuerza otra vez a la plaza, con pérdida nuestra de dos soldados muertos y tres heridos. Entre los últimos el mayor Boza del batallón Concepción y el capitán de granaderos Rivera. Estas desgracias fueron ocasionadas por el fuego de la torre.
En este momento el coronel Quintana, que había salido de San Fernando en el instante en que se había aproximado el comandante Tupper, se acercó al general y trató de justificar la conducta de los Dragones y su propio maquiavelismo. El general le ordenó que siguiera a la división en clase de arrestado.
Tuvimos luego aviso de que los Dragones estaban atravesando el río de San Fernando. Los perseguimos inmediatamente. Sin embargo, no fue posible alcanzarlos. Confiscaban todos los caballos que encontraban y hacían el viaje como en posta, evidentemente con el designio de incorporarse al batallón Maipú.
Nuestra división alojó en la noche del 15 en los Lingues. En la noche del 16 en las casas de don Francisco Valdivieso. Desde este punto llegó la división, sin parar, a la Calera. Se había hecho montar al batallón Concepción en los caballos de los milicianos, en Rancagua, quedándose éstos en este punto, menos una partida de veinticinco de tercerola y sable al mando del comandante Porras. Pasamos el río Maipo en el vado de Lonquén.
Llegamos a la Calera el 18 de julio por la tarde. Nos dieron la noticia de que se habían sentido unos tiros de artillería y fusil del lado de Santiago. Se mandó un huaso a indagar. Volvió en la noche diciendo que las fuerzas del Gobierno habían sido derrotadas y que los sublevados se hallaban en las casas de Ochagavía.
El 19 nuestra división se puso en marcha a la una de la mañana con dirección a Santiago. Por equivocación del baqueano tomamos el camino de Melipilla y cuando amaneció nos hallábamos cerca de las casas de Espejo. Aquí nos informaron que la fuerza del Gobierno había sido derrotada; que el comandante de Coraceros había muerto; que no se sabía del paradero del Presidente Pinto; que Fontecilla o Infante habían usurpado la autoridad suprema; que la fuerza de los sublevados estaba en la Maestranza; y, en fin, que la autoridad legítima del país ya no residía en la capital.
El general llamó a los jefes de la división a Junta de Guerra. Se expuso que nuestra fuerza no pasaba de ciento ochenta hombres de fusil; la de los sublevados pasaba de cuatrocientos soldados de caballería e infantería. Se resolvió marchar sobe Valparaíso a poner la división a las órdenes del Congreso Nacional. Nos pusimos en marcha sin pérdida de tiempo y llegó nuestra división a la Cuesta de Prado a las doce del 19 de julio.
Poco después de nuestra llegada al pie de la Cuesta, se acercaron dos comerciantes ingleses de Santiago, quienes nos informaron del verdadero estado de las cosas. Nos refirieron todas las circunstancias de la escaramuza del 18 de julio; que el Presidente se hallaba todavía en la capital; que los sublevados ocupaban la Maestranza, sin que se hubiese tratado de defender este punto tan importante, pues encierra todas las municiones de guerra y armamento que existe en el país; que el pueblo de Santiago mostraba mucho entusiasmo y una noble determinación de defender al Gobierno constituido contra los atentados de los amotinados.
Por otro comerciante inglés, don Jorge Smith, que pasaba desde Valparaíso a Santiago, el General en Jefe mandó aviso al Presidente que aguardaba sus órdenes en el punto que ocupábamos. En la tarde un criado del general le trajo la noticia desde Santiago que el Presidente debía venirse a las casas de Espejo para verse con él. Luego el general salió acompañado del comandante Tupper y del mayor Sutcliffe para las casas de Espejo. En la noche llegó a ellas el Edecán de Gobierno don Agustín Gana trayendo la orden para que por la mañana la división pasara a ocupar la chacra de Prado, distante una legua de la capital. Se transmitió esto inmediatamente al coronel Rondizzoni.
El general con su comitiva pasó la noche en las casas de Espejo y por la mañana del 20 de julio se incorporó a la división en Pudahuel. En la noche anterior había llegado a este punto el comandante Gutike con unos cuarenta Coraceros a ponerse a las órdenes del general Borgoño. La división pasó el día en la chacra de Prado. Al caer la noche pasó a la quinta de Portales y en seguida a las rasas de Pólvora en La Chimba, en cuyo punto amaneció el día 8 de julio.
A las doce del día tuvo el general una entrevista con el Presidente en el Palacio. Al caer la noche llegó una orden del Presidente a las casas de Pólvora para que el batallón Concepción, o Nº 7, y el escuadrón de Guías o Coraceros pasasen a ocupar sus respectivos cuarteles, pues se habían hecho tratados con los sublevados. Efectuóse este mismo y pasaron igualmente los del Estado Mayor a sus casas.
En la Orden del Día del 22 de julio se publicó un indulto en favor del batallón Maipú, o Nº 6, y del regimiento de Dragones, incluyendo en él a don Pedro Urriola y a todos los paisanos y milicianos que acompañaron a la división sublevada desde San Fernando hasta la capital.
De este modo han concluido todas las sublevaciones en Chile. Y por este motivo hay una cada año, ya sea puramente militar como ésta o suscitada por medio de pobladas de facciosos, acompañados de los votos de la capital.
En todo tiempo los Gobiernos, deseosos de paliar el mal y no cortarlo en su raíz con enérgico proceder y un debido castigo, han tratado de comprar la paz y la tranquilidad de estos malvados por medio de indultos y premios de todas clases. De consiguiente, el remedio empeora el mal. Las autoridades constituidas se hallan sin prestigio entre los ciudadanos y las leyes yacen en una nulidad absoluta.
Santiago, julio 37 de 1828


VII. Conspiración de Agosto de 1828.
VII. Conspiración de agosto de 1828.
Agosto 21 de 1828.El día 17 de agosto tuvo noticia el Presidente de una conspiración que se tramaba contra su Gobierno. El miserable Urriola se halla por segunda vez metido en estos negros atentados.
Parece que la intención de los conspiradores era matar al Presidente con otros varios individuos en la noche del 9 de agosto, y, probablemente, proclamar a Urriola como Presidente de la República. Sus planes abortaron sin que hasta ahora se haya sabido el verdadero motivo.
Después de haber prendido a algunos oficiales del batallón Maipú, o Nº 6, comprometidos en este nuevo motín, se mandó orden al mayor Carson, el 17 de agosto, para que remitiese a Santiago en clase de presos al teniente Murillo con algunos otros. Carson trató de poner en ejecución las órdenes del Gobierno, mas todo el cuerpo se sublevó y tuvieron que escaparse los oficiales; incontinenti este regimiento de Dragones se puso a disposición de Murillo y de otros tres oficiales y marchó hacia el sur; en la tarde salió el cuerpo de Carabineros (o Coraceros) a su persecución.
Guillermo de Vic Tupper.

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Fiestas y celebraciones tipicas de Chile

Fiestas y Celebraciones
de la Republica de Chile

Fiestas Patrias:

Se celebran durante todo el mes de septiembre, pero especialmente los días 18 y 19, con ramadas, juegos populares y desfiles; entre éstos el más importante es la Parada Militar que se realiza en Santiago, en la elipse del Parque O’Higgins el día 19 de septiembre, Día del Ejército.
En algunas localidades se celebra el llamado “18 chico” el fin de semana siguiente a las Fiestas Patrias; en estas fechas es también tradicional la fiesta de la Pampilla en Coquimbo.

Fiesta de la Vendimia:

Al final de la temporada de cosecha de uvas se reúnen hombres y mujeres vendimiadores en una gran fiesta. En ella se mencionan España y Francia, tanto en los brindis como en las canciones que los acompañan; ello se entiende al relacionarlo con la llegada de las primeras cepas de origen español y los primeros técnicos franceses.

Putre:

Carnaval de Putre: Esta celebración se realiza en los últimos días de febrero, antes de cuaresma. Acuden a ella habitantes aimaras de los poblados altiplánicos. Además de música y comida, hay bailes, máscaras y disfraces que representan la cosmovisión andina.

Codpa:

Fiesta de la vendimia de Codpa: Entre marzo y abril se realiza, en la localidad de Codpa, la fiesta de la vendimia de las uvas con las cuales se elabora el vino pintatani, grueso y frutoso.

Caspana:

Enfloramiento del ganado: Entre enero y marzo, se realiza en todos los corrales familiares del poblado andino de Caspana una particular ceremonia que incluye bailes, cantos y rogativas, en la cual se coloca lana a los animales.

Chiu Chiu:

Via crucis en Chiu Chiu: Entre marzo y abril, para Viernes Santo, se realiza en el pueblo altiplánico de Chiu Chiu un tradicional via crucis español que incorpora elementos criollos haciendo de la celebración un interesante espectáculo.

La Tirana:

Fiesta de la Tirana: Esta fiesta religiosa se lleva a cabo cada 16 de julio en la localidad nortina de La Tirana. La celebración se realiza en honor a la Virgen del Carmen y es una de las más importantes y conocidas del país. Destaca por los bailes, los cantos, la gran cantidad de fieles venidos de todo el país y en especial por las máscaras y disfraces de múltiples colores.

Pica:

Fiesta de Reyes: Se realiza en la localidad de Pica, a 117 km. al sureste de Iquique a 1.300 m. sobre el nivel del mar. Su celebración se extiende a grandes ciudades como Arica e Iquique, en las cuales los adornos navideños de casas y locales comerciales se mantienen hasta dicha fecha.

Aiquina:

Virgen de Guadalupe de Aiquina, 8 de septiembre. Se celebra en el poblado de Aiquina, ubicado a 75 km. al noreste de Calama y a 2.980 m. de altura. La fiesta tiene una duración de cinco días y se inicia tres días antes de la fecha indicada.

San Pedro de Atacama:

Carnaval atacameño: Durante la segunda semana de febrero, tanto en San Pedro de Atacama, como en Chiu Chiu, Caspana y los demás pueblos atacameños de la zona, se celebra un carnaval con disfraces, bailes típicos y degustación de gastronomía y bebidas típicas de la región.

Vallenar:

Fiesta del Roto Chileno: El fin de semana más cercano al 20 de enero se celebra en la quebrada de Pinte, hacia el interior de Vallenar, un festival costumbrista organizado por la junta de vecinos en el que se realizan competencias típicas chilenas.

El Tránsito:

Fiesta huasa de El Tránsito: Durante la segunda semana de febrero el club de huasos de la localidad de El Tránsito realiza una fiesta que consiste en competencias campesinas y espectáculos folclóricos.

San Félix:

Fiesta de la vendimia de San Félix: Durante todo febrero en el pueblo de San Félix, a doscientos kilómetros de Copiapó, en el valle del río El Carmen, se realiza la principal fiesta de la zona, que es organizada por la junta de vecinos. A los bailes en la plaza los fines de semana acuden habitantes de todo el valle y culmina con un festival gastronómico y un concurso de artesanías locales.

San Fernando/Copiapó:

La Candelaria, primer domingo de febrero. Su celebración se efectúa en la localidad de San Fernando, a 4 km. al este de Copiapó. También es venerada en otros puntos del país. La Virgen de la Candelaria se representa con una vela en las manos como símbolo de la purificación de la mujer. Es una de las fiestas más antiguas del norte y reúne a fieles de todo el país y de naciones limítrofes.

Tierra Amarilla:

Fiesta del Toro Pullay: En la localidad de Tierra Amarilla se celebra, a finales de febrero, esta antigua fiesta costumbrista con comparsas por las calles que acompañan a personajes disfrazados que representan el bien y el mal.

Los Choros:

San José Obrero: El santo carpintero es celebrado el 19 de marzo en Los Choros con una fiesta religiosa que cuenta con bailes chinos de la zona y de otras localidades y regiones.

La Serena:

Virgen del Rosario: Con cantos antiguos y tradicionales se manifiesta el 8 de enero en la localidad de Diaguitas, en La Serena, la devoción a la Virgen del Rosario. Una fiesta y una procesión cierran esta celebración.

Salamanca:

Señor de la Tierra: El segundo domingo del mes de enero se celebra en la localidad precordillerana de Cunlagua, cercana a Salamanca, la Fiesta del Señor de la Tierra, la más importante de la comuna y en la cual se pueden apreciar las faenas agrícolas y ganaderas.

Monte Patria:

Festival de Tulahuén: A 45 minutos hacia la cordillera desde Monte Patria se realiza, durante la segunda semana de febrero, una exposición de vinos, quesos y tejidos.

Vicuña:

Fiesta de la vendimia en el Valle del Elqui: Durante todo febrero en Vicuña se celebra la vendimia con bailes, música y actividades campestres. En Paihuano se realizan fiestas típicas, como la pampilla de verano, la noche de estrellas y el Festival de la Voz de la Uva.

Sotaquí:

Fiesta del Niño Dios, 6 de enero. Se celebra en el pueblo de Sotaquí, ubicado a 8 km. de Ovalle. En ella toman parte creyentes chilenos y argentinos. Destacan las hermandades de danzantes ataviados con vistosos trajes de vivos colores y muy adornados.

Combarbalá:

Encuentro artístico de Combarbalá: Durante semana santa en la localidad de Combarbalá, pueblo dedicado a la explotación de la piedra combarbalita, en la Región de Coquimbo, se realiza un encuentro de pintores y escultores nacionales y regionales.

La Ligua:

Tejidos de La Ligua: Cada mes de enero, durante una semana se realiza una feria de los tradicionales tejidos de La Ligua, organizada por la Municipalidad en la Plaza de Armas.

Calle Larga:

Fiesta en Calle Larga: En el mes de enero, en la localidad de Calle Larga se realiza una fiesta en torno a la cosecha del trigo. La actividad se inicia acumulando las gavillas y seleccionando las yeguas. Durante la trilla hay bailes campesinos, competencias, actuación de conjuntos folclóricos y gastronomía típica.

Olmué:

Festival del Huaso de Olmué: A fines de enero se realiza en Olmué este tradicional festival de la canción folclórica, uno de los más importantes del país, organizado por la Municipalidad.

San Bernardo:

Festival de San Bernardo: La última semana de enero tiene lugar el Festival Nacional de Folclor de San Bernardo, la competencia musical más importante en este género. Durante cinco días se presentan grupos nacionales y extranjeros en el anfiteatro de San Bernardo.

Culiprán:

Festival del choclo cabello rubio: Esta festividad que se realiza durante febrero en la localidad de Culiprán, famosa por su producción de choclos, reúne a las familias de los campesinos para la compra de productos agrícolas. Este es uno de los eventos más importantes de la zona para los agricultores de la comuna de Melipilla.

Los Andes:

Fiesta huasa y trilla a yeguas: En la primera semana de febrero, en San Esteban, Los Andes, se realiza un festival folclórico que se festeja con trilla de yeguas, carreras a la chilena y otras competencias campesinas, además de comidas típicas. Gran cantidad de público se reune en el Parque Municipal La Hermita.

Limache:

Virgen de las Cuarenta Horas: En el último domingo de febrero, gran cantidad de fieles se dirige a la parroquia Santa Cruz de Limache, donde, durante cuarenta horas, se celebra esta fiesta religiosa en honor a la virgen.

Casablanca:

Encuentro Nacional de Payadores: A mediados de marzo, durante dos días, se celebra en Casablanca, un encuentro nacional de payadores, al cual acuden cultores y estudiosos de esta expresión folclórica de todo el país.

Virgen de Lo Vásquez:

Virgen de Lo Vásquez, 8 de diciembre. Esta festividad se realiza en el Santuario de Lo Vásquez, a 32 km. de Valparaíso. Es la más significativa de las fiestas de V Región. Gran cantidad de peregrinos llegan a ella a pagar sus mandas.

San Felipe:

Fiesta de la vendimia en San Felipe: Con motivo de la vendimia, durante marzo se desarrolla en San Felipe una fiesta tradicional con actividades culturales y folclore, en la que participa un numeroso público.

Zona Central:

Fiesta de Cuasimodo: La fiesta de Cuasimodo, que se celebra entre marzo y abril, adquiere gran colorido y masividad en las localidades de Lo Abarca, Cuncumén, Lo Barnechea, Llay Llay, Casablanca, Maipú, Talagante, Conchalí e Isla de Maipo. En esta celebración religiosa callejera, que se realiza el domingo siguiente a la Pascua de Resurrección, el sacerdote lleva la comunión a los enfermos, acompañado por huasos en carros, caballos y bicicletas, adornados con flores, papeles, banderas chilenas y otras estampas.

San Clemente:

Encuentro chileno-argentino: Durante la primera quincena de enero se realiza el Encuentro chileno-argentino en el límite fronterizo Paso Pehuenche, en San Clemente. Se trata de un evento organizado por las municipalidades de ambos lados de la cordillera (San Clemente en Chile y Malargue en Argentina). Incluye música folclórica, bailes y competencias deportivas.

Cauquenes:

Fiesta de San Sebastián: Entre el 15 y el 21 de enero se celebra en Colbún la Fiesta de San Sebastián, en la que fieles y devotos peregrinan durante una semana para pagar favores y mandas al santo en la localidad de Panimávida. El 20 de enero se celebra al mismo santo en una peregrinación hasta Pelluhue, en Cauquenes.

Cachivo:

San Sebastián de Cachivo: El 20 de enero y el 20 de marzo, en Cachivo, camino a Las Lomas, se celebra a San Sebastián con una fiesta de gran colorido en la que intervienen gran cantidad de tradiciones locales. Miles de personas llegan a pagar sus mandas hasta el santuario, ya sea caminando, en carretelas o a caballo.

Pelluhue:

Festival de la Trilla: La última semana de enero, en el gimnasio municipal de Pelluhue, se celebra un festival de la canción con la participación de destacados folcloristas nacionales. Se trata de un certamen competitivo de gran nivel y trayectoria.

Quiñipeumo:

Festival de la Sandía: La última semana de enero se realiza en el pueblo de Quiñipeumo, Maule, este festival que reúne a agricultores y campesinos en torno al folclor. Juegos criollos, competencias deportivas y musicales, además de la elección de reina, forman parte de la celebración.

Pelluhue:

Trillas a yegua suelta en Pelluhue: A fines de enero y principios de febrero en la localidad de Pelluhue se realiza la trilla a yegua suelta con encuentros campesinos costumbristas, amenizados por grupos folclóricos y cantores populares. El dueño de casa, con apoyo de la municipalidad, ofrece comida y tragos típicos.

Amerillo:

Carnaval del agua: A fines de enero e inicios de febrero, en la localidad de Amerillo, por la ruta internacional El Pehuenche, se realiza una fiesta tradicional que incluye elección de reina, juegos criollos y un espectáculo artístico bailable.

Licantén:

Rodeo oficial de Licantén: El rodeo de Licantén, que se celebra la primera semana de febrero es el más importante del sector. De él salen representantes para la competencia nacional y regional. Hay demostraciones de riendas y amansaduras.

Linares:

Feria internacional de artesanía de Linares: Durante la segunda quincena de febrero se realiza en Linares una feria de artesanía que reúne exponentes seleccionados de la artesanía tradicional de diferentes países.

Coihueco:

Coihueco y sus raíces criollas: Durante la primera quincena de enero se realiza en Coihueco, Chillán, una fiesta de tres días para mostrar la música, el baile, la gastronomía y las actividades campesinas tradicionales de la zona. El evento se realiza en un escenario flotante en el embalse de Coihueco.

Yumbel:

San Sebastián de Yumbel: El 20 de enero y el 20 de marzo se celebra a San Sebastián en Yumbel. Miles de peregrinos, que recorren largas distancias caminando, e incluso de rodillas, llegan de todo el país a rezar y a pagar sus mandas a la iglesia parroquial, donde se encuentra la imagen del santo, en una muestra impresionante de devoción religiosa popular.

Santa Cruz:

Fiesta de la vendimia en Santa Cruz: Con motivo de la vendimia, durante marzo se desarrolla en Santa Cruz una fiesta tradicional con actividades culturales y folclore, en la que participa un numeroso público.

San Ignacio:

Rodeo oficial de San Ignacio: El primer fin de semana de febrero, en la medialuna de San Ignacio, se realiza un rodeo de alto nivel, que cuenta con la participación de destacadas colleras a nivel regional y nacional. Es organizado por el Club de Huasos Rodeo Chileno.

Yungay:

Fiesta de la Candelaria en Yungay: En la capilla de Yungay, a 69 kilómetros de Chillán, se celebra el 2 de febrero una misa en honor a la Virgen de la Candelaria, en la que se bendice la imagen de la divinidad. En la cercana localidad de Pangal del Bajo se realiza una fiesta criolla con ramadas, vinos y comidas típicas.

Tirúa:

Feria costumbrista de Tirúa: En la comuna de Tirúa se realiza, durante la primera quincena de febrero, una feria costumbrista con actividades culturales, muestra de artesanías, productos agrícolas y degustación de comidas típicas.

Puerto Saavedra:

Fiesta de San Sebastián en Puerto Saavedra: El 20 de enero se celebra en la localidad de Puerto Saavedra una fiesta religiosa en honor a San Sebastián con abundante comercio.

Carahue:

Semana de Trovolhue: La cuarta semana de enero se celebra la semana de Trovolhue, en la localidad cercana a Carahue. La celebración incluye gastronomía, folclor y recreación.

Villarrica:

Muestra mapuche de Villarrica: Durante el verano se realiza una exposición en la feria mapuche de Villarrica. Allí se pueden encontrar trabajos de importantes artesanos, además de la reproducción a escala real de una ruca construida en totora y junquillo.

Futrono:

Nguillatún en Futrono: En la localidad de Futrono, a orillas del Lago Ranco, en la Región de los Lagos, desde el 12 hasta el 14 de febrero se realiza un nguillatún mapuche. Se trata de un ritual colectivo de acción de gracias y petición por las cosechas y el bienestar de la comunidad.

Niebla:

Encuentro costumbrista de la Costa: A 20 minutos de Valdivia, en Niebla, se realiza durante la segunda y la tercera semana de febrero un encuentro cultural, costumbrista y gastronómico en el cual se venden comidas típicas y artesanía.

Frutillar:

Exposición de artesanía local de Frutillar: Entre el 15 de enero y el 15 de febrero se realiza en el Colegio Bernardo Phillippi de Frutillar una muestra de artesanía local organizada por la Municipalidad.

Frutillar:

Fiesta criolla de los colonos en Frutillar: El primer domingo de febrero tiene lugar en la Colonia La Radio, en Frutillar, una festividad que incluye carreras a la chilena, juegos criollos, cabalgatas, paseos en carretón y espectáculos folclóricos. Hay un gran despliegue de comidas típicas: asados al palo de cerdo, de cordero y de vacuno, anticuchos, cazuelas, curanto, empanadas, sopaipillas, pastel de choclo, tortillas, kuchen, tortas, mote con huesillos, entre otras cosas.

Carelmapu:

Fiesta de la Candelaria en Carelmapu: El 2 de febrero se realiza, en honor a la Virgen de la Candelaria, una peregrinación de feligreses en la localidad de Carelmapu. Llegan allí gran cantidad de embarcaciones engalanadas, provenientes de la Isla de Chiloé. La celebración dura un día entero.

Caulín:

Festival santuario de las aves Caulín: Durante todos los fines de semana del verano, en la localidad de Caulín, a 9 kilómetros del Canal de Chacao, se lleva a cabo una fiesta costumbrista incorporada dentro de las actividades turísticas de Ancud que incluye artesanía, folclor y gastronomía.

Castro:

Fiesta tradicional de Nercón: Gastronomía, folclor y faenas tradicionales forman parte de la fiesta campesina que el 5 de febrero tiene lugar en Nercón, a pocos minutos de Castro. Al otro dia la celebración se repite en La Estancia, a 5 kilómetros de Castro.

Llau Llau:

Maja chilota: El 13 de febrero en la localidad chilota de Llau Llau, se realizan faenas tradicionales y una fiesta campesina para la elaboración y degustación de la chicha de manzana.

Quemchi:

Festivales costumbristas chilotes: A mediados de febrero, durante el fin de semana, en la localidad de Quemchi, a 60 kilómetros de Ancud, se organiza un festival musical que incluye gastronomía y artesania. En tanto, el tercer fin de semana del mes se realiza en el Parque Municipal de Castro el Festival Costumbrista Chilote, que incluye muestra cultural, folclor, faenas típicas, artesanía, gastronomía, y exposición de las distintas variedades de papas nativas. En Puerto Natales todos los años, en febrero, el Centro Hijos de Chiloé, que agrupa a inmigrantes de la isla, organiza un encuentro musical que busca preservar las costumbres chilotas.

Punta Arenas:

Ganado de Punta Arenas: La primera semana de febrero, durante tres días se realiza la Feria Ganadera Expogama en Punta Arenas, organizada por la Asociación de Ganaderos de Magallanes. Incluye exposición de ganado y gastronomía local.

banderas y escudos de Chile

banderas y escudos de Chile

cuatro siglos de uniformes en chile

Batallas y combates en la Historia de Chile

1485:
Batalla del río Maule: Los mapuches detienen el avance de los incas que lleguen en su dominación hasta las márgenes del río Maule. Tal acción hace que los habitantes del sur del Maule sean conocidos por los incas como "poromaucas, palabra que se españolizó como promaucaes. Existe una duda razonable sobre la fecha, que bien podría ser hacia 1520.

Septiembre 1536:

Batalla de Reinohuelén: Combate librado en 1536 entre conquistadores españoles al mando de Gómez de Alvarado y guerreros mapuches, en la confluencia de los ríos Ñuble e Itata, en Chile.
Enero 1541:
Combate del Mapocho: Don Pedro de Valdivia se puso en contacto con el cacique Vitacura, principal representante de los incas en estas tierras, manifestándole la intención de levantar una ciudad en la isla del cerro Huelen. El consentimiento de Vitacura provocó la indignación del cacique Michimalonco.

Enero 1541:

Escaramuzas en Aconcagua: Diversos enfrentamientos contra las fuerzas de Michimalonco, quien tendió variadas emboscadas a los expedicionarios y lo mismo hicieron Catiputo, Tanjalongo y otros caciques subalternos.
Mayo 1541:
Conquista de la fortaleza de Paidahuén: Pedro de Valdivia se dirige contra Michimalonco, Como rescate para recuperar la libertad, este ofrece los lavaderos de oro de Marga-Marga.
Agosto 1541:
Desastre de Con Con: Los caciques Trangolonco y Chigalmanga, queman un bergantín en construcción en la desembocadura del Estero Marga-Marga, matan a los españoles, negros e indios peruanos, escapando sólo Gonzalo de los Ríos con un esclavo negro.. Se desata un levantamiento general que comprende los valles de Aconcagua y Cachapoal.

11 de Septiembre 1541:

Destrucción de Santiago: Michimalonco, como caudillo (toqui) general de los indios de la comarca, encabezó contra la recién fundada ciudad de Santiago del Nuevo Extremo, un asalto el 11 de septiembre de 1541 que terminó en fracaso, merced a la sostenida resistencia de los españoles que guarnecían la plaza. En la defensa de la ciudad, se señaló particularmente doña Inés de Suárez que no dudó en dar muerte a Quilicanta y a siete caciques picunches entre los que se contaba el Cacique Apoquindo, prisioneros de los españoles que el ejército indígena pugnaba por libertar. De lo desigual del combate da fe la desproporción en el número de los combatientes, que fue de unos 10.000, por parte de los picunches, y de 55 soldados, más 5.000 yanaconas auxiliares, por los españoles.
Febrero 1544:
Combates en el Cachapoal y en el Maipo: Hasta esta fecha, Valdivia no había podido reconocer su gobernación más allá del Cachapoal, y su dominio efectivo sólo abarcaba los alrededores de Santiago, y con menor seguridad, el valle de Quillota. Con los refuerzos que le trajo Monroy, resolvió extenderlo hasta el sur sin trazarse límites y hacia el norte, hasta La Serena.

Agosto 1544:

Combate en el Limari: Pero Gómez se había encaminado al valle de Aconcagua con el propósito de someter a los indios radicados en él. Michimalongo lo obligó a retroceder hasta Santiago y el gobernador tuvo que dirigirse personalmente contra el célebre cacique.

20 de Febrero 1546:

Combate de Quilacura: Fue una batalla en la guerra de Arauco, combate nocturno, a cuatro leguas del Río Biobío, entre la expedición española de Pedro de Valdivia y una fuerza de guerreros mapuches, liderada por el toqui Malloquete. En este enfrentamiento fue capturado un mozalbete llamado Lautaro.

11 de Enero 1549:

Destrucción de La Serena: Cuando recién comenzaba a cimentar su historia, una sublevación de los indígenas provoca la muerte a casi todos los españoles (escapando, al parecer sólo un sobreviviente llamado Juan Cisternas), destruyendo e incendiando el poblado como represalia del mal trato recibido por los diaguitas de parte de los conquistadores españoles.

24 de Enero 1550:

Expedición a Arauco: Iba a empezar la guerra de Arauco. Cuarenta mil guerreros mapuches van a luchar durante tres siglos por el predominio y la supervivencia contra el invasor español y sus descendientes y contra los antiguos señores del suelo los representantes del pueblo chincha-chileno ahora aliado del nuevo invasor.

22 de Febrero 1550:

Combate de Andalién: Pedro de Valdivia, en su avance al sur, desea fundar una ciudad en la zona de Penco. En su intento es detenido por los mapuches y después de duro combate, los derrota. El ataque ocurrió en la noche y sólo se alcanzó la victoria una vez dejar los caballos y pelear aquí en lucha cuerpo a cuerpo.
12 de Marzo 1550:
Batalla de Penco: Fue una batalla entre 60.000 Mapuches bajo comando de su toqui Ainavillo con sus aliados de Arauco y de Tucapel y contra 200 españoles de Pedro de Valdivia con una gran cantidad de Yanaconas incluyendo 300 auxiliares de Mapochoes bsjo ordenes de su líder Michimalonco que defendía la fortaleza recosntruida en Penco.

14 Diciembre 1553:

Combate de Purén: Los indios se dieron cuenta del debilitamiento de los españoles y que, a pesar de su disimulo, no sabían ocultar su contento ante la proximidad de la venganza. La forma como se desarrolló la rebelión, manifiesta que venía preparándose desde hacía tiempo, pero los detalles nos son desconocidos.

25 de Diciembre 1553:

Batalla de Tucapel: Pedro de Valdivia muere a los 51 años, el conquistador español y sus soldados son derrotados y todos muertos por las huestes araucanas de Lautaro.
26 de Diciembre 1553:.
Los 14 de la Fama: Se conoce con este nombre al grupo de trece soldados españoles más su capitán, Juan Gómez de Almagro, que sostuvieron una dura resistencia en la cordillera de Nahuelbuta al ataque del fuerte San Diego de Tucapel en Cañete, provincia de Arauco por el toqui Lautaro y sus huestes.

26 de Febrero 1554:

Batalla de Marihueñu: Victoria mapuche bajo el mando de Lautaro. El sur de Chile queda en manos de los mapuches. Los españoles abandonan la ciudad de Concepción.
27 de Febrero 1554:
Destrucción de Concepción: Luego de la derrota de Marihueno, el espanto y la desazón se apoderaron de los habitantes de Concepción que sólo atinaron a huir. Los caminos que conducían a Santiago, comenzaron a llenarse de la gente que escapaba en medio de una confusión indescriptible.
02 de Noviembre 1555:
Expedición de Villagra y Defensa de La Imperial: Pedro de Villagra, que había quedado en La Imperial con 150 hombres empezó por fortificar y pertrechar la ciudad. La rodeó de fosos y de parapetos, y distribuyó la, gente en cuadrillas, cada una Con su caudillo y con la orden precisa de lo que debía hacer en caso de asalto. Pero los indios, distraídos con el triunfo de Marigüeñu o no sintiéndose capaces de atacar a los españoles dentro de la ciudad, no la asaltaron ni establecieron un sitio en regla.
12 de Diciembre 1555:
Segundo ataque a Concepción: A pesar de la mortandad, Lautaro pudo reunir un ejército que, po¬siblemente, fluctuaba alrededor de unos 4.000 mapuches, y atacó a Los Confines (Angol). Los españoles huyeron a La Imperial sin intentar si¬quiera la resistencia. Inmediatamente, el generalísimo mapuche dirigió su ejército sobre Concepción.
14 de Noviembre 1556:
Acción de Mataquito: Lautaro, habiendo cruzado el Maule, acampa en Mataquito. Diego Cano, enviado por el cabildo de Santiago sostiene contra él y es derrotado.

01 de Abril 1557:

Muere el cacique Lautaro en el combate de Peteroa. El y sus hombres fueron atacados por sorpresa en el pucará de Petorca.
09 de Agosto 1557:
Ataque al Fuerte San Luis: Tras la victoria de Peteroa, los españoles procedieron a levantar un fuerte que llamaron San Luis el que estuvo mandado por don Garcia Hurtado de Mendoza en las cercanías de la destruida Concepción, es decir donde hoy se levanta el puerto de Talcahuano. Ahí fueron atacados por tres escuadrones araucanos que estaban al mando de los toqui Grecolano, Petegolen y Tucapel.

08 de Noviembre 1557:

Batalla de Lagunillas: Fue la primera batalla en que las tropas del virrey Andrés Hurtado de Mendoza libraron contra los araucanos del cacique Caupolicán..En este enfrentamiento fue tomado prisionero el caudillo Galvarino, que, como castigo, sufrió la amputación de ambas manos.

30 de Noviembre 1557:

Batalla de Millarapue. El caudillo mapuche Caupolicán es derrotado por los españoles. Galvarino cae nuevamente prisionero y es ahorcado. Las fuerzas realistas acamparon en Millarapue, al interior de la Araucanía el 29 de noviembre. Los mapuches al mando de Caupolicán intentaron un ataque en la alborada del 30 de noviembre, por sorpresa al campamento enemigo. El número de atacantes era de 3.000 a 10.000 al frente de ellos venía Galvarino, que se mostraba con sus dos brazos cortados azuzando las pasiones de sus camaradas.
20 de Enero 1558:
Batalla de Cayucupil: Aquella mañana del 20 de enero lentamente ingresaban al desfiladero de Cayucupil o Quebrada de Puren llevando grandes cantidades de pertrechos. Cuando se hallaban a mitad de la Quebrada de Puren fueron atacados por cientos de mapuches que desde una altura superior arrojaban descumunales piedras y cuanto objeto ofensivo encontraban, causando numerosas bajas.

05 de Febrero 1558:

Sitio y Batalla del Fuerte de Cañete: Cañete fue rodeado y sitiado por más de 15.000 mapuches que establecieron un sitio al fuerte. La idea de Caupolicán era dejar morir de hambre a los sitiados. Andresillo abrió las puertas del fuerte y se introdujó una masa de mapuches en forma silenciosa, cuando ya casi estaban todos al interior del fuerte fueron recibidos por descargas de fusilería en forma alternada que dejaron una gran mortandad entre los atacantes que fugaron en desbandada.

13 de Diciembre 1558:

Batalla de Quiapo: Unos mil quinientos mapuches al mando del cacique Petegolen se dieron a la tarea de levantar un fuerte en los llanos de Quiapo ubicado en las cercanías de la Ensenada del Carnero, al norte de Lebu y muy próximo de donde los españoles tenían levantado un formidable recinto militar desde el cual como punta de lanza clavado en el pecho de los mapuche apoyaban las incursiones que en forma continua realizaban a las tribus para desalentarlos.

30 de Diciembre 1558:

Batalla del Fuerte de Arauco: La brillante victoria conseguida en Lincoya gracias a las especiales condiciones de estratega que tenía el toqui Petegolen, digno émulo de Lautaro, lo entusiasmaron para seguir en la lucha levantando un fuerte frente al de los españoles. Mas estos con la trágica experiencia de Lincoya, no hicieron movimiento bélico alguno y aceptaron con resignación la provocación de los indios. Hasta que un dia cansados de ser insultados desafiaron a los aborígenes a una batalla de caballería a muerte. En una planicie situada entre ambas fuerzas se libraría la primera batalla de caballería entre peninsulares y araucanos.

16 de Enero 1563:

Batalla Del Fuerte Lincoya: Un grupo de batidores exploró el terreno y comprobó que la fortificación mapuche adolecía de un grave defecto que facilitaba un ataque de caballería. Además que al ser de madera sería fácil incendiarla. Participó la artillería que con su cañoneo causo un incendio y bajas entre los indios. Tras el ablandamiento que fue brutal entró en acción la caballería al mando de don Pedro de Villagra.

Enero 1563:

Derrota de Catiray o Mareguano: Don Pedro de Villagra al llegar a Catiray fueron interceptados por una numerosa guerrilla araucana, trabándose en un sangrienta lucha donde los españoles perdieron 42 hombres debiendo emprender la retirada en franca derrota hacia el fuerte de Arauco llevando varios heridos.
24 de Enero 1563:
Asalto de Angol: Ese día llegó la primera a la vista de Angol. Avendaño, que mandaba en la Ciudad, dejó en ella a los soldados más heridos para que la defendieran de la más pequeña de las dos columnas que la amagaban.
03 de Febrero 1563:
Asalto a la Plaza de Arauco: Los mapuches se presentaron frente a Arauco. Pedro de Villagrá intentó repetir la defensa de La Imperial en 1554, dando golpes contundentes a los asaltantes. El y sus capitanes los derrotaron repetidas veces, pero al día siguiente amanecían más cerca de las murallas y más numerosos.
15 de Abril 1563:
Segundo Sitio de Arauco: Terminada la recolección de las cosechas, los mapuches se presentaron delante de Arauco en abril de 1563. Esta vez venían preparados para poner en la plaza un sitio en regla.

22 de Enero 1564:

Combate del pucará de Lebotacal: Los mapuches construyeron un pucará en Lebotacala a algunos kilómetros de Concepción. Luego de un breve combate logró desbaratarlo, pero fue informado de una concentración de 3.000 indios comarcanos al mando de un cacique de nombre Loble que estaba casi a las puertas de Concepción.

24 de Enero 1564:

Combate de Angol: Los mapuches, entusiasmados con la alianza de los indios de la zona comprendida entre Itata y el Maule, resolvieron destruir a Angol antes de iniciar el sitio de Concepción.
Febrero 1564:
Cerco de Concepción: Los caciques Millalelmu y Loble establecieron el cerco al fuerte de Concepción, encerrando a Villagra y toda la población en las empalizadas. El sitio duró alrededor de dos meses de continuas escaramuzas.
17 de Febrero 1565:
Segunda Combate de Reinohuelen: En el mismo lugar donde 29 años antes las fuerzas promaucaes (indios que Vivian al norte del Biobio) pero igualmente buenos guerreros que rechazaron la avanzada enviada por don Diego de Almagro al mando de Gómez de Alvarado en 1536 impidiéndole seguir al sur. Tres décadas después a mediados de febrero de 1565 una columna compuesta por 152 hombres de caballería y 700 indios amigos al mando de don Pedro de Villagra y de don Pedro Fernández de Córdova atacaron un fuerte que tenían los indios promaucaes.
19 de Febrero 1565:
Combate de Tolmillan: Dos días después de la batalla de Reinohuelen llegaba a marcha forzada el cacique Loble que venía a socorrer a sus compañeros que combatían en Reinohuelen, ignorando que estos habían sido derrotados y que los españoles le tenían tendida una emboscada en las cercanías del actual pueblo de Tormillan.
Marzo 1567:
Ataque al pucara de Cañete: Los indios habían construido un pucará en los cerros vecinos a Cañete, y el general comprendía que una rebelión se aproximaba. Sin consultar a la Audiencia, resolvió destruirlo antes que la concentración de los indígenas hiciera el asalto más difícil.
07 de Enero 1569:
2da Batalla de Catiray o Mareguano: En esta segunda contienda librada en este punto de la cordillera oriental de Nahuelbuta entre 220 soldados españoles y 600 yanaconas al mando del gobernador Melchor Bravo de Saravia, contra dos mil indios al mando de los caciques Lonconaval y Millalemo que unieron sus fuerzas para enfrentar al invasor.
Septiembre 1570:
Derrota de Purén: A toda prisa se dirigian 200 soldados españoles al mando de don Miguel Avendaño de Velasco a socorrer a los castellanos amenazados por los mapuches de ser arrollados en cualquier momento en Angol. No se habían alejado mucho del río Puren cuando fueron atacados por un batallón al mando del cacique Pailacar, que entró violentamente en batalla, poniendo en serios aprietos a los conquistadores.
08 de Marzo 1577:
Primera Campaña de Quiroga: El plan de pacificación que se iba a poner en práctica era obra del virrey del Perú, y Quiroga lo había aceptado con entusiasmo. Consistía en una enérgica campaña a través de Arauco, llevando el ejército concentrado. Se tomaría prisioneros a los indios más belicosos; se ejecutaría a uno que otro cabecilla, y los demás serían "trasladados a la provincia de Coquimbo, desgobernándolos.
27 de Noviembre 1578:
Segunda Campaña de Quiroga: A pesar de la extraordinaria crudeza del invierno de 1578, las hostilidades de los indígenas no cesaron. Amagaban el campamento en canoas y caían sobre los caballos durante el pastoreo y sobre los grupos que iban al campo a recoger comida.
20 de Diciembre 1584:
Campaña de Sotomayor: Estas fuerzas hicieron algunas campeadas sin importancia, que ni siquiera merecerían mencionarse, a no mediar la trampa en que estuvo a punto de perecer Bernal de! Mercado.
10 de Enero 1597:
Campaña de Oñez de Loyola: El nuevo mandatario se encontró imposibilitado para reabrir la campaña de Arauco. Logró, sin embargo, enviar al sur unos doscientos arcabuceros, al mando de su hermano Luis y dé Lorenzo Bernal del Mercado.

23 de Diciembre 1598:

Batalla de Curalaba: Esta batalla se convirtió en el inicio efectivo de la Rebelión Mapuche de 1598 que terminó finalmente con todas las ciudades al sur del río Biobío, excepto Concepción.
22 de Enero 1599:
Rebelión General del pueblo Mapuche: La sublevación se propagó con la rapidez del fuego que ha hecho por largo tiempo su camino subterráneo. El espíritu de rebeldía asomó casi instantáneamente desde el Maule hasta Osorno. Los españoles se encontraron pronto encerrados en las ciudades y fuertes, sin poder auxiliarse unos a otros.
06 de Abril 1599:
Batalla de Quilacoya: En Quilacoya junto al río Biobio pelentaro fue interceptado por las fuerzas españolas del recién designado gobernador don Pedro de Vizcarra, quien cayó por sorpresa sobre los mapuches, propinándole una contundente derrota.
09 de Octubre 1599:
Ataque a Chillán: Chillán fue atacada resultando muertos 4 españoles y llevándose los indios 30 mujeres y niños. La cifra total de muertos ascendía ya a 200 españoles, siete ciudades arrasadas, sitiadas o despobladas.
26 de Noviembre 1599:
Asalto de Valdivia: La derrota sufrida en Quilacoya no amilanó al cacique Pelantaro y decidió rehabilitarse y vengarse de esa derrota. Para ello cambio su estrategia en noventa grados, decidiendo no atacar Concepción y dirigir su accionar hacia Valdivia que por mucho tiempo vivía en paz. Pelantaro planificó el ataque a esta última ciudad con toda calma, sin dejar pasar un solo detalle, al igual como lo hubiera hecho el mas sagaz estratega moderno.
Noviembre 1601:
Muerte del coronel Francisco del Campo: El coronel resolvió trasladarse a Castro con todos los pobladores. Se dirigió personalmente con 60 soldados a la isla, a disponer los auxilios y las comidas "para llevar tantas mujeres, niños y trastes de casas y haciendas como tenían, y llegando a la primera bahía se alojó y repartió la gente a buscar algunas piraguas en que pasar aquel brazo de mar", quedando él con muy pocos soldados.
07 de Febrero 1602:
Destrucción de la ciudad de Villarrica: Los defensores de Villarrica al mando del capitán Rodrigo de Bastidas decidieron vender cara su existencia, cuando supieron que los indios lanzarían el ataque final antes que llegaran los refuerzos españoles. Los heroicos defensores resistieron los primeros ataques indígenas y lo harían hasta la muerte.
Enero 1603:
Campaña de 1603: En la campaña del verano de 1602: se construyó diversos fuertes en las márgenes del Biobío, en lugares bien escogidos y dispuestos en forma de poderlos socorrer. En la misma temporada procuró afianzar el dominio español, al norte de ese río, con numerosas expediciones; de suerte que al llegar el gobernador a Santiago, en junio de 1602, ya se consideraba definitivamente salvada esta parte del territorio.
Febrero 1603:
Asalto del Fuerte Santa Fe: Cuando llegó el momento de destruir el odiado fuerte de Santa Fe una noche silenciosamente lo indios se aproximaron al fuerte, pero fueron descubierto por un centinela que dio la alarma. Desde ese instante la batalla fue general, los mapuches fueron rechazados, pero volvieron con mas furia emprendiendo un sangriento asalto que resultó estéril. Mas toda la noche pujaron por ingresar y fueron rechazados. Comprendieron entonces que había que someter al fuerte a un durísimo sitio. Así se hizo y una hambruna que tuvo a muy mal traer a los sitiados.
Diciembre 1603:
Batalla Ciénagas De Lumaco: Después de sembrar el terror en las tribus retornó Alonso de Ribera al norte, siendo interceptado en un lugar cenagoso en Lumaco, donde los indios le presentaron un plan estratégico enseñado por Lautaro con excelentes resultados. Este consistía en internarse en el pantano donde la caballería no podía llegar porque se hundía en el barro. Pero olvidaron que el Gobernador Ribera era experto en el arte de la guerra, ordenando entonces que los yanaconas cubrieran con totora el camino y mandó la infantería, que con sus arcabuces dejó la mortandad.

Enero 1604:

Campaña de 1604 y 1605: En su penúltima campaña, la de la primavera de 1603 y verano de 1604, Ribera fundó un nuevo fuerte en el vado de Chepe, a la desembocadura del Biobío, que bautizó con el nombre de San Pedro de la Paz; y el 24 de diciembre fundó otro que denominó Nacimiento.
Diciembre 1605:
Campaña de 1606: García Ramón abrió su primera campaña en la primavera de 1605. Habla partido de Santiago el 6 de diciembre al frente de mil doscientos hombres, enterados con el contingente de España y los militares de los términos de la capital. En el sur le aguardaba otro ejército vecino a mil hombres, distribuidos en los fuertes. En Concepción recibió el socorro remitido por el virrey del Perú, con el cual pagó sus cuentas y atendió a los primeros gastos de la campaña.
Marzo 1606:
Desastre de Angol: Núñez de Pineda tenía orden de sacar de los fuertes hasta trescientos soldados, si los refuerzos de México no llegaban; pero temió debilitar mucho las guarniciones y se limitó a retirar ciento cuarenta y tres, para enterar doscientos.
Septiembre 1606:
Batalla de Boroa o de Palo Seco: La batalla se produjo cuando una guarnición española al mando del capitán Juan Rodulfo Lísperguer fue emboscada al salir del fuerte por entre 3.000 a 6.000 guerreros mapuches ocultos en los bosques ceranos muriendo todos los hispanos.
Febrero 1608:
Campaña de 1608: En las correrías del verano de 1608, García Ramón había contado con el recurso de unas mil lanzas amigas y había devastado los campos de los enemigos hasta reducirlos por la miseria a venir de paz y a establecerse en las inmediaciones de los fuertes, sin traspasar el radio de acción de estos establecimientos.
Diciembre 1610:
La Guerra defensiva de Luis de Valdivia: El padre Valdivia llegó al Callao a mediados de 1611, trayendo los despachos del gobernador para Alonso de Ribera y la real cédula de 8 de diciembre de 1610, que dejaba al criterio del virrey del Perú ensayar por tres a cuatro años la guerra defenslva.
1621:
Campaña Militar de Osores de Ulloa: Osores de Ulloa empezó por restablecer la disciplina en el ejército condenando a muerte a los desertores que logró capturar, y expurgando la oficialidad. Cuando creyó estar preparado, pasando por sobre las órdenes del rey dispuso una expedición, cuyo mando confió al maestre de campo Núñez de Pineda, a las ciénagas de Purén.
24 de Enero 1626:
Cesación de la guerra defensiva: En efecto, el 24 de enero de 1626, recibía Fernández de Córdoba una real cédula expedida en Madrid el 13 de abril de 1625, por la cual Felipe IV ordenaba reanudar la guerra con los mapuches y someter a esclavitud a los prisioneros.
1627:
Contraofensiva mapuche dirigida por Lientur: Como era de esperarlo, la contraofensiva araucana no tardó en de­sencadenarse. La dirigió un indio llamado Lientur, que hasta ese momento habla peleado como amigo en el campo español.
15 de Mayo 1629:
Desastre de Las Cangrejeras: Lientur jefe militar mapuche que luchó en la Guerra de Arauco. Su mayor victoria fue la Batalla de las Cangrejeras. Su actividad bélica concluyó cuando llevó a que los españoles firmaran paces temporales con la nación mapuche en el Parlamento de Quillín.
14 de Mayo 1630:
Sorpresa de Los Robles: Lazo de la Vega logró reclutar unos 150 españoles voluntarios en Santiago que pensaba sumarlos a los ya 1.600 soldados acantonados en el sur. Su idea era internarse en el mismo corazón de Arauco y dar una batalla armagedónica a los mapuches para terminar de una vez por todas con la guerra. El pánico general cundió cuando la población supo de las osadas intenciones del gobernador y el Cabildo le rogó que desisitiese de hacer ese tipo de guerra, pero fue inútil, Lazo de la Vega quería esa batalla decisiva.
13 de Enero 1631:
Batalla de La Albarrada: Lazo de la Vega salió del fuerte y eligiendo cuidadosamente el terreno fue a tender su línea de batalla en Petaco. La acción se inició con una carga de un escuadrón de indígenas que fueron contenidos con fusileros alternados protegidos por lanceros. Una vigorosa carga de caballería fue contenida por los escuadrones mapuches y el combate por unos instantes se tornó indeciso.
1632:
Campañas militares de 1631-1632-1633-1634: A la salida del invierno de 1631 las armas españolas habían tenido algunos éxitos locales de cierta importancia. Los indios auxiliares dieron muerte en el valle de Elicura a Quempuante.
06 de Enero 1641:
Parlamento de Quillin: El gobernador de Chile, Francisco López de Zúñiga, se reúnen en el llano de Quilín con los mapuches para firmar los acuerdos que reconocían la independencia de los indios, la devolución de cautivos españoles, el permiso para evangelizar el territorio indígena y sellar una alianza contra los enemigos del exterior. En favor de los mapuches se pactan la despoblación de Angol y la vuelta de la frontera a la línea del Biobío.
Enero 1651:
Las paces de Boroa: Acuña Y Cabrera, como la mayoría de sus predecesores, no tenia siquiera idea de los problemas que le aguardaban en su gobierno, y, a diferencia de ellos, tampoco era capaz de formársela.
14 de Febrero 1654:
Batalla de Río Bueno: Casi medio siglo de relativa calma vivieron los conquistadores, cuando en 1654 el ambicioso gobernador Antonio de Acuña y Cabrera envió a su cuñado, el maestre de campo don Juan Salazar con una fuerza de 900 españoles y 3.000 yanaconas atacaron al sur del río Bueno donde fueron rechazados por los huilliches, que los obligaron a repasar el citado río donde hicieron un puente de balsas para cruzarlo hacia el norte.
14 de Enero 1656:
Campaña mapuche del mestizo Alejo: Un soldado mestizo, que servía en el ejército español, generalmente conocido con el nombre de "el mestizo Alejo", había manifestado mucha viveza intelectual, valor, iniciativa y deseos de surgir. Solicitó que se le ascendiera a oficial, y como se le contestara con una repulsa, abandonó las filas y se pasó a los indios.
20 de Enero 1656:
Victoria de Conuco: Al sur del Biobío resistían las guarniciones de Valdivia y de Boroa. Los defensores de Valdivia recibieron provisiones por mar, y no sólo lograron rechazar los ataques de los roncos, sino que pudieron alejarlos de los alrededores de la ciudad.
Abril 1664:
Campaña militar de 1664: Tomás Calderón, que sucedió a Carrera como cuartel maestre, hizo una correría por Ilicura y Cayucupil, al llegar la primavera, y regresó con 300 cautivos, que se vendieron como esclavos, sin haber librado verdadero combate.
13 de Diciembre 1680:
Bartolomé Sharp incendia La Serena: En la mañana Sharp desembarcaba con 35 hombres en el puerto de Coquimbo para hacer agua y leña. Hecha la provisión, se encaminó a La Serena al frente de su pelotón.
1692:
Rebelión de Millapán: González de Poveda tenía prohibición real de hacer la guerra militar contra los mapuches a causa de la influencia de los mismos jesuitas ante la corte. Sin embargo, se alzó un cacique de la región de Maquegua, llamado Millapán quien realizó varios asesinatos a españoles. Poveda viendo que la insurrección iba creciendo se dio cuenta que si no actuaba pronto, la situación se desbordaría, así que después de negociar con autoridades eclesiásticas y con el apoyo de la población, sacó hacia el sur, una fuerza expedicionaria de 1.600 hombres, más 2.000 auxiliares. Viendo la determinación española, y la fuerza que se sustentaba, los indios corrieron a dar la paz en el Parlamento de Choque-Choque.
09 de Marzo 1723:
Abandono de los Fuertes al sur del río Bio-Bio: La rebelión se inició el 9 de marzo de 1723 con el asesinato del capitán de amigos Pascual Delgado en Quechereguas. Delgado era considerado uno de los máximos exponentes del sistema monopólico, odiado por su soberbia y los castigos "crueles y arbitrarios" que aplicaba.
Tras este suceso se generalizó el alzamiento, multiplicándose por toda la frontera del Biobío las incursiones de saqueo, el abijeato y el incendio de haciendas. Los fuertes españoles se hallaron de pronto incomunicados unos con otros. La rebelión terminó con el Parlamento de Negrete de 1726, en el que ambas partes firmaron la paces y establecieron un sistema de ferias regladas.
1766:
Levantamiento mapuche de 1766: Se produce una gran rebelión de los mapuche por oposición a la idea de reducirlos como pueblos.
1769:
Batalla de Laja:
1770:
Batalla de Negrete:
Marzo 1793:
Parlamento de Negrete, entre el Gobernador Ambrosio O´Higgins y 161 Toquis Araucanos.
01 de Abril 1811:
Motín de Figueroa: Ese día, las tropas del cuartel de San Pablo se insubordinaron y desconocieron el mando de Juan de Dios Vial y Juan Miguel Benavente. A los gritos de ¡Viva el Rey!, ¡Muera la Junta!, los soldados declararon que solamente obedecerían las órdenes de Figueroa.
01 de Abril 1813:
Toma de Concepción: A las 9 de la mañana del 2 de abril, supo en el camino que Antonio Pareja había desembarcado, y se había apoderado de Concepción. Carrera continuó su marcha. Por donde quiera que pasaba, organizaba tropas, buscaba pertrechos y víveres; y por medio de confinaciones, limpiaba la tierra de sarracenos, como entonces se denominaba a los partidarios de España. A las 8 de la noche del 5, estaba en Talca, y establecía allí su cuartel general.
24 de Abril 1813:
Combate de Linares: Las fuerzas de Pareja son rechazadas por las de Carrera. Elorreaga, cuya inteligente iniciativa se exteriorizó desde sus primeros actos en el servicio, intentó un reconocimiento, trabándose en un combate a distancia con las avanzadas patriotas, a las cuales hizo dos bajas. Atacado por fuerzas muy superiores, se retiró al sur.
26 de Abril 1813:
Batalla o Desastre de Yerbas Buenas: También se le denomina Sorpresa de Yerbas Buenas. En la batalla se enfrentaron las fuerzas chilenas al mando del coronel Juan de Dios Puga y las fuerzas españolas al mando del brigadier Antonio Pareja.
15 de Mayo 1813:
Combate de San Carlos: Tuvo como lugar San Carlos, en las cercanías de Chillán. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de José Miguel Carrera contra las realistas al mando de Juan Francisco Sánchez. La batalla finalizo con la victoria realista.
28 de Mayo 1813:
Combate de Talcahuano: José Miguel Carrera, general del ejercito patriota, derrota a los realistas.
08 de Junio 1813:
Captura de la fragata española "Thomas": Poco más tarde, el 7 de junio, apareció en la bahía la fragata "Thomas", que venía del Callao, conduciendo algunos jefes y oficiales, pertrechos y dinero para Pareja. Ignorando la caída de la plaza en poder de los patriotas, fondeó en el puerto de Tomé. Al amanecer del día 8, los oficiales Nicolás García y Ramón Freire, con dos lanchas cañoneras y algunos botes, se apoderaron de ella, sin que opusieran la menor resistencia.
Julio - Agosto 1813:
Sitio de Chillán: Los patriotas chilenos iniciaron el sitio de Chillán procurando expulsar a los realistas. No lo consiguieron.
Agosto 1813:
Combate de Huilquilemu: El comandante Elorreaga, al frente de 350 fusileros montados, se apoderó de Los Angeles, de Nacimiento y de toda la Isla del Laja, y desbarató a O'Higgins, quien le salió al encuentro con unos 300 hombres, cerca de Huilquilemu. El propio O'Higgins fue derribado del caballo con su mon­tura. El capitán Agustín López Alcázar, más tarde comandante del batallón número 3 en Maipo, logró rescatarlo, y, montando el caballo que le cedió el soldado Gabino Guardia, prosiguió la fuga.
Agosto 1813:
Combate de Quilacoya: Días más tarde O'Higgins, convenientemente reforzado, derrotó en Quilacoya a las mismas fuerzas de Elorreaga y Quintanilla. Tuvo que replegarse otra vez a Concepción, pero en octubre, el frente de más de 500 hombres, obligó a Elorreaga a evacuar las fronteras y volverse a Chillán.
17 de Agosto 1813:
Combate de Quirihue: Tuvo lugar la villa de Villa de Quirihue, actual Región del Biobío. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de José Joaquín Prieto contra las realistas al mando de Juan Antonio Olate. El combate finalizo con la victoria patriota.
23 de Agosto 1813:
Combate de Cauquenes: Fue un enfrentamiento llevado a cabo entre las fuerzas realistas del chileno Juan Antonio Olate y las fuerzas patriotas chilenas al mando del coronel Juan de Dios Vial. El combate finalizo con la victoria patriota.
24 de Agosto 1813:
Sublevación de Arauco: Los habitantes de Arauco estaban desesperados con las prorratas y exacciones. Sánchez, desde Chillán, y el franciscano fray Juan Ramón, misionero de la plaza, explotaron el descontento.
17 de Octubre 1813:
Batalla de El Roble. Luego del sitio de Chillán, las tropas patriotas al mando del General en Jefe, José Miguel Carrera y del, por entonces, Coronel Bernardo O'Higgins, se guarecieron en el paso de El Roble, en el río Itata en la tarde del 17 de octubre. En total, eran 800 soldados de las tres armas. Pasaron al reposo en la ribera sur, con la intención de cruzar el obstáculo en la mañana del día siguiente y se extremaron las medidas de seguridad contra una posible sorpresa de los guerrilleros realistas.
29 de Octubre 1813:
Combate de Santa Rosa de Trancoyan: Un pequeño desastre, ocurrido días más tarde, acabó con las ilusiones de los pocos entusiasmados con la victoria del Roble.
23 de Febrero 1814:
Resistencia en Cucha Cucha: El oficial chileno Santiago Bueras, contiene al enemigo con si intrepidez y coraje, hasta que unos 100 efectivos del cuerpo auxiliar de Buenos Aires, al mando de Juan Gregorio Las Heras, cargaron en un ejemplar orden y empuje que despertaron la emulación de las tropas chilenas.
Marzo 1814:
Desastre de Urizar: En un intento por sorprender a un destacamento realista, en un ataque nocturno sorpresa, el coronel Fernando Urizar tuvo una derrota inesperada perdiendo tropa y 2 cañones.
03 de Marzo 1814:
Derrota del Gomero: Fue efectuada por las tropas realistas de Gabino Gaínza al mando de Ildefonso Elorreaga, en contra de los patriotas que sólo en número de 300 deberían defender la ciudad al mando de Carlos Spano.
04 de Marzo 1814:
Toma de Talca: El comandante realista Ildefonso Elorregada se apodera de Talca, la cual estaba bajo el mando del español pasado a las tropas patriotas, Carlos Spano, quien murió en el centro de la plaza abrazado a la bandera chilena diciendo: "Muero por la patria, por la patria que me adoptó entre sus hijos".
19 de Marzo 1814:
Combate de El Quilo: Tuvo como lugar Ránquil, Región del Biobío, cerca de Ñipas, en la ribera sur del río Itata. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Bernardo O’Higgins contra las realistas al mando de Manuel Barañao. La batalla finalizo con la victoria patriota.
20 de Marzo 1814:
Combate de Membrillar. Fue librado en la ribera norte del río Itata. En ella se enfrentaron la división del ejército patriota chileno comandada por el coronel de ingenieros jefe de Estado Mayor, Juan Mackenna, y el ejército realista al mando de Gabino Gaínza.
29 de Marzo 1814:
Los realistas triunfan en Cancha Rayada. Durante la guerras de la independencia, Talca fue tres veces ocupada por los ejércitos enfrentados y en sus inmediaciones se libraron importantes batallas. Un destacamento patriota comando por Manuel Blanco Encalada atacó por error al grueso del ejército realista en Yerbas Buenas, arrastrando, en su huida a la capital, al resto de las fuerzas chilenas. Ello fuerza la firma de una tregua en Lircay y permite la retirada de los realistas a Concepción, donde podrán recuperar su poderío.
03 de Abril 1814:
Bernardo O'Higgins efectúa frente a las fuerzas patriotas el llamado "Paso del Maule". y Combate de Tres Montes del 7 de Abril, pequeña victoria patriota dirigida por Enrique Campino.
08 de Abril 1814:
Toma de Quechereguas: Tuvo como lugar el fundo Quechereguas. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Bernardo O’Higgins contra las tropas realistas de Gabino Gaínza. La batalla finalizo con la victoria patriota.
26 de Agosto 1814:
Combate de las Tres Acequias. Se enfrentaron los ejércitos de Bernardo O'Higgins Riquelme con los de José Miguel Carrera Verdugo, obteniendo este último el triunfo. O'Higgins derrotado se retiró a buscar más soldados, pero al saber de la llegada el país del realista Mariano Osorio, reconoció a Carrera como general en jefe del ejército.
1 y 2 de Octubre de 1814:
Batalla de Rancagua. Enfrentó a las fuerzas independentistas chilenas, al mando del general Bernardo O`Higgins, y a las tropas realistas españolas, a cargo de Mariano Osorio, a la cabeza de 5 mil soldados, se dirigía a Santiago. Bernardo O'Higgins y José Miguel Carrera lograron reunir más de tres mil hombres, pero no soldados. Con la mitad de ellos O'Higgins se encerró en la plaza de Rancagua.
10 de Octubre de 1814:
Combate de Los Papeles: Enfrentó la retaguardia patriota, que resguardaba en esos momentos a los últimos grupos de civiles que emprendieron el cruce de la cordillera con destino a Mendoza, de la persecución y seguro apresamiento por parte de la caballería realista enviada en su persecución.
Enero 1817:
Manuel Rodríguez sorprende a los españoles que resguardan Melipilla y se apodera de la ciudad, confiscando para la causa patriota, los fondos acumulados por los recaudadores de Marcó del Pont y llevándose las armas de la guarnición.
12 de Enero 1817:
Salas y Silva se apoderan de San Fernando: ciento cincuenta de sus hombres al mando de Francisco Salas asaltan de noche a San Fernando. La guarnición realista resiste el ataque; entonces Inmediatamente los montoneros pusieron en movimiento unas rastras de cueros con piedras que producían un ruido idéntico al rodado de cañones. Los realistas, creyéndose atacados por una gran fuerza militar, huyeron. Así, Salas se apoderó de San Fernando.

22 de Enero 1817:

Primer enfrentamiento de una avanzada patriota con un destacamento de los Talaveras.

25 de Enero 1817:

Un destacamento de Las Heras, se enfrenta a una unidad realista.
04 de Febrero 1817:
Combate de Achupallas: El mayor Arcos, desprendiéndose de la división de So­ler, al frente de otros 200 hombres, dispersaba a la guarnición de Las Achupallas y le hacía 3 prisioneros.
04 de Febrero 1817:
Combate de Guardia Vieja: Al ponerse el sol, el mayor Enrique Martínez atacó el puesto español de Guardia Vieja con 150 fusileros y 30 jinetes. El combate duró una hora y media a sable y bayoneta, los españoles en número de 94, tuvieron 25 muertos y 43 prisioneros.

04 de Febrero 1817:

Combate de Cumpeo: Freire ataca a un destacamento realista de 100 soldados, dirigidos por el coronel Morgado, causándole la baja de 18 hombres y la captura de otros 20.
07 de Febrero 1817:
Combate de Las Coimas: Enfrentamiento entre el realista Atero y un destacamento de Necochea.
12 de Febrero 1817:
Batalla de Chacabuco: Se llevo a cabo en la hacienda Chacabuco, el 12 de febrero de 1817, donde combatieron el Ejército de los Andes y el Ejército Realista. Finalizo con la victoria patriota y que trajo como consecuencia la recuperación de Chile a manos patriotas, de ese modo finalizo la reconquista y comenzó la Patria Nueva. El capitán San Bruno, odiado jefe de los talaveras, es capturado y fusilado menos de 24 horas después.
12 de Febrero 1817:
Liberación del Norte: Las tropas del comandante Juan Manuel Cabot, toman Copiapo, La Serena y Coquimbo.
26 de Febrero 1817:
Captura del bergantín español "Aguila": Primer barco de nuestra Escuadra. Los patriotas apresaron en Valparaíso al bergantín de comercio español "Aguila", mediante el ardid de mantener izada la bandera española en tierra; fue armado y puesto al mando del oficial irlandés de Artillería, don Raimundo Morris.
04 de Abril 1817:
Combate de Curapalihue: En este combate se enfrentaron las tropas de Juan Gregorio Las Heras por el lado de los patriotas y las tropas de Juan José Campillo por lado de los realistas. El combate finalizo con la victoria patriota.
11 de Mayo 1817:
Asalto y Toma de Nacimiento: Mientras se practicaban los reconocimientos de las fortificaciones de Talcahuano y se acumulaban los elementos para el asalto, O'Higgins dispuso la ocupación del territorio español que quedaba al sur del Biobío y de la plaza de Arauco, a fin de privar de recursos a Ordóñez. El capitán José Cienfuegos, partiendo de la villa de Los Angeles, se dirigió a la plaza de Nacimiento, que era la fortaleza más inexpugnable. El asalto empezó el 12 de mayo, y la plaza tuvo 20 bajas entre muertos y heridos. La guarnición de Nacimiento se retiró a Arauco. San Pedro se rindió sin disparar un tiro.
27 de Mayo 1817:
Toma de la plaza fortificada de Arauco: Los patriotas comandados por Ramón Freire se toman la plaza fortificada de Arauco, en Talcahuano, la cual era el centro de abastecimiento de los realistas ubicados en la zona.
01 de Junio 1817:
Combate del Cerro Gavilán: Se desarrollo en las cercanías de concepción. Por lado de los patriotas liberaban los generales Bernardo O’Higgins y Juan Gregorio Las Heras y por lado de los realistas el comandante José Ordóñez. La batalla finalizo con la victoria patriota.
23 de Julio 1817:
Asalto a Talcahuano: El coronel José M. Ordoñez rechaza el intento del general Juan Gregorio Las Heras.
10 de Septiembre 1817:
Combate de Cerro Manzano: En el cerro Manzano (al Sudeste de Talcahuano), en dos acciones sorpresivas el cuarto escuadrón de granaderos a caballo, aniquiló a una fracción enemiga de 30 hombres, de los cuales se salvó sólo uno, y a otra de 25 hombres le causó 4 muertos y le tomó 3 prisioneros.
06 de Diciembre 1817:
Sitio y Asalto de Talcahuano: Tuvo como lugar Talcahuano. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Bernardo O’Higgins contra las realistas alo mando de José Ordóñez. La batalla finalizo con la victoria realista.
15 de Marzo 1818:
Combate de Quechereguas: Tuvo como lugar Quechereguas, cerca de Molina. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Ramón Freire contra las realistas al mando de Joaquín Primo de Rivera. El combate termino con la victoria Realista.
19 de Marzo 1818:
Sorpresa de Cancha Rayada: Batalla que pone en peligro la Independencia de Chile. La fuerzas patriotas acampaban en el llano de Cancha Rayada, al norte de Talca, cuando en la noche cayeron sobre ellas los realistas y derrotaron a las fuerzas del general San Martín.
05 de Abril 1818:
Batalla de Maipú. Diecisiete días después de Cancha Rayada, en los llanos del río Maipo, el ejército dirigido por San Martín venció completamente a los realistas. Desde ese momento, la Independencia de Chile quedó definitivamente consolidada. O’Higgins había salido de la capital esa misma mañana y se dirigía hacia Maipú con unos mil milicianos alcanzando a participar en el desenlace final de la batalla. Al llegar al campo de batalla O'Higgins se abraza con San Martín dialogando lo siguiente. "O'Higgins: ¡Gloria al salvador de Chile! - San Martín: General, Chile no olvidará jamás al ilustre inválido que se presenta herido al campo de batalla".
27 de Abril 1818:
Combate Naval de Valparaíso: Entre la fragata chilena "Lautaro" y la fragata española "Esmeralda". En esta acción, por una desinteligencia, muere el comandante contratado por el gobierno de Chile, Jorge O'Brien.
28 de Octubre 1818:
Captura de la fragata "María Isabel": En este combate se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Manuel Blanco Encalada contra las realistas, en Talcahuano. La batalla finalizo con la victoria patriota.
14 de Noviembre 1818:
Captura de cinco transportes: El comandante Blanco Encalada captura cinco transportes españoles en Talcahuano.
21 de Febrero 1819:
Inicio de la Guerra a Muerte, Combate de Santa Juana: El montonero realista Vicente Benavides derrota al teniente José A. Rivero. Se inicia la "Guerra a Muerte".
28 de Febrero 1819:
La fragata O´Higgins ataca El Callao: La escuadra chilena al mando de Cochrane, ataca el puerto de El Callao, en Perú.
01 de Marzo 1819:
Asalto de Los Angeles: Intentado por las fuerzas realistas quienes tenían una fuerza auxiliar de 3.000 indios que tomaron parte en este sitio. En la ciudad sólo había el batallón patriota "Coquimbo" sin armamentos suficientes para su defensa. Los sitiadores habían tomado el fuerte, si no hubiese sido por la oportuna intervención del mariscal Andrés Alcázar y Zapata, quien llegó con su caballería. Entró en Los Angeles el 10 de marzo, después de batir a los sitiadores, salvando la situación que ya era desesperada.
11 de Abril 1819:
Sublevación de los Prieto: Entre las turbulencias que logró provocar la propaganda carrerina, la más importante es, sin disputa, la de los hermanos Prieto, en las cordilleras de Talca.
01 de Mayo 1819:
Combate de Curalí: Fue una batalla ocurrida en el marco de la llamada Guerra a Muerte, entre tropas realistas españolas dirigidas por Vicente Benavides y patriotas del gobierno provisorio chileno liderados por el coronel Ramón Freire, desarrollado en los campos de Curalí, cerca de la ribera norte del río Biobío. Fue una sorpresa y derrota total de Benavides, quien terminó escapando hacia La Araucanía.
Marzo a Septiembre 1819:
Diversas acciones de la Guerra a Muerte: Armadas todas aquellas partidas, que rara vez pasaban de un centenar de hombres por cada parte, comenzaron a salir las urnas contra las otras y con tal brío y rapidez que durante los seis primeros meses de la guerra (de marzo a septiembre de 1819) todo el sur de Chile no parecía sino un vasto palenque de matanzas.
19 de Septiembre 1819:
Combate de Quilmo: Al saber Victoriano en Tucapel la inesperada pérdida de Chillan, sin vacilar un instante, corrió al encuentro del enemigo, no tomando acuerdo de su número y seguido del puñado de hombres que tenía a sus órdenes.
01 de Noviembre 1819:
Combate de Tritalco: Irritado Benavides por el descalabro de Quilmo, inexplicable después de las ventajas conseguidas, y por el número de muertos de los suyos, resolvió vengar la derrota de Elizondo enviando a Bocardo con sus indios para atacar a Victoriano en Chillan y quitarle de nuevo a que el pueblo y su comarca.
20 de Noviembre 1819:
Combate de Hualqui: Tuvo como lugar Hualqui, cerca de Concepción. Por lado de los patriotas estaban las tropas de José Tomás Huerta y por lado de los realistas Vicente Benavides. La batalla finalizo con la victoria patriota.
06 de Diciembre 1819:
Combate de Pileo: Fue una batalla ocurrida en el marco de la llamada Guerra a Muerte, entre realistas españoles y patriotas chilenos desarrollado en la subdelegación de Pileo.
09 de Diciembre 1819:
Asalto de Yumbel: Realizado contra la ciudad de Yumbel al atacar las tropas realistas la plaza defendida por los patriotas al mando de Quintana, quién disponía de 100 hombres y los realistas de 658. Hay noticias de que en realidad las fuerzas realistas eran de 300 fusileros y 700 indios. El ataque duró 5 horas y terminó al aparecer una partida de 200 hombres en el cerro de la Parra. En este encuentro estaba Manuel Bulnes, de 19 años de edad, que entonces tenía el grado de subteniente de Cazadores.
10 de Diciembre 1819:
Combate de El Avellano: Fue una batalla ocurrida en el marco de la llamada Guerra a Muerte, entre montoneras realistas españolas y patriotas chilenos comandadas por Pedro Andrés Alcázar en las cercanías de Los Ángeles.
29 de Diciembre 1819:
Combate de San Pedro: Tuvo como lugar el fuerte de San Pedro en las cercanías de Concepción. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Pedro Agustín Elizondo contra las realistas al mando de Vicente Benavides. La batalla finalizo con la victoria patriota.
05 de Enero 1820:
Ataque a San Carlos: Los Pincheira ignorantes de que hubiesen llegado tropas de Santiago, descendieron en la noche del 4 enero de su malal del Roble huacho, y atacaron de sorpresa la indefensa villa de San Carlos.
30 de Enero 1820:
Acciones de Palpal y Coihueco: La matanza de Monte Blanco no escarmentó a los salteadores de la montaña. Era preciso que el infatigable Victoriano, seguido como siempre de la muerte, penetrase de nuevo en sus guaridas y les persiguiese hasta en sus últimos asilos.
02 de Febrero 1820:
Toma de los fuertes de la Aguada, San Carlos y el Castillo: Lord Cochrane aparece en Corral con tres buques y se toma los fuertes de la Aguada, San Carlos y el Castillo y, después, toma a Valdivia.
03 de Febrero 1820:
Asalto y Toma de Valdivia: En este combate se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Thomas Cochrane contra las realistas al mando de Manuelo Montoya. La batalla finalizo con la victoria patriota lo que conllevo a la recuperación de Valdivia.
18 de Febrero 1820:
Combate de Agüi: El combate de Agüi fue un enfrentamiento bélico, el cual se desarrollo entre fuerzas realistas y patriotas en la isla de Chiloé. En el los patriotas dispusieron sus fuerzas para derrotar a los Españoles que dominaban la isla de Chiloé, ya que su permanencia en la isla fue considerada por los patriotas una amenaza para la independencia de Chile.
06 de Marzo 1820:
Combate de El Toro: Tuvo como lugar la hacienda El Toro, en el se enfrentaron las tropas patriotas contra las tropas realistas al mando de Gaspar Fernández de Bobadilla. La batalla finalizo con la victoria patriota.
22 de Junio 1820:
2do Combate de Quilmo: El 22 junio se presentó en la colina de Quilmo, en el mismo sitio en que Victoriano había escarmentado a Elizondo un año atrás, el jefe de partidas Gervasio Alarcón.
20 de Agosto 1820:
Expedición Libertadora del Perú. Zarpa de Valparaíso la escuadra con 17 transportes, 9 buques de guerra y 11 lanchas cañoneras, comandados por el vicealmirante británico Lord Thomas Cochrane. Una salva de 21 cañonazos anunció la partida de la Escuadra y el director supremo Bernardo O’Higgins Riquelme, la despidió con estas palabras: “De estas cuatro tablas dependen los destinos de América”.
23 de Septiembre 1820:
Combate de El Pangal: Desarrollado en el lugar llamado Pangal, en la rivera norte del Laja, los contendientes eran las tropas de Benavides comandadas por su lugarteniente Juan Manuel Picó con un total aproximado de 1.700 hombres, y las fuerzas patriotas en número de 500 soldados al mando de Benjamín Viel Gomets y Carlos María O´Carroll.
25 de Septiembre 1820:
Combate de Tarpellanca: Tuvo lugar en Tarpellanca, en el río Laja. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Pedro Andrés Alcánzar contra las tropas realistas al mando de Vicente Benavides. La batalla finalizo con la victoria realista.
05 de Noviembre 1820:
Captura de la corbeta española "Esmeralda": Recién pasada la medianoche, Lord Cochrane se apoderó de la corbeta española "Esmeralda", en la rada de El Callao. El buque tenía 44 cañones y su conquista fue una hazaña de valor y astucia.
25 de Noviembre 1820:
Combate de Las Vegas de Talcahuano: Tuvo como lugar en las cercanías de Talcahuano. En el se enfrentaron las tropas patriotas al mando de Ramón Freire contra las tropas realistas al mando de Vicente Benavides. Finalizo con la victoria patriota.
27 de Noviembre 1820:
Combate de la Alameda de Concepción: El combate de la Alameda de Concepción fue una batalla entre patriotas y realistas. Ramón Freire se dirigió a la ciudad de concepción donde Benavides presentó batalla en el lugar. La batalla finalizo con la victoria Patriota.
27 de Noviembre 1820:
Combate de Cocharcas: La vanguardia de la Segunda División derrota a las fuerzas del guerrillero José María Zapata.
12 de Enero 1821:
Combate de Lumaco: Los indios de Venancio Coihuepán y las tropas del capitán Salazar derrotan a las montoneras realistas de Carrero y Catrileo.
10 de Octubre 1821:
Combate Vegas de Saldías: Las fuerzas revolucionarias del realista Vicente Benavides Llanos, se enfrentaron al Ejército de Chile al mando de José Joaquín Prieto Vial y comandado por Manuel Bulnes Prieto en la Batalla de Vegas de Saldías en el contexto de la Guerra a Muerte, batalla que finalizó al día siguiente con el triunfo patriota. Sin embargo, esta guerra continuó por dos años más, dirigida por Juan Manuel Picó.

15 de Noviembre 1821:

Motín de Osorno: Unos cuantos sargentos las sublevaron. El mayor Letelíer. los capitanes Baldovinos y Cartes y los tenientes Anguita. Vial, Cavallo y Alfonso que intentaron sofocar el motin, fueron muertos por los soldados.

26 de Noviembre 1821:

Combate de Hualehuaico: Las tropas de Manuel Bulnes vencen a un cuerpo realista apoyado por indigenas.

27 de Noviembre 1821:

Combate de Niblinto: Las tropas de Manuel Bulnes vencen a montoneras realistas apoyadas por indigenas.
12 de Diciembre 1821:
José Joaquín Prieto recupera Chillan: Con la formación de un nuevo regimiento y la dirección de Prieto se logra controlar el sur de Chile.
26 de Diciembre 1821:
Combate de La Imperial: No han quedado demasiados detalles de aquel terrible hecho de armas, lo que demuestra con evidencias que fue un desastre para los patriotas, dirigidos por el capitán Bulnes.
Diciembre 1821:

Nueva fisonomía de la lucha en Arauco: Campañas de Prieto, de Ruines y de Lantaño

09 de Abril 1822:
Combate de Pile: Las tropas de Clemente Lantaño y de Manuel Bulnes vencen a grupos indigenas.
Mayo 1822:

La expedición de Beauchef a Boroa: La guerra del sur hacia 1822 y 1823.

08 de Octubre 1822:
Asedio de Arauco: A las cuatro de la tarde del 8 octubre el recinto de Arauco estaba completamente rodeado por tres divisiones de indios que mandaba Ferrebú en persona.
23 de Octubre 1822:
Acción de Pitrufquén: El teniente coronel Beauchef derrota al guerrillero Palacios.
14 de Diciembre 1822:
Acción de Río Diguillín: El teniente coronel Torres derrota a las montoneras de Bocardo y Zapata.
26 de Marzo 1823:
Acción de Linares: Los Pincheira dan muerte al gobernador Sotomayor en dicha población.
21 de Febrero 1824:
Acción de Tucapel: Las bandas del cacique Venancio Coihuipán dispersan a las fuerzas que en los campos de Tucapel había reunido el cura Ferrebú.
24 de Marzo 1824:
Fracaso del canal de Chacao: La expedición del General Ramón Freire Serrano entra al canal de Chacao en su intento para la liberación de Chiloé. La expedición fracasa.
10 de Abril 1824:
Batalla de Mocopulli: En esta batalla se enfrentaron las tropas patriotas al mando del comandante Jorge Beauchef contra las tropas realistas al mando de José Rodríguez Ballesteros. La batalla finalizo con la victoria realista.
11 de Abril 1824:
Combate de Albarrada: El sargento mayor Gaspar derrota al cura Ferrebú.
20 de Abril 1824:
Acción de Colcura: Una partida proveniente del fuerte de Colcura cae sobre el campamento de una columna realista enviada por el cura Ferrebú y la dispersa.
30 de Agosto 1824:
Acción de Laraquete: Una partida proveniente del fuerte de Colcura, mandada por el comandante Gaspar, cae sobre el rancho donde dormía el cura Ferrebú y lo captura.
28 de Octubre 1824:
Acción de Coronado: Una columna patriota mandada por Lorenzo Coronado y Angel Salazar, cae sobre el rancho donde dormía el comandante Pico.
02 de Septiembre 1824:
Fusilamiento de Ferrebú y muerte de Pico: En la guerra de la frontera del Maule.
30 de Septiembre 1825:
Acción en el río Bureo: Un destacamento enviado desde Yumbel por el coronel Barnechea ataca a la montonera del comandante Senosiaín, causandole numerosas bajas.
27 de Noviembre 1825:
Sorpresa de Parral: Los Pincheira y Senosiaín caen con su montonera unida sobre el pueblo de Parral, donde había un destacamento de soldados bajo el mando del capitán Agustín Casanueva. Dicho destacamento pudo rechazar ese ataque.
27 de Noviembre 1825:
Acción de Longaví: Un destacamento patriota de dragonesal mando del comandante Manuel Jordán, trata de cerrar el paso a la montonera realista que se retiraba de Parral; perecieron el comandante jordano y 51 de sus hombres.
11 de Enero 1826:
Manuel Blanco Encalada en Ancud: Durante la Expedición de Liberación de Chiloé, aún en posesión de la corona española, el Vicealmirante Manuel Blanco Encalada entra al puerto de San Carlos de Ancud, bajo los fuegos de las baterías del Coronel español Antonio de Quintanilla.
13 de Enero 1826:
Batalla de Pudeto: Tuvo logar en Chiloé. En el se enfrentaron las tropas patriotas contra las realistas. El fin de este combate era la expulsión de los Españoles de Chiloé. La batalla finalizo con la victoria patriota.
14 de Enero 1826:
Combate de Poquillihue: Las fuerzas chilenas de Freire obligan a las realistas de Quintanilla a abandonar el fuerte de Poquillihue.
14 de Enero 1826:
Batalla de Bellavista: El Combate tuvo como lugar Chiloé. Se llevo a cabo entre el general Ramón Freire y los españoles. Su propósito fue el de incorporar la provincia de Chiloé al territorio Chileno. La batalla finalizo con la victoria patriota.
19 de Enero 1826:
Liberación de Chiloé: Con el propósito de incorporar la provincia de Chiloé al territorio de la República de Chile. Triunfan los chilenos sobre los españoles, logrando además, abrir el paso para la toma de la ciudad de San Carlos de Ancud. Las tropas chilenas encuentran dura oposición de los lugareños que son, en su mayoría absoluta, partidarios de la monarquía.
25 de Febrero 1826:
Acción de Neuqén: un destacamento mandado por el coronel Barnecheacae sobre el campamento de montoneros e indígenas de Senosiaín y de uno de los hermanos Pincheira, dispersando los y rescatando a numerosas mujeres cautivas.
31 de Agosto 1826:
Acción de Antuco: una montonera realista caer sobre el villorrio de Antuco y ejecuta al oficial Herquíñigo y a su guarnición de siete hombres.
Enero 1827:
Operaciones militares contra los Pincheira y las bandas de Senosiaín.
25 de Enero 1827:
Levantamiento de Enrique Campino: El coronel Enrique Campino ingresó a caballo al Congreso Nacional con intenciones de dar un Golpe Militar.
21 de Julio 1827:
Motín de Talca: Un escuadrón de Cazadores se sublevo, comandado por algunos cabos y sargentos.
31 de Diciembre 1827:
Acciones en San Fernando: El gobernador Silva apresó a algunos individuos afectos a la asamblea. El comandante Francisco Porras se colocó al frente de los partidarios del bando vejado, organizó algunas compañías de milicianos y aventureros y se dirigió a San Fernando.
Enero 1828:
Campaña contra Los Pincheira de 1828: El ministro de la Guerra repitió en el verano de 1828 la expedición que había realizado el año anterior contra los Pincheira, con menos fuerzas. Las pequeñas columnas comandadas por Viel y Bulnes no lograron dar alcance a los bandidos.
18 de Julio 1828:
Sublevación de Colchagua: Revolución federalista-o'higginista de Urriola. Los estanqueros y los pelucones salvan el gobierno.
25 de Agosto 1828:
Motín del Maule: Manuel Bulnes al frente de la guarnición de Parral, somete a los insurgentes al mando de Gregorio Murillo.
06 de Junio 1829:
Motín Militar: Un estrafalario motín, que debe considerarse más como incidente del proceso electoral que como pronunciamiento militar, acabó de exacerbar las pasiones, ya muy enconadas.
06 de Diciembre 1829:
Toma de Valparaíso: Portales y Rodríguez Aldea descubrieron e! plan de Novoa, y a fin de desbaratarlo, resolvieron impedir la salida de! "Aquiles", apoderándose de Valparaíso.
14 de Diciembre 1829:
Batalla de Ochagavía. La Acción de Ochagavía fue el primer choque armado producido entre tropas gubernamentales del bando pipiolo o liberal, y las del bando pelucón o conservador, acaecida durante la Guerra Civil de 1829-1830.
15 de Diciembre 1829:
La Revolución de Coquimbo: Pedro Uriarte y algunos hacendados se alzan contra el gobierno.
03 de Enero 1830:
Contrarrevolución de Sur: El coronel Cruz recupera Concepción.
02 de Marzo 1830:
Toma de Concepción: Viel se apodera de Concepción y pone sitio a Chillan y exige la rendición de Cruz.
17 de Abril 1830:
Batalla de Lircay. Este combate tuvo lugar a orillas del río Lircay, en el marco de la Guerra Civil chilena comenzada un año antes con la denominada revolución de 1829. Dicha revolución corresponde al enfrentamiento definitivo entre los estanqueros, o’higginistas y pelucones ("fuerzas conservadoras"), contra los pipiolos (liberales). Esta etapa, y con ello la denominada "anarquía chilena" (1823-1830), finalizó con la batalla de Lircay.
14 de Enero 1832:
Combate de Coyahuelo-Lagunas de Pulán: Las tropas de Manuel Bulnes caen sobre la montonera de los hermanos Pincheira, derrotando las completamente.
21 de Agosto 1836:
Captura de Buques de la Confederación: El ministro Portales envía a Victorino Garrido a tomar por asalto durante la noche el puerto de el Callao, logrando capturar tres de los seis barcos peruanos. Los botes del bergatín "Aquiles" capturaron la barca "Santa Cruz", el bergatín "Arequipeño" y la goleta "Peruviana" en el puerto peruano de El Callao, movimientos previos a la guerra contra la Confederación peruanaboliviana..Garrido se entrevista con Santa Cruz, acordando la devolución de las naves peruanas después de firmado un tratado de paz.
29 de Agosto 1836:
Sublevación de Freire: Las fuerzas chilenas lograron controlar a las sublevadas en el sur del territorio nacional, comandadas por el general Ramón Freire Serrano, quien tenía intenciones de derrocar el gobierno del presidente José Joaquín Prieto Vial y reconstruir el virreinato del Perú.
03 de Junio 1837:
Motín de Quillota: Es apresado por el Regimiento Maipo, el ministro Diego Portales, mientras pasaba revista a las tropas acantonadas en Quillota. Este hecho es conocido por la historia como el "Motín de Quillota".
06 de Junio 1837:
Combate de Cerro Barón y asesinato del Ministro Diego Portales: El Ministro se dirigió a Quillota, para revistar un cuerpo de ejército acantonado allí. De un instante a otro la oficialidad lo apresó y se amotinó contra el estadista. El coronel José Antonio Vidaurre dirigió el movimiento. Los amotinados se trasladaron a Valparaíso y se llevaron a Portales en un pequeño carruaje. En la madrugada del 6 de junio tras un combate en el cerro Barón, se escucharon los primeros disparos. El oficial Santiago Florín, que custodiaba al Ministro, le ordenó a un subordinado: ¡Baje el Ministro!. Este se arrodilló y de inmediato disparó sobre él.

11 de Septiembre 1837:

Inicio de la primera expedición; Durante la guerra contra la Confederación peruana-boliviana, zarpó la Escuadra Nacional comandada por el almirante Manuel Blanco Encalada.

29 de Septiembre 1837:

Desembarco en Quilca: Se inicia la marcha hacia Arequipa.
07 de Agosto 1838:
Segunda expedición chilena: Al mando del general Manuel Bulnes Prieto, las fuerzas chilenas se apoderaron del puerto de El Callao, durante la guerra contra la Confederación peruana - boliviana. Bulnes impuso a Perú una indemnización de 20 millones de pesos de la época, pero como los peruanos no accedieron a la petición, el general se apoderó de Lima, luego de una sangrienta batalla.
17 de Agosto 1838:
Captura de la corbeta "Socabaya": En el puerto peruano de El Callao, por las naves de la escuadra del capitán de navío Carlos García del Postigo Bulnes, durante la guerra contra la Confederación peruanaboliviana.
21 de Agosto 1838:
Combate de Portada de Guías. Luego de desembarcar la escuadra chilena, a cargo del Almirante Simpson, se llevó a cabo el combate de Portadas de Guía, adueñándose el ejército chileno de la ciudad de Lima el 21 de agosto de 1838. El General Bulnes cita un cabildo abierto, el que proclama un gobierno provisional en Perú a cargo de Agustín de Gamarra.
18 de Septiembre 1838:
Combate de Matucana. Las tropas chilenas avanzan hacia el interior del Perú, enfrentando y venciendo a las tropas de Santa Cruz.
17 de Diciembre 1838:
Combate del puente de Llac Lla: El ejercito confederado ocupó el pueblo de Recuay y a la vez el “chilenoperuano” estaba en Huaraz de donde salió mas al interior llevando centenares de enfermos, en busca de climas benignos. Al llegar al puente LlacLla fueron alcanzados por las tropas Confederadas y mientras Torraco apresuraba el paso de los enfermos, el soldado Lorenzo Colipí con 10 compañeros del batallón Carampangue, lucharon sin descanso permitiendo la evacuación desde Chiquian.
06 de Enero 1839:
Combate de Buin: En la Guerra entre la Confederación Perú-Boliviana y el Ejército Restaurador Chile-Perú. Hacia el norte de la ciudad de Lima, las tropas de la confederación se baten en un combate con el ejército chileno, desarrollándose la batalla de Huaras.
12 de Enero 1839:
Combate Naval de Casma: Ambas armadas se enfrentaron en el Combate Naval de Casma, convirtiéndose en el último con buques a velas. El triunfo chileno nos permitió el dominio del mar.
20 de Enero 1839:
Batalla de Yungay. A orillas del río Santa ocurre la decisiva en la Guerra contra la Guerra entre la Confederación Perú-Boliviana y el Ejército Restaurador Chile-Perú. El presidente Santa Cruz había fortificado el fuerte de Yungay y el cerro Pan de Azúcar, el cual fue asaltado por la infantería chilena, desatándose la Batalla de Yungay. Este día, el 20 de enero de 1839, las tropas chilenas vencen a las de la Confederación, declarándose disuelta. Las tropas del General Bulnes llegaron el 18 de febrero a Lima, dando fin a la guerra.
20 de Abril 1851:
Motín de Urriola: Un motín cívico militar estalla en las calles de Santiago de Chile, por oposición al gobierno de Bulnes y a la candidatura presidencial de Manuel Montt. Urriola y cinco mil revolucionarios se tomaron las principales calles de Santiago, mientras que el gobierno preparó una contraofensiva desde la Alameda y el Cerro Santa Lucía. El combate duró cerca de 5 horas, tras las cuales fue abatido Urriola y hubo más de 200 muertos.
25 de Septiembre 1851:
Operaciones sobre Huasco, Vallenar e Illapel: Con erogaciones forzosas de los vecinos y prorratas de caballos y elementos de transporte, logró Vicuña Mackenna reunir una partida o montonera, que llegó a contar con 150 fusileros y 172 jinetes, que, en su inconsciencia militar, creía capaces de arrollar las fuerzas que el gobierno le opusiera.
28 de Septiembre 1851:
Revolución de La Serena y Captura del "Fire Flay": La necesidad de procurarse armas y municiones, para organizar un ejército eficiente de unas dos mil plazas, se imponía al más elemental sentido común. Carrera concibió el proyecto, de dudoso éxito inmediato, de adquirirlas en Lima. Con este objeto, se apoderó a viva fuerza del pequeño vapor "Fire Flay", de propiedad de Carlos Lambert, que navegaba con bandera inglesa, sin prever las complicaciones que el acto iba a ocasionar.
14 de Octubre 1851:
Batalla de Petorca: Mientras el ejército de Vicuña Mackenna operaba en Illapel. Carrera y Arteaga, informados de que Santiago estaba desguarnecido, después del envío de las tropas al sur, resolvieron operar sobre Aconcagua, reforzarse con los cívicos de San Felipe y proseguir a la capital.
14 de Octubre 1851:
Combate de Peñuelas: En el norte, la revolución seguía prendida. No obstante, la derrota de los liberales en Petorca los hace mantenerse en la provincia de Coquimbo, al tiempo que algunos empresarios mineros proclives al gobierno deciden crear un ejército contrarrevolucionario al mando de Ignacio José Prieto, quien logra derrotarlos en Peñuelas el 14 de octubre.
28 de Octubre 1851:
Sublevaciones de Aconcagua y Valparaíso: Los caudillos de La Serena exigían a los revolucionarios de Aconcagua, Santiago y Valparaiso, que aliviaran la presión de las fuerzas que los amagaban, intentando sublevaciones en el centro mismo de los recursos del gobierno.
07 de Noviembre 1851:
Sitio de La Serena: En el momento de iniciarse el sitio, La Serena contaba con unos 600 soldados: 300 cívicos, 200 mineros, que se organizaron-en un batallón intitulado "Defensores de La Serena", y una brigada de artillería.
19 de Noviembre 1851:
Combate de Monte de Urra: El 13 de septiembre, cinco días antes de la asunción de Montt, se declaró una asonada al mando del ex candidato Cruz, quien no aceptando la derrota electoral, y temiendo que las familias conservadoras de Concepción perdieran protagonismo en la dirección del país, consiguió armar un grupo de cinco mil hombres, entre partidarios y mapuches del cacique Colipí.
24 de Noviembre 1851:
Motín de Cambiaso: Durante la noche estalló en la ciudad de Punta Arenas, XII Región, el "Motín de Cambiaso", como consecuencia de la Guerra Civil de ese año. Luego de una gran masacre, su líder el teniente Miguel José Cambiaso Tapia, organizó su huida, pero fue detenido, condenado a muerte y ajusticiado el 4 de abril de 1852.
08 de Diciembre 1851:
Sublevación de Copiapó: La provincia de Atacama había sido objeto de un largo y activo trabajo de zapa contra el orden y las autoridades, realizado por una verdadera legión de agentes enviados desde el vigoroso foco pipiolo de La Serena.
08 de Diciembre 1851:
Batalla de Loncomilla: La batalla se desarrolló en el llano cercano al río del mismo nombre, cerca de donde después se fundaría San Javier, en la provincia de Linares. El bando leal al gobierno fue dirigido por Manuel Bulnes, mientras que el bando opositor estuvo a cargo de José María de la Cruz.
08 de Enero 1852:
Acción de Linderos de Ramadilla: El teniente coronel Victorino Garrido derrota a los revolucionarios mandados por Bernardo Barahona y ocupa Copiapó el 9 de enero, poniendo fin a las acciones armadas de la revolución.
06 de Enero 1859:
Toma de Copiapó: El militar retirado Pedro Pablo Zapata se presentó, seguido de 20 hombres, a las puertas del cuartel de policía. Urrutia, quien estaba a cargo de él, lo entregó, después de un simulacro de defensa.
19 de Enero 1859:
Toma de Talca: A las doce del día, el teniente retirado Samuel Vargas y el ex sargento Valenzuela, encargados de capturar al comandante de cívicos, sargento mayor José Antonio Bustamante, se acercaron a él, en los momentos en que se dirigía al cuartel.
02 de Febrero 1859:
Asonada de Concepción: El teniente coronel Basilio Urrutia derrota a los montoneros al mando de don Juan José Alemparte.
28 de Febrero 1859:
Sitio y Toma de San Felipe: Las tropas gobiernistas, al mando del teniente coronel Tristán Valdés asaltan y derrotan a los revolucionarios que mantenían en su poder la ciudad de este el 12 de febrero.
28 de Febrero 1859:
Asonada de Valparaíso: El general Juan Vidaurre-Leal somete a los insurrectos que intentaron asaltar la intendencia y los almacenes de la aduana.
14 de Marzo 1859:
Batalla de Los Loros: En el contexto de la Guerra Civil del '59. En este episodio, las fuerzas revolucionarias de Pedro León Gallo vencen a las del gobierno.
12 de Abril 1859:
Combate de Maipón: Nicolás Tirapegui logró sublevar la guarnición de la plaza de Arauco; y con las armas que se procuró en ella, organizo una nueva montonera de 400 hombres, y se reunió con Videla en Santa Juana.
20 de Abril 1859:
Combate de Pichidegua: Las montoneras de Colchagua, Talca y Maule cesaron de constituir un peligro para las ciudades bien guarnecidas, desde que el ministro Rafael Sotomayor organizó fuertes divisiones de milicias cívicas
29 de Abril 1859:
Batalla de Cerro Grande: A 5 Kilómetros al sur de la Serena, entre las fuerzas del Gobierno y las revolucionarías de Gallo, siendo éstas derrotadas.
12 de Mayo 1859:
Recuperación de Copiapó: el teniente coronel José Antonio Villagrán derrota en las últimas fuerzas revolucionarias que mantenían la ciudad en su poder desde el 4 de enero.
04 de Enero 1862:
Captura del "Rey de la Araucanía": El Comandante Cornelio Saavedra capturó a Antoine de Tounens, el "Rey de la Araucanía". A fines de 1861, Orelie Antoine de Tounens, de nacionalidad francesa, se asentó en la Araucanía y se autoproclamó rey de la zona y de la Patagonia. Aprovechando la escasa presencia de chilenos en la zona, que abarcaba entre los ríos Biobío y Toltén, el aventurero logró convencer a algunos caciques que aún resistían la autoridad chilena, y organizó una especie de reino en la zona.

26 de Noviembre 1865:

Combate Naval de Papudo. Durante este episodio de la "guerra con España", el almirante Juan Williams Rebolledo, al mando de la Esmeralda, se apodera de la corbeta española Covadonga, frente a la rada de Valparaíso. Juan Williams Rebolledo, logró capturar a la goleta española Covadonga. Ante esta derrota, el almirante español José Manuel Pareja, líder de las fuerzas hispanas, se suicidó. Fue reemplazado por Casto Méndez Núñez.

07 de Febrero 1866:

Combate Naval de Abtao. Sostenido entre la Escuadra aliada chileno-peruana y la Escuadra Española en el canal de Chayahué, provincia de Chiloé.
02 de Marzo 1866:
Combate Naval de Huito: Los jefes peruanos temían que las fragatas lograran forzar la boca de la ensenada de Huito, y en este evento bastaban los cañones de la "Numancia" para destruir impunemente toda la escuadra aliada.

31 de Marzo 1866:

Bombardeo a Valparaíso. Fue un episodio de la Guerra Hispano-Sudamericana, durante el cual el puerto de Valparaiso fue bombardeado y parcialmente destruido por ordenes del almirante español Casto Méndez Núñez.

11 de Noviembre 1877:

Motín y Destrucción de Punta Arenas: Se ha atribuido a esta rivalidad influencia casi decisiva en el motín de los artilleros. Dublé Almeida murió en el convencimiento de que el padre Matulski fue su principal o uno de sus principales instigadores. Los cronistas, por su lado, dando de mano a esta imputación desmentida por el desarrollo y las finalidades del motín, creen que el fanatismo antirreligioso envolvió al gobernador "en vahos de infierno y olores a Lucifer".

14 de Febrero 1879:

Se inició la Guerra del Pacífico con la toma de Antofagasta -que en ese tiempo era una ciudad boliviana-, por el ejército chileno, se inició la Guerra del Pacífico (1879-1883). Este conflicto bélico, que enfrentó a Chile con Perú y Bolivia, se debió a problemas territoriales y al interés por controlar la producción del salitre -nitrato usado como fertilizante y para la fabricación de pólvora-, que era u muy buen negocio en esa época. Como Bolivia procurara apropiarse de las salitreras de Antofagasta, el Gobierno chileno ordena ocupar esa plaza. Las tropas chilenas ocupan Antofagasta: Desembarcan dos Compañías, 1 de Artillería y 1 de Artillería de marina (198 hombres) las que bajo el mando del Coronel Emilio Sotomayor y ocupan la ciudad. A partir de ese momento Antofagasta queda en poder de Chile.
16 de Febrero 1879:
La Corbeta O'Higgins ocupa Mejillones: Los buques Blanco Encalada y O'Higgins marcharon el primero a Tocopilla y Cobija en protección de los chilenos, y el segundo a Mejillones.
16 de Febrero 1879:
Ocupación de Caracoles. Un destacamento de 70 hombres de la Artillería de Marina, al mando del Capitán Francisco Carvallo, ocupa Caracoles.

20 de Marzo 1879:

Ocupación de Cobija: Las tropas chilenas toman Cobija, al mando de William Rebolledo. Los buques Blanco Encalada y O'Higgins marcharon el primero a Tocopilla y Cobija en protección de los chilenos.

21 de Marzo 1879:

Ocupación de Tocopilla: Las tropas chilenas toman control de Tocopilla. Ese día desembarca en Tocopilla la tripulación del Cochrane al mando de Enrique Simpson.

23 de Marzo 1879:

Combate de Calama Fue el primer hecho de armas de la Guerra del Pacífico. Tropas chilenas al mando del Comandante Eleuterio Ramírez se enfrentaron contra las fuerzas bolivianas comandadas por el Coronel Ladislao Cabrera, obteniendo el triunfo el Ejército chileno...Por lo anterior, se fijó este día como: "El Día de Calama". Las tropas chilenas sufren 12 bajas, 7 muertos y 5 heridos, los Bolivianos 52, 20 muertos y 32 prisioneros (entre estos últimos se encuentra un ciudadano chileno de apellido Alfaro).
25 de Marzo 1879:
Un destacamento chileno llega a Chiu Chiu.
05 de Abril 1879:
Bloqueo de Iquique: El Bloqueo al Puerto de Iquique marca la primera acción ofensiva de Chile sobre territorio peruano.

12 de Abril 1879:

Combate Naval de Chipana: Fue el primer enfrentamiento naval, entre la cañonera chilena "Magallanes" y la corbeta peruana "Unión" y la cañonera "Pilcomayo". Las naves peruanas a raíz del bloqueo y por presión popular, Prado les ordena salir como estén a practicar operaciones "inteligentes y de consecuencia" entre Antofagasta e Iquique.
18 de Abril 1879:
Bombardeo de Pisagua: Este acto más que servir para un objetivo táctico o importante, fue más que nada en represalia por el ataque a sus embarcaciones menores.
01 de Mayo 1879:
Combate de Mejillones: El Cochrane y la O’Higgins combaten con los defensores de tierra, 10 hombres bajo el mando del Teniente Coronel Graduado Luis Reina dos marinos chilenos resultan heridos por un accidente.

21 de Mayo 1879:

Combate Naval en la rada de Iquique. Mueren heroicamente el comandante de la Esmeralda, Arturo Prat, y gran parte de la tripulación. Luego de un épico combate el Huáscar hunde a la Esmeralda, mueren 146 marinos chilenos y otros 57 caen prisioneros, por el lado peruano muere un oficial y salen heridos 7 tripulantes.

21 de Mayo 1879:

Combate Naval de Punta Gruesa. En Punta Gruesa en tanto la habilidad del Comandante Condell y una buena cuota de suerte terminan con la Independencia encallada y perdida totalmente, mueren 3 chilenos y resultan heridos 6, por el lado peruano, mueren 5 y salen heridos 23 tripulantes.
26 de Mayo 1879:
Combate Naval de Antofagasta: Fue el primer bombardeo naval nocturno de la guerra. Este combate se dio durante la primera correría del blindado peruano Huáscar.
28 de Mayo 1879:
El Huáscar recaptura a la goleta "Coqueta": La nave había sido recientemente capturada por los chilenos, la embarcación marchaba rumbo a Antofagasta, son capturados tres marinos chilenos, la goleta es enviada a Arica, con tripulación de presa.
06 de Julio 1879:
La Unión en Tocopilla hunde a la barca "Matilde": Después es perseguida por el Blanco Encalada.
09 de Julio 1879:
Segundo Combate Naval frente a Iquique: No pudiendo encontrar al Abtao (que ya había solucionado sus problemas de maquinaria y cambiado su fondeadero por seguridad) intenta hundir al Matías Cousiño, pero los disparos dirigidos contra este transporte atrajeron a la cañonera "Magallanes", la que se midió valientemente contra el Huáscar a pesar de su inferioridad, la llegada del Blanco determinó que Grau emprendiera la huida. Resultan heridos 3 marinos chilenos.
18 de Julio 1879:
Incursiones del Huáscar: El Huáscar inicia una serie de incursiones contra puertos y caletas chilenos del norte (Chañaral, Carrizal, Pan de Azúcar y Huasco).
23 de Julio 1879:
El Huáscar y la Unión capturan al transporte Rimac: En el buque estaba el Regimiento Carabineros de Yungay que estaba embarcado en la nave chilena, constaba de 250 jinetes, armados y municionados; todos ellos pertenecientes a las mejores familias de Santiago.
28 de Agosto 1879:
Segundo Combate de Antofagasta: El Huáscar se acerco al puerto de Antofagasta con la intención de cortar el cable submarino para evitar la comunicación del centro de operaciones enemigas con el resto de Chile sin darse cuenta que el Abtao se encontraba entre los buques neutrales.
10 de Septiembre 1879:
Combate de Río Grande: Un destacamento del Regimiento de Caballería Chilenos "Cazadores" destroza una montonera boliviana en las cercanías de San Pedro de Atacama, muere una docena de bolivianos, y salen heridos 5 chilenos.

08 de Octubre 1879:

Combate Naval de Punta Angamos. Se enfrentaron el blindado chileno "Almirante Cochrane" al mando de Juan José Latorre Benavente, y el monitor peruano "Huáscar", comandado por el contraalmirante Miguel Grau Serrano. Fue capturado el "Huáscar", la embarcación enemiga más poderosa. Sin embargo, falleció Grau, llamado el "caballero de los mares". Perú sufre 33 muertos y 26 heridos en un épico combate.
10 de Octubre 1879:
Combate de Quillagua.
02 de Noviembre 1879:
Tropas chilenas asaltaron y se apoderaron de Pisagua. Nuestros soldados se dividieron en dos grupos, uno por la playa y otro por los cerros, así tomaron entre dos fuegos a las tropas peruanas y bolivianas. Luego de un sangriento combate, los chilenos se apoderaron de la ciudad. El Estado Mayor evalúa en un centenar los muertos aliados y 56 prisioneros.
06 de Noviembre 1879:
Combate de Agua Santa o Pampa Germanía. Después de un corto tiroteo los chilenos quedaron dueños del campo y de la línea del ferrocarril de Pisagua a Agua Santa. Los "Cazadores" despedazan el destacamento de retaguardia aliado en Pampa Germanía, los aliados pierden unos 60 hombres muertos, entre ellos el Teniente Coronel Sepúlveda, los chilenos 3 muertos y 6 heridos.
18 de Noviembre 1879:
El "Blanco Encalada" captura al barco peruano "Pilcomayo"
19 de Noviembre 1879:
Batalla de Dolores o San Francisco. Luego de diversos vaivenes el Coronel Emilio Sotomayor concentra y atrinchera sus 6.500 soldados en el Cerro San Francisco, donde es atacado por Buendia con 11 mil peruanos, venciendo los chilenos en la Batalla de Dolores o San Francisco, las tropas peruanas se retiran hacía Tarapacá.
22 de Noviembre 1879:
Las tropas chilenas ocuparon Iquique, mientras que las autoridades peruanas abandonaban la plaza, sin quemar ningún cartucho.
27 de Noviembre 1879:
Batalla de Tarapacá. La Campaña de Tarapacá, fue una de las fases de la Guerra del Pacífico, finalizó con la Batalla de Tarapacá, la que se desarrolló en la quebrada del mismo nombre. Esta campaña tenía como objetivo la posesión de la Provincia de Tarapacá. La hazaña de los soldados chilenos, permitió una victoria impensada. Chile se adueñó de la región, y la gesta tuvo un hondo efecto en la población. La valentía demostrada por Eleuterio Ramírez en el combate, lo llevó a ser elevado a héroe nacional. En el centro de San Lorenzo de Tarapacá, un monumento conmemora la contienda del 27 de noviembre de 1879; en una cripta están enterrados los soldados chilenos y un busto recuerda a Eleuterio Ramírez.
06 de Diciembre 1879:
Combate de Tambillo (San Pedro de Atacama): Un destacamento de 25 Granaderos es atacado, mueren 8 y otros 11 son tomados prisioneros, los bolivianos del "Francotiradores" sufren 2 muertos y 1 herido.
01 de Enero 1880:
Combate de Camarones: Muere un granadero y es capturado otro.
27 de Febrero 1880:
Combate Naval de Arica: Lo cierto es que más que un combate, se trata de tres acciones que ocurrieron el mismo día. En el muere el comandante del Huáscar Manuel Thompson.
09 de Marzo 1880:
El Blanco Encalada y el Loa en las islas Lobos: Hunden seis lanchas y capturan 29 animales, llevándose además prisioneros al Capitán de Corbeta Rosas y al Coronel Alaiza.
14 de Marzo 1880:
Fuerte escaramuza entre Chilenos y Peruanos en el frente de Moquegua, resultan heridos 2 soldados del regimiento "Buin" 1º de Línea y muerto 1 Gendarme de Moquegua.
21 de Marzo 1880:
Durante la noche un destacamento de 20 soldados de la Compañía de Cazadores del batallón peruano Grau incursiona sobre el campamento del regimiento de caballería chileno "Cazadores" dando muerte a 3 soldados, mientras tanto las tropas chilenas ya se han puesto en marcha para asaltar la excelente posición peruana.
22 de Marzo 1880:
Batalla de Los Angeles: Las tropas chilenas atacan y se apoderan del cerro de Los Angeles, considerado como inexpugnable. Las fuerzas peruanas estaban bajo las órdenes de Coronel Agustín Gamarra. Antes del medio día, gracias especialmente a una espectacular ascensión por senderos inaccesibles del batallón "Atacama" Nº1 las tropas chilenas derrotan completamente a las peruanas, las que sufren no menos de 28 muertos y 64 prisioneros.
01 de Abril 1880:
Ocupación de Locumba: La Patrulla de Duble Almeida ocupa el pueblo de Locumba, donde son atacados por las tropas del Coronel Albarracin, quienes matan a 3 chilenos y capturan 10, a cambio muere 1 soldado peruano y otro resulta herido.
18 de Abril 1880:
Combate de Buena Vista: Un fuerte destacamento de Caballería Chileno, bajo el mando de José Francisco Vergara destruye un grupo de milicianos peruanos y obliga al Coronel Albarracín a retirarse con los restos de su Escuadrón "Gendarmes de Tacna".
23 de Abril 1880:
Combate Naval de Torpederas en el Callao: Resulta herido el Teniente Manuel Señoret.
10 de Mayo 1880:
Segundo bombardeo del Callao: Los buques chilenos intentan sin éxito un segundo bombardeo del Callao, el monitor Huáscar resulta averiado, en tierra mueren 2 cantineras y 1 soldado, a la vez que salen heridos 24 personas. durante la Guerra del Pacífico.
25 de Mayo 1880:
Combate de torpederas en el puerto de El Callao: Hundimiento de la torpedera peruana "Independencia" y de la chilena "Janequeo", además mueren 2 marinos chilenos y 3 peruanos, salen heridos dos marinos chilenos y son capturados 7 marineros peruanos.
26 de Mayo 1880:
Batalla de Tacna o del Alto de la Alianza: El 1º Ejército del Sur Peruano y el ejército Boliviano (unos 10.000 hombres agrupados en 9 divisiones) son derrotados por el ejército chileno (14.147 hombres agrupados en 4 divisiones) los bolivianos no volverán a participar en una gran batalla contra Chile, mueren más de 500 chilenos y entre 1.000 y 1.200 aliados.
06 de Junio 1880:
Bombardeo de Arica: Se inicia el bombardeo chileno desde las baterías de tierra así como por el mar por los buques Loa, Covadonga, Magallanes y Cochrane. Las defensas peruanas utilizan la Batería Norte, Batería del Morro, Batería del Este y los cañones del monitor BAP Manco Cápac. El Cochrane recibió un impacto de un cañón Voruz de las baterías del morro, que lo hizo explotar provoncado 27 heridos, de los cuales murieron 7 después.
07 de Junio 1880:
Asalto y Toma del Morro de Arica: Las tropas chilenas toman por asalto el Morro de Arica. Ultimo reducto de los peruanos, desde entonces esta ciudad pertenece al territorio nacional. Luego de un cruento combate de alrededor de una hora y media, las tropas chilenas derrotan a la guarnición de esta plaza fuerte, mueren más del 30% de los defensores de la plaza, cumpliendo lo señalado por el Coronel Bolognesi de "luchar hasta quemar el último cartucho"
16 de Julio 1880:
Combate de Palca: Después de la Batalla de Arica, las fuerzas chilenas organizan expediciones a la sierra de Tacna, en donde se encuentra organizada las guerrillas de Pacheco Céspedes, Leoncio Prado y Gregorio Albarracin. Así se realiza el combate entre la guerrilla de Pacheco Céspedes contra el Regimiento Lautaro.
19 de Julio 1880:
Expedición de Salvo a Moquegua: Baquedano despachó contra ellos una expedición a Tarata, al mando de Barbosa, y otra a Moquegua, a las órdenes del sargento mayor Wenceslao Bulnes.
22 de Julio 1880:
Combate de Tarata: Las tropas chilenas del Coronel Barboza despedazan a los guerrilleros peruanos del Coronel Leoncio Prado, quienes sufren 26 muertos, 3 heridos y 21 Prisioneros, los chilenos por su parte sufren 1 muerto.
04 de Septiembre 1880:
La expedición Lynch: Lynch debía desembarcar en los puertos peruanos, empezando en el norte por Paita, para terminar en Quilca; internarse en los valles feraces; imponer contribuciones en dinero o en especies a la propiedad particular; inutilizar los ferrocarriles, y destruir las propiedades, cuyos dueños rehusaran pagar los cupos, teniendo cuidado de no perjudicar a los neutrales.
13 de Septiembre 1880:
Hundimiento de la "Covadonga": Alrededor de las 15:15 estalló el artefacto explosivo, que un marinero sobreviviente comparaba al estallido de cuarenta cañonazos a un tiempo, hundiéndose la Covadonga en dos minutos.
16 de Septiembre 1880:
Nuevo combate de Torpederas en el Callao: Resulta 1 herido en la chilena "Guacolda" y 1 muerto en la peruana "Urcos".
22 de Septiembre 1880:
El Cochrane bombardea Chorrillos: Buques de la escuadra chilena bombardearon los puertos peruanos de Ancón y Chancay, en represalia de la celada que hizo volar la "Covadonga", en el contexto de la Guerra del Pacífico.
23 de Septiembre 1880:
El Blanco Encalada bombardea Ancón.
23 de Septiembre 1880:
La Pilcomayo bombardea Chancay.
05 de Diciembre 1880:
Combate de lanchas en El Callao: Donde murió el aspirante a marina Juan Antonio Morel Zegers.
11 de Diciembre 1880:
Bombardeo del puerto de El Callao: Por el transporte "Angamos". Falleció el teniente Tomás Pérez al explotar un cañón.
24 de Diciembre 1880:
Combate de Pachacamac: A las 2 de la mañana un destacamento compuesto por dos compañías del “Buin”, 2 del “Esmeralda” y 200 “Cazadores” salen hacía Machay a marchas forzadas, a las 4 de la mañana llegan a Pachacamac, poco después sostienen un intenso combate con tropas peruanas emboscadas, sufriendo un muerto, un herido y con el Sargento Mayor Silva Contuso la tropa se repliega llevándose 3 soldados peruanos prisioneros.
27 de Diciembre 1880:
Combate de El Manzano o Pueblo Viejo: Entre tropas chilenas y peruanas, donde murieron los comandantes de ambos ejércitos, en el contexto de la Guerra del Pacífico. El Regimiento Curicó sorprende y prácticamente destruye a la I Brigada de Caballería “Rimac”, en el Manzano por la parte chilena muere el 2º Comandante del Curicó Teniente Coronel José Olano y son heridos 4 soldados, por la parte peruana mueren 16 soldados y son capturados 112 soldados peruanos, entre ellos el Comandante de la Brigada, Coronel Sevilla. Para celebrar el acontecimiento, por orden del día se ordena que todas las bandas de las unidades chilenas toquen el Himno Nacional inmediatamente frente a sus campamentos.
02 de Enero 1881:
Combate de Humay: Las Tropas del Comandante Echevarria atacan y causan serios daños a una montonera peruana en Humay, los chilenos pierden 5 hombres, 2 muertos y 3 heridos, entre los primeros 1 capitán.
09 de Enero 1881:
Combate de Ate: Un destacamento chileno de la II/2ª División bajo el mando del Coronel Barboza, asalta el sector escasamente defendido por los peruanos, luego de un corto combate desalojan a los defensores y quedan dueños del campo, los chilenos se retiran poco después, han sufrido 1 muerto y unos 20 heridos.
13 de Enero 1881:
Batalla de Chorrillos: Las tropas chilenas asaltan las posiciones peruanas, tras un sangriento encuentro capturan una tras otra las posiciones de Villa Santa Teresa, San Juan, Chorrillos y el Morro Solar, mueren más de 2000 hombres por bando en tal ves la batalla más grande de la historia de Latinoamérica.
15 de Enero 1881:
Batalla de Miraflores: Transcurre esta batalla en las proximidades de Lima, donde las tropas chilenas, al mando del general Baquedano, vencen a las peruanas consiguiendo de esta forma el triunfo de la guerra que se iniciara en 1879.
16 de Enero 1881:
Combate de Lurín: Una partida de caballería peruana ataca en las cercanías de Lurín a un destacamento de “Cazadores”, pero estos últimos les vencen, causandoles varias bajas.
07 de Abril 1881:
Combate de San Jeronimo: Lagos envía al Comandante José Miguel Alcérreca, al mando de una fuerza compuesta por tropas del Carabineros de Yungay y del Buin al interior. Ese mes en San Jerónimo, cerca a Santa Eulalia, se inicia la campaña de la Breña con las fuerzas organizadas por el coronel José Agustín Bedoya que se enfrentan a las fuerzas de Alcérreca, las cuales luego de un tiroteo dispersan a los hombres de Bedoya, para luego incendiar el lugar y retornar a Lima.
27 de Junio 1881:
Combate de Sangra: En la sierra peruana, las fuerzas chilenas comandadas por el capitán José Luis Araneda Carrasco, se enfrentaron al enemigo y luego de 13 horas de lucha, se retiró el ejército peruano. De los 36 "buines" que iniciaron el desigual combate, sólo 10 quedaron con vida, a los que la historia reconoce como: "Los diez de Araneda", "Los diez de Sangra".
08 de Agosto 1881:
Combate del puente Verrugas: Las guerrillas de sargento mayor José Osambela obtienen otra victoria en el puente Verrugas.
15 de Agosto 1881:
Combate del puente Purguay: Se libra el combate del puente Purhuay, saliendo de Chosica donde el nuevo batallón Zepita comandado por el teniente coronel Villegas y las guerrillas del coronel Manuel Tafur triunfan sobre las fuerzas chilenas.
02 de Septiembre 1881:
Combate de Calientes: Se produce en la región de Tacna.
03 de Septiembre 1881:
Combate de Pachía: En la región de Tacna se produce el combate, en donde las tropas chilenas derrotan a las guerrillas peruanas, dominando la región.
10 de Octubre 1881:
Combate de Motupe.
21 de Octubre 1881:
Combate de Cienaguilla.
26 de Octubre 1881:
Combate de Guadalupe.
05 de Febrero 1882:
Primer Combate de Pucará: Cáceres pasa por Tarma y Jauja y ocurre el combate con las fuerzas chilenas al mando de Del Canto. Cáceres continúa su marcha ocupando Izcuchaca, Acostambo, Huancavelica, Acobamba.
22 de Febrero 1882:
Combate de Acuchimay: Cáceres vence a las fuerzas rebeldes del coronel Arnaldo Panizo que contaba con 1.500 hombres, tomando sus tropas. Luego de este suceso Cáceres ingresa a Ayacucho.
06 de Marzo 1882:
Combate de Comas.
29 de Marzo 1882:
Combate de Pazos.
31 de Marzo 1882:
Segundo Combate de Pazos.
Marzo a Mayo 1882:
Suceden diversos enfrentamientos como los combates de: Sierralumi, Huaripampa, Huancaní, Llocllapampa, Sicaya, Chupaca, Pazos, Acostambo, Ñahuimpuquio. Las fuerzas chilenas estaban diezmadas por el tifus y la viruela, así Lynch autoriza a Del Canto a volver a Lima con el 2º de Línea trayendo a los heridos y a los enfermos. Los batallones "Pisagua" 3º de Línea y "Santiago" 5º de Línea son enviados como refuerzos.
03 de Junio 1882:
Combate de Marcavalle: Se enfrentan guerrillas peruanas con el batallón chileno Santiago destacado en Marcavalle.
28 de Junio 1882:
Nuevamente se enfrentan guerrillas peruanas con el batallón chileno Santiago destacado en Marcavalle.
09 de Julio 1882:
Segundo Combate de Pucará: Después de que los chilenos se retiran de Marcavalle, fueron perseguidos por dos compañías del Tarapacá, “Fueron empujadas sobre pucará, donde reforzados (los chilenos) por las restantes compañías de su batallón opusieron nueva resistencia.
09 y 10 de Julio 1882:
Combate de la Concepción. A las dos y media de la tarde de este día comienza el combate, considerado por el pueblo chileno, uno de los hechos más dramáticos de la Guerra del Pacífico. Se desarrolló los días 9 y 10 de julio de 1882 en el pueblo peruano de La Concepción. La guarnición completa del regimiento Chacabuco, compuesta por 77 jóvenes entre 16 y 18 años, resistió durante dos días el ataque de dos mil soldados peruanos, que tuvo como resultado la muerte de todo el contingente chileno. La valentía demostrada por los jóvenes, que mantuvo heroicamente alzada nuestra bandera, hizo que el 9 de julio fuera establecido como el día oficial de nuestro emblema patrio.
10 de Julio 1882:
Segundo Combate de La Oroya. Se enfrentan las fuerzas peruanas de Máximo Tafur y las chilenas del 3º de Línea, al mando del Teniente Francisco Meyer en el puente de La Oroya. La guarnición chilena mantiene el control del lugar.
15 de Julio 1882:
Combate de Tarmatambo. La compañía del batallón Lautaro se enfrenta en el caserío de Tarmatambo a las fuerzas dirigidas por el Coronel Juan Gastó y Máximo Tafur en el Combate de Tarmatambo.
16 de Julio 1882:
Combate de San Juan Cruz: Las fuerzas de Cáceres se enfrentan con una compañía del batallón 2° de Línea. Cáceres decide no atacar el pueblo, sino apostar la segunda división y los guerrilleros de San Jerónimo en las alturas cercanas a Tarma.
Febrero 1883:
Combate de Ungatá: Una compañía del Lautaro se enfrenta en Ungará al sur de Lima a guerrilleros locales, los chilenos son apoyados por un escuadrón de Granaderos y mantienen su posición.
14 de Marzo 1883:
Combate de Puruguay.
03 de Abril 1883:
Cáceres llega a la costa de Chancay, para luego atacar a la guarnición del Aconcagua. El coronel Urriola se retira de Chancay y se embarca en la Corbeta Chacabuco recibiendo luego refuerzos desde Lima del 3º de Línea y del Coquimbo por lo cual Cáceres se retira hacia Canta.
20 de Abril 1883:
Segundo Combate de Purhuay. Antes de ordenar una nueva ofensiva contra el ejército de Cáceres, Lynch ordenó la reparación del puente de Purhuay y la línea telegráfica que los montoneros de Chosica habían destruido lo que impedía el transito de las tropas chilenas hacia las zonas ocupadas por la resistencia peruana. Con tal misión partió de Lima el mayor Julio Quintavalla quien arribó a Chosica el 14 de abril, en los días siguientes la fuerza chilena fue constantemente hostilizada por las montoneras peruanas formadas por el batallón Guerrilleros del Rimac al mando del mayor Wenceslao Inchaústegui. El 20 de abril tuvo lugar el combate de Purhuay, a dos millas y media del puente del mismo nombre, tras el cual Quintavalla tuvo que retirarse sin haber logrado cumplir su misión y habiendo tenido 29 bajas entre muertos y heridos y 17 dispersos.
10 de Julio 1883:
Batalla de Huamachuco: Le correspondió ser el último hecho de armas que puso fin a la Guerra del Pacífico. Al ver a las fuerzas de Cáceres en el cerro Cuyulga, Gorostiaga deja el poblado de Huamachuco y se posiciona en el cerro Sazón al norte del pueblo. Se enfrentan ambos ejércitos, Gorostiaga vence a las tropas de Cáceres, quien pierde la mitad de sus hombres. Cáceres retorna a Ayacucho con el fin de organizar un nuevo ejército.
01 de Agosto 1883:
Combate de Coari: Enfrentamiento en el sur del Perú.
02 de Agosto 1883:
Combate de Mirave: Pacheco Céspedes se enfrenta al destacamento chileno al mando del Mayor Duberli de Oyarzun.
20 de Octubre 1883:
Tratado de Ancón: Tratado que pone fin a la guerra del Pacífico, de Chile contra Perú y Bolivia. Perú cede a Chile las provincias de Tacna, Arica y Tarapacá y Bolivia pierde la provincia de Antofagasta.
06 de Enero 1891:
Sublevación de la Escuadra: La Escuadra se levanta contra el Presidente José Manuel Balmaceda.
08 de Enero 1891:
Operaciones de la Escuadra en el sur: Para reunir contingentes y armas para los batallones, se emprendieron diversas expediciones. La "Esmeralda" ancló en Talcahuano e! día 8 de enero y tomó los elementos que había en el buque•escuela N° 2.
12 de Enero 1891:
Acciones en Coquimbo y La Serena: Primeras acciones de la Armada durante la Guerra Civil de 1891.
19 de Enero 1891:
Acciones en Pisagua, Zapiga, Alto Hospicio y Taltal: Primeras acciones de la Armada en el norte, durante la Guerra Civil de 1891.Conocido como el "Combate de los Abrazos", por la confusión que tuvieron los contrincantes en uno de los primeros enfrentamientos de esa guerra.
06 de Febrero 1891:
Captura de Pisagua. Los congresistas tenían su Cuartel General en la zona norte del país, tratando de avanzar hacia el centro del país. Los balmacedista intentaron frenar en esta zona a los congresistas, razón por la cual desarrollaron una serie de combates y batallas en esta región.
15 de Febrero 1891:
Batalla del Cerro Dolores o San Francisco: Las fuerzas gobiernistas afines al Presidente José Manuel Balmaceda fueron derrotadas por los congresistas, en el Cerro Dolores o San Francisco, cerca de Pisagua, provincia de Tarapacá.
17 de Febrero 1891:
Combate de Huara: Entre las tropas gobiernistas contra las congresistas en la estación de ferrocarril de Huara, que unía Iquique con Pisagua, en la I Región.
19 de Febrero 1891:
Combate de la Aduana de Iquique. Desde Iquique fueron enviadas fuerzas balmacedistas hacia el interior, por lo que esta ciudad quedó desprotegida. Aprovechando esta situación, las naves congresistas avanzaron hacia el puerto, llegando alrededor de las 05:00 hr.. A seis kilómetros de Iquique, se pudo divisar a cuatro embarcaciones congresistas alumbrando con sus proyectores los cerros para disparar sobre la tropa balmacedista que intentara descender al puerto.
07 de Marzo 1891:
Batalla de Pozo Almonte: Los balmacedistas habían perdido la mayoría de sus hombres y municiones, lo que sumado a la alta deserción de sus partidarios, generó el envío de 1.000 hombres desde Santiago.
19 de Marzo 1891:
Ocupación de Antofagasta Tacna y Arica: Apenas la provincia de Tarapacá estuvo libre de fuerzas enemigas, se planteó a los congresistas la necesidad de adueñarse inmediatamente de las provincias de Tacna y Arica, Antofagasta y Atacama.
23 de Abril 1891:
Hundimiento en Caldera del "Blanco Encalada": Los balmacedistas hunden en la rada de Caldera el barco "Blanco Encalada".
07 de Julio 1891:
Combate de Vallenar: El coronel Orrego, jefe de la división de Coquimbo, ignorando que venían en camino tropas constitucionales de infantería, dio orden al teniente coronel Almarza que atacara por sorpresa.
18 de Agosto 1891:
Desembarco en Quintero: Las fuerzas congresistas desembarcan en Quintero. 300 soldados del Pisagua N° 3, conducidos por botes que se desprendieron del "Biobio", se posesionaban sin oposición del pueblecito de Quintero.
21 de Agosto 1891:
Batalla de Concón: Fue la penúltima acción de la Guerra Civil de ese año y el primer enfrentamiento de las fuerzas revolucionarias o congresistas, comandadas por el coronel Estanislao del Canto Arteaga. Las fuerzas congresistas se concentraron en la bahía de Quintero y estaban al mando del General Estanislao del Canto.
28 de Agosto 1891:
Batalla de Placilla. La Guerra Civil de 1891 finalizó el 28 de agosto de 1891 en la Batalla de Placilla, pequeño pueblo situado a la bajada del Alto del Puerto, en el camino de Casablanca, lugar donde se enfrentaron las fuerzas que apoyaban al gobierno del presidente José Manuel Balmaceda Fernández, con las fuerzas de los congresistas o revolucionarias, obteniendo el triunfo estos últimos.

Bernardo O´Higgins

Bernardo O´Higgins

Ramon Freire

Ramon Freire

Joaquin Prieto

Joaquin Prieto

Mujeres Destacadas de la Historia de Chile


Paula Jaraquemada Alquizar: (Santiago junio de 1768 - † falleció el 7 de septiembre de 1851). Hija de Domingo de Jaraquemada y Cecilia de Alquizar, fue uno de los personajes femeninos más importantes en la lucha por la independencia de Chile. ir a Bio,,,

Francisca Javiera Eudoxia Rudecinda Carmen de los Dolores de la Carrera y Verdugo (Santiago, 1 de marzo de 1781 - † ibídem, 20 de agosto de 1862), más conocida como Javiera Carrera, fue una patriota chilena que destacó por el apoyo a la lucha por la Independencia de Chile y por bordar la primera bandera patria del país, llamada actualmente bandera de la "Patria Vieja". Los Carrera eran descendientes de vascos. ir a Bio...

Catalina de los Ríos y Lisperguer: (*Santiago de Chile, 1604 - † 1665), más conocida como La Quintrala, fue una terrateniente chilena de la época colonial, famosa por su belleza y la crueldad con la que trataba a sus inquilinos. Se convirtió en un ícono del abuso y la opresión colonial. Su figura, fuertemente mitificada, pervive en la cultura popular de Chile como el epítome de la mujer perversa y abusadora. Para tildar a una mujer de abusadora en Chile se le dice "Quintrala". ir a Bio...

Candelaria Pérez: (* Santiago de Chile, 1810 - † 28 de marzo de 1870), también conocida como Sargento Candelaria, fue una militar chilena que participó en la Guerra contra la Confederación Perú-Boliviana. ir a Bio...

Irene Morales Infante (La Chimba, Santiago, 1 de abril de 1865 — † Santiago, 25 de agosto de 1890) Militar chilena, Sargento segundo y Cantinera del Ejército de Chile durante la Guerra del Pacífico. ir a Bio...

Janequeo o Yanequén: Fue una mujer lonco, de origen mapuche-pehuenche. Esposa del Lonco Hueputan, quien murió bajo tormentos por mandato del gobernador Alonso de Sotomayor. Su preparación militar y cualidades de líder, hicieron que se ganara el apoyo de los estrategas militares de su pueblo. ir a Bio...

María Isabel Riquelme y Meza: (* Chillán Viejo, Región del Biobío, Chile 1758 - † Lima, Perú 21 de abril de 1839), fue la madre del Libertador General de Chile, Bernardo O'Higgins. ir a Bio...

Rosa O'Higgins: (* Chillán Viejo, Región del Biobío, Chile 1781 - † Lima, Perú 1850), chilena hija de Isabel Riquelme y Félix Rodríguez Rojas. En los años de la lucha de la independencia chilena adoptó el apellido de su medio hermano Bernardo O'Higgins con quien viviese sus primeros años de su niñez. ir a Bio...

Eloísa Díaz Insunza: (* Santiago de Chile, Chile, 25 de junio de 1866, † Id. 1 de noviembre de 1950), primera mujer estudiante de medicina de la Universidad de Chile y primera médica de Chile y América del Sur. ír a Bio...

Guacolda: La existencia de Guacolda, mujer de Lautaro, así como la de Fresia, mujer de Caupolicán, es materia de discusión puesto que mientras para unos es sólo una leyenda, para otros se trata de una persona real. ir a Bio...

Fresia: La existencia de Fresia, mujer de Caupolicán, así como la de Guacolda, mujer de Lautaro, es materia de discusión, puesto que sólo aparece en el poema épico "La Araucana", escrito por Alonso de Ercilla y Zúñiga (1533-1594) durante su estadía en Chile y publicado en Madrid en tres partes (1569, 1578 y 1589). ir a Bio...

Inés de Suárez o Inés Suárez: (Plasencia, Extremadura, España, 1507 - Chile, 1580) fue una mujer española reconocida en el período de la conquista de Chile y compañera del conquistador Pedro de Valdivia. ir a Bio...

Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga: Conocida por su seudónimo Gabriela Mistral (Vicuña, 7 de abril de 1889 – Nueva York, 10 de enero de 1957), fue una destacada poetisa, diplomática y pedagoga chilena. ir a Bio...

HITOS:

1865 Mujeres de Clases alta y católicas se expresan en el Periódico “El Eco de las Señoras de Santiago”

1875 Clotilde Garretón se inscribe en los registros electorales, porque cumple con las exigencias de la ley.

1877 Promulgación del Decreto Amunategui, da derecho a las mujeres para que ingresan a la Universidad.

1884 Martina Barros intelectual que comienza a dar discursos sobre el voto femenino.

armón de un cañon de 1810

armón de un cañon de 1810










Eric Hobsbawm: "El SigloXX"

El Choque de las Civilizaciones. Samuel Huntington

El Fin de la Historia. Francis Fukuyama